¿Síndrome del edificio enfermo?

En edificios como hospitales cada vez tienen una mayor preocupación por mantener un aire adecuado a sus necesidades.

Hospitales, oficinas, hoteles, restaurantes, escuelas, museos, y así una larga lista de edificios y espacios donde la preocupación por mantener un aire adecuado para las necesidades de la propia construcción y de las personas que lo ocupan no hace más que aumentar. Cuando hablamos de mejora de la calidad de aire interior, no hacemos otra cosa más que hablar de la reducción de contaminantes, ya sean virus como el responsable de la Covid-19, partículas, o contaminantes gaseosos, que también tienen un efecto directo sobre la salud de las personas. Lo que tratamos de evitar es que el edificio caiga 'enfermo' debido a una mala calidad del aire.

Estos contaminantes de diversa índole pueden estar presentes en varias fuentes de aire, ya sea en el aire exterior, aire de impulsión, aire interior, aire de extracción o aire de expulsión. Y si hay algo común en la gran mayoría de los contaminantes, es que independientemente de dónde se encuentren, están intrínsecamente unidos a la temperatura y humedad del aire, por lo que la aeración, tratamiento del aire y renovación del mismo jugarán un papel fundamental en la mejora y mantenimiento de su calidad.

Hay que tratar de evitar que el edificio caiga 'enfermo' debido a una mala calidad del aire.

Si nos centramos exclusivamente en el aire interior, un posible enfoque para aumentar su calidad podría ser el de airear y renovar el aire mediante ventilación natural siempre y cuando el aire exterior fuera de mejor calidad. Pero, ¿qué ocurre cuando esto no ocurre, cuando el bienestar de las personas se ve perjudicado, o cuando la eficiencia energética se ve comprometida?

Según la OMS, la contaminación del aire es el mayor riesgo para la salud, y mata a 7 millones de personas cada año en el mundo. Existe una relación directa entre las partículas finas y el aumento de la mortalidad. Pasamos hasta el 90% de nuestro tiempo en interiores, y el aire que respiramos afecta tanto a nuestra salud como a nuestro rendimiento. El aire interior puede estar hasta 50 veces más contaminado que el aire exterior debido a la combinación de la contaminación del aire exterior y los contaminantes interiores que creamos nosotros y nuestro entorno. Para reducir los síntomas asociados a la mala calidad del aire (dolor de cabeza, tos, alergias, problemas respiratorios, irritación ocular, etc.), es fundamental la ventilación, pero también una purificación del aire eficiente.

La colaboración de Camfil y Ziehl-Abegg en el desarrollo de la nueva gama de purificadores City demuestra cómo la combinación de tecnologías punteras puede proporcionar a muchos de estos edificios 'enfermos' una cura a su mal.

Durante más de medio siglo, la empresa Camfil se ha especializado en la fabricación de soluciones para la filtración y purificación de aire, ayudando a millones de personas a respirar un aire más limpio. Los purificadores de la gama City, equipados con los filtros absolutos HEPA (High Efficiency Particle Arresting), que incorporan ventiladores con tecnología ECblue de Ziehl-Abegg son buena prueba de ello. La eficacia de estos filtros se mide en MPPS (tamaño de partícula más penetrante), la más difícil de retener por un filtro. El MPPS está generalmente entre 0,1 y 0,25 micras, y la gama City está dotada exactamente con filtros HEPA H14, con una eficacia del 99.995 %. Esto significa que el filtro de clase H14 solo permite el paso del 0,005 % de las partículas de 0,1 micras. Considerando que las partículas del virus Sars-Cov-2 son de 0,1 micras, la gama City se convierte en un gran aliado en la lucha contra la pandemia. Y al incorporar ventiladores altamente eficientes de Ziehl-Abegg , el filtrado de aire se realiza con unos niveles sonoros y consumos energéticos extraordinariamente bajos.

El ventilador 'plug-and-play' ZApilot de Ziehl-Abegg , incorpora los últimos avances tecnológicos que son aprovechados completamente en los purificadores de aire de Camfil. El uso de motores de tecnología ECblue (electrónicamente conmutados) con una regulación con señal 0-10 V proporciona un consumo energético muy contenido. El rodete de material compuesto de alto rendimiento y el módulo que integra deflectores de flujo para reducir turbulencias siguen un diseño biónico, resultando una solución extremadamente silenciosa que aumenta la eficiencia en un 10% en comparación con los estándares habituales del mercado.

Las ventajas y beneficios asociados a la instalación de purificadores, ya sea en laboratorios, hospitales, entornos laborales, oficinas, etc., queda patente en muchos aspectos. La mejoría, en general, de la salud personal es muy significativa, menos bajas laborales, mejora del estado de ánimo y rendimiento, pulmones más limpios reduciendo asmas y alergias, mejora de la presión sanguínea, la digestión y el sistema inmune, entre otros beneficios.

Ya que la productividad en general va íntimamente ligada a la calidad del aire interior, el uso de tecnologías eficientes como pueden ser los purificadores de la gama City de Camfil y los ventiladores con motores ECblue de Ziehl-Abegg se identifican como un elemento clave para su consecución.