Entrevista a Emilio Mateu, CEO de TCI Cutting
TCI Cutting cumplirá 20 años dentro de pocos meses. La empresa, con sede en Valencia, ha logrado a lo largo de estos cuatro lustros situarse entre las empresas más representativas en el diseño, desarrollo y fabricación de máquinas de corte de chorro de agua a alta presión —waterjet— y de máquinas de corte por láser. Su modelo de negocio ‘B2B’, con tres unidades de negocio diferenciadas (waterjet, láser fibra y automatización), junto a un software inteligente de gestión, le permiten ofrecer soluciones tecnológicas de vanguardia para ayudar a sus clientes a ser más competitivos y a introducirse en el mundo de la innovación tecnológica y la automatización de sus procesos industriales en el ámbito de la Industria 4.0. Pero TCI Cutting es, más allá de sus logros tecnológicos, el resultado de la visión de futuro de su CEO, Emilio Mateu.
20 años se dice rápido, pero ha llovido mucho desde entonces. Háganos un repaso de cómo comenzó la empresa.
Estos 20 años han sido una carrera hacia la innovación, adaptándonos en todo momento a las necesidades de los clientes, a los cuales hemos sabido escuchar y les estamos muy agradecidos.
TCI Cutting fue fundada en 2001 para desarrollar máquinas de corte por agua ‘waterjet’, motivados por las necesidades de corte en sectores tan dispares como el de transformación de chapa, el cerámico y el de los marmolistas. Posteriormente en 2005 entramos en el sector aeronáutico y defensa al desarrollar, en nuestro departamento de I+D, un sistema de corte 3D único en el mercado. Un sistema que permitía mecanizados impensables en materiales técnicos como la fibra de carbono y el acero templado de gran espesor.
Posteriormente, en 2009, la empresa dio un paso cualitativo al entrar a formar parte del pequeño grupo de empresas europeas que fabricaban máquinas de corte láser, tanto de CO2 como de fibra.
En la actualidad, TCI Cutting está centrada en el desarrollo de sistemas totalmente automatizados para procesos de corte que requiera cualquier empresa de cualquier sector. Es decir, el cortar bien se da por hecho, lo importante ahora es hacerlo rápido y de manera competitiva. Hoy es necesario lograr un corte totalmente automatizado dentro de cualquier proceso productivo, con una adquisición de datos en tiempo real y una toma de decisiones autónoma para ser altamente competitivos.
Tras la crisis por la COVID-19, Emilio Mateu confía en que se abran nuevas oportunidades: “En los próximos años Europa se va a tener que reindustrializar, la deslocalización en la fabricación se va a revertir”.
¿Qué carencias detectaron por aquél entonces que les motivó a apostar por este mercado?
Hace 20 años, en el mundo del corte, estaba todo por hacer, mucho corte manual, improductivo, de baja calidad y poco competitivo.
En aquellos años, los desarrollos avanzaban rápido. Sin embargo, ahora en el 2020, es mucho más complicado. En este mundo globalizado en el que hemos estado viviendo hasta hace unos meses, existía mucha competitividad tecnológica, es decir, el desmarcarte respecto tus competidores suponía un esfuerzo extra de creatividad y visión sobre las necesidades de los clientes.
Sin embargo, motivados por los acontecimientos actuales, todo esto está cambiando. Hay un giro radical hacia la fabricación local, lo cual va repercutir en la necesidad de una reindustrialización totalmente automatizada en Europa.
Estos próximos meses van a ser muy interesantes para ver qué empresas van a poder adaptarse a este nuevo concepto de fabricación inteligente y totalmente automatizado.
¿Han cambiado mucho las demandas de los clientes? ¿Qué buscaban entonces y qué buscan hoy?
En aquella época la demanda se centraba en el producto, la calidad de la máquina era determinante. Ahora el mercado es más maduro y exigente, la competencia es muy agresiva y la calidad de la máquina se presupone. La Industria 4.0 exige máquinas autónomas, automatización a medida, softwares inteligentes de gestión de la producción para toma de decisiones autónomas, que el mantenimiento sea predictivo, en conclusión, una fábrica del futuro sin parones que esté automatizada 360º, donde los tiempos de servicio al cliente sean mínimos y la flexibilidad de la fábrica la máxima.
Para todo ello la flexibilidad al momento de fabricar es determinante, el cliente lo exige.
¿Cómo ha evolucionado la tecnología durante estos años?
Ha cambiado muchísimo. Nosotros siempre hemos apostado por estar a la vanguardia tecnológica, de ahí nuestro liderazgo en el mercado de corte. Siempre hemos contado con un departamento de I+D muy flexible y cualificado. Eso forma parte de nuestro ADN corporativo.
Cualquier desarrollo de más de siete años hasta ahora ha sido un desarrollo obsoleto, haciendo un símil deportivo, es como pilotar un Fórmula 1, te equivocas de marcha y te pasan varios competidores en segundos. No te puedes equivocar.
¿Y la competencia? Hoy hay diversas opciones disponibles en el mercado… ¿cómo saber qué elegir?
Debemos respetar mucho al cliente. Nunca ha estado tan bien informado sobre todas las posibilidades que ofrece el mercado global. Se ha vuelto muy exigente, pero quien busque soluciones de vanguardia tecnológica para corte industrial aquí nos tiene. Somos los más flexibles y, por supuesto, sabemos escuchar. Estudiamos cada caso como único, siempre hay una solución tecnológica adecuada para cada necesidad. Llevamos ya 20 años ayudando a las empresas siendo su socio tecnológico. En este momento estamos centrados en ayudar al tejido industrial a transformarse digitalmente y a automatizar sus plantas de producción.
¿Cuáles son los puntos fuertes de TCI Cutting?
Sin lugar a dudas el equipo de técnicos que forma TCI Cutting. Es un equipo multidisciplinar que tiene una enorme flexibilidad para ofrecer al cliente un enfoque constante de soluciones a medida, lo cual hace que nuestros clientes sean enormemente competitivos.
Por otra parte, la enorme adaptación a las necesidades de los clientes permite situarnos en la vanguardia tecnológica, así como, la cercanía con nuestros clientes permite establecer una relación estratégica de socio tecnológico. Nuestra dilatada experiencia en todas las tecnologías de corte o nuestro equipo de expertos en diferentes especialidades, nos hace únicos.
Mencionar además que toda nuestra fabricación es 100 % europea. TCI Cutting es una Smart Company que transforma empresas en Smart Factories, ese es nuestro saber hacer y nos sentimos orgullosos de ello.
En TCI Cutting tienen claro que “la Industria 4.0 exige máquinas autónomas, automatización a medida, softwares inteligentes de gestión de la producción para toma de decisiones autónomas, que el mantenimiento sea predictivo, en conclusión, una fábrica del futuro sin parones que esté automatizada 360º’.
¿Cómo incorporan la automatización y la Industria 4.0 a sus soluciones de corte en TCI Cutting?
Sabemos que la automatización a medida y los softwares inteligentes son determinantes en los procesos de transformación digital de la Industria 4.0. De hecho, su peso a la hora de alcanzar procesos productivos óptimos es determinante. Las necesidades de los clientes marcan nuestro portafolio de productos y servicios, en conclusión, nuestras soluciones de corte industrial.
Recién salimos de un reto como el de la crisis sanitaria de la COVID-19 ¿Qué esfuerzo ha supuesto y qué decisiones han tenido que tomar para afrontar esta situación?
Intentamos sacar todo lo positivo de este tipo de situaciones. Sin duda después de una situación como la que estamos viviendo, vamos a ver una serie de oportunidades que debemos aprovechar.
Es importante que entendamos que en los próximos años Europa se va a tener que reindustrializar, la deslocalización en la fabricación se va a revertir, los estados han percibido la enorme necesidad de fabricar de forma local. Lo cual nos lleva a pensar en que la industria del futuro va a ser una industria totalmente automatizada, con toma de decisiones autónomas. En este aspecto España debe aprovechar la enorme oportunidad que posee de poder convertirse en la fabrica de Europa. Si no la aprovecha serán otros países los que tomen la alternativa, como Portugal o Italia.
Nuestra mentalidad de mejora continua hace, en estos momentos, poner en valor el mejor aspecto de TCI Cutting, saber adaptarse al nuevo futuro. El mercado está cambiando y nosotros cambiamos con él, siempre con el objetivo de satisfacer la necesidad de nuestros clientes en la mayor brevedad posible.
Las instalaciones de la empresa están ubicadas en Guadassuar, Valencia.
Igualmente vivieron la crisis de 2008 sin duda. ¿Cómo hace una empresa para sobrevivir a estas situaciones y, si es posible, salir fortalecido?
La experiencia es inolvidable y además muy reciente. 2008 fue un tsunami para todos. En 2008 no sobrevivió ni el más poderoso ni el más fuerte, sino el que supo adaptarse y ahora pasará mas de lo mismo. A nosotros nos ayudó a entender que todo lo establecido puede cambiar en un momento y que debemos mantener vínculos muy fuertes con todos nuestros grupos de interés, somos sus socios tecnológicos de confianza. El saber escuchar a los clientes y saber adaptarnos día a día a los factores cambiantes de la industria, va a ser determinante.
Para finalizar, ¿cuáles son sus planes a futuro más inmediatos? ¿Y un sueño que nos pueda confesar?
Seguir trabajando sin descanso para ofrecer las mejores soluciones en ingeniería de producción a nuestros clientes. Que nuestros clientes tengan procesos productivos totalmente automatizados, autónomos y competitivos, donde su única preocupación sea atender a sus clientes y que tengan las herramientas necesarias para adaptarse a sus necesidades día a día.
En cuanto a mercados y evolución de la compañía, mi sueño cercano es que TCI Cutting se consolide en el mercado americano, sabemos que es un mercado muy exigente, pero estoy convencido de que este sueño se hará realidad algún día con mucho esfuerzo.