Prado Transformados Metálicos entrega una nueva nave logística en el Puerto de Barcelona
9 de noviembre de 2007
La plataforma logística del puerto de Barcelona es en la actualidad el área industrial más grande y activa de España y una de las más dinámicas de Europa. Su proximidad a importantes infraestructuras de transporte y nudos de comunicaciones, la convierte en una de las áreas industriales mejor conectadas del mundo. Recientemente, la ingeniería catalana Cubic 33 ha contratado a Prado TM el suministro de la estructura para esta nave metálica que se destinará a usos logísticos y cuyo cliente final es el Grupo Suardiaz.
El Grupo Suardiaz está formado por seis empresas dedicadas al transporte marítimo y a la logística, tiene su sede en Madrid y oficinas en 15 ciudades españolas. Las distintas empresas del grupo operan como armadores, con buques roll on - roll off / car carriers, realizan actividades de agenciamientos y operaciones portuarias, así como de transporte terrestre de carretera y ferrocarril.
La nave en cuestión es una nave industrial, modelo “2LF” adosados, de columnas articuladas, formando una cubierta a 4 aguas con un pilar intermedio y un voladizo en marquesina por encima de las puertas de 2 metros. La nave mide 57, 08 metros de ancho y 76,58 metros de largo y una altura al alero de 11,2 metros.
Se compone además por una estructura primaria, formada por pórticos armados en doble T de sección variable con arranque de pilares a –0,40 metros y a 1,60 metros los de muelles; y estructura secundaria formada por correas de perfil en Z, en acero galvanizado. Además, esta estructura incluye huecos y premarcos estructurales para 15 puertas en fachadas y 14 exutorios en cubierta.
La actividad en los puertos españoles no cesa
Este nuevo desarrollo se explica por el gran dinamismo que está cobrando el negocio portuario a lo largo de todo el litoral, con puertos como el de Algeciras, Barcelona, Valencia, Bilbao o Tarragona que baten cada año sus propios récords, tanto de tráfico de mercancías como de pasajeros. Muestra de ello son los datos del organismo público Puertos del Estado, según el cual los 46 puertos españoles de interés general movieron en 2006 un total de 460,8 millones de toneladas, lo cual supone un aumento de 4,7 por ciento respecto a 2005 y crecimientos acumulados en los últimos cinco años de cerca del 40 por ciento.
Este gran despegue de la actividad portuaria ha generado a su vez un aumento de la demanda de servicios, por lo que se espera que el negocio de servicios portuarios crezca un 8 por ciento y alcance los 4.000 millones de euros en 2008.
Este incremento sostenido del volumen de tráfico responde a dos factores. Por un lado, la importancia creciente del transporte marítimo como la alternativa económica y medioambiental al transporte por carretera en Europa. Por otro, a las mejoras e inversiones en infraestructuras portuarias que se vienen realizando en los últimos años en los puertos españoles. El objetivo central es la modernización y ampliación de sus instalaciones para la captación de tráficos de contenedores y la mejora de la gestión de mercancías. Dos ejemplos claros de mejora de infraestructuras son los puertos de Barcelona y Valencia, ambos en plena fase de ejecución de sus nuevos planes estratégicos y grandes competidores por el liderazgo en el tráfico de mercancías y contenedores en el Mediterráneo Occidental. El suelo parece escasear para atender la demanda creciente de instalaciones de este tipo: centros de distribución, almacenaje e incluso plantas de producción y su precio se multiplica como en el caso del puerto de Barcelona, donde el suelo logístico de alquiler es un 34 por ciento más caro que el de Rótterdam. Para paliar este déficit y ganar en competitividad, los puertos de Barcelona y de Valencia, por ejemplo, planean aumentar sus superficies terrestres y marítimas de aquí a 2015, optimizando así el negocio de su logística portuaria.
En el caso de la ZAL de Barcelona se prevé llegar a los 500.000 metros cuadrados de naves logísticas. En cuanto a tipologías de naves más demandadas en puertos, en el caso de Barcelona, tiran con fuerza las naves de almacenaje industrial de muy variados tamaños por ser uno de los puertos de más importancia del Mediterráneo. Por su parte en Valencia, con la ampliación del puerto, se tiende a los desarrollos de la modalidad llave en mano para demandas superiores a los 5.000 metros cuadrados.