No sólo de suelo vive la logística
Isaac Albert i Agut, presidente consejero delegado de Cimalsa
31/05/2024La ciudad de Barcelona y su región metropolitana son líderes en el avance del Estado en la economía del conocimiento y se consolida como un referente de innovación a nivel mundial. En estos momentos es el 4º ecosistema de startups del mundo.
Sabemos que la competitividad y la sostenibilidad de la industria y de su cadena logística pasa porque el ferrocarril gane peso y consiga una cuota de mercado que le permita ser más eficiente. La promoción de la multimodalidad y la descarbonización del transporte de mercancías es un elemento estratégico en el desarrollo y competitividad de la actividad económica del país y de sus empresas.
En este sentido el servicio de transporte ferroviario es un ecosistema muy interrelacionado y dependiente de muchos factores y variables y es necesario trabajar desde una visión global de servicio. La apuesta decidida por unas terminales multimodales gestionadas por una empresa pública con participación privada garantiza que se pueda aplicar un modelo en que prime el equilibrio entre negocio, estrategia y redistribución territorial.
Sin dudar de la importancia de tener disponibilidad de suelo para la instalación de empresas del sector, no sólo de suelo vive la logística. De nada sirve tener miles de metros cuadrados a disposición de la logística si no hay las infraestructuras necesarias o éstas están mal diseñadas o mal dimensionadas para la distribución de la mercancía. Si no disponemos de servicios complementarios indispensables o somos incapaces de generar entornos competitivos para el desarrollo industrial y empresarial no es útil.
La calidad de un sistema logístico y su valor añadido pasa por adaptarse a las necesidades de presente y sobretodo de futuro de la industria y de las empresas logísticas. En este sentido, el desarrollo estratégico y con vocación de servicio de terminales ferroviarias multimodales de mercancías pasa por las empresas que desean subir su mercancía al tren; por los cargadores, que son los que conocen las necesidades de carga según el producto, y por el territorio, generando oportunidades, diversificando y avanzando en el reequilibrio económico y social del país.
Digitalización, descarbonización, gestión, recursos de alto valor añadido (zonas urbanas bien desarrolladas y con capacidad de atracción, mano de obra cualificada, servicios de calidad para las personas que trabajan en el sector), estrategia logística a largo plazo, son elementos que conforman la toma de decisiones de las empresas logísticas, más allá de la disponibilidad de suelo. Aunque el suelo es un recurso escaso, es mucho más escasa la existencia de una estrategia logística de largo recorrido.