Según la UPM, la huelga general en el metal catalán fue “desigual”
1 de octubre de 2010
En cuanto a las grandes empresas y los polígonos industriales del cinturón industrial de Barcelona, “el seguimiento se puede estimar en un 65%. En este caso, los piquetes han sido violentos y no solo informativos, impidiendo el acceso a las fábricas y ejerciendo acciones intimidatorias, la cual cosa ha provocado que muchos trabajadores no hayan podido ir a trabajar”.
“Tenemos la sensación que el seguimiento de la huelga ha sido, de manera bastante generalizada, forzada. No tanto por la propia convicción o por estar de acuerdo con las razones de la movilización. En buena parte, las dificultades para ir al trabajo han impedido a muchos trabajadores y a muchas empresas el libre ejercicio de su derecho al trabajo”, declaró Marsal.