Germans Boada reduce un 30% su stock medio con la implantación de Smart Factory Logistics de Bossard
Germans Boada es una empresa de carácter familiar, fundada en 1951, que ofrece soluciones diferenciadas a profesionales de la construcción, diseñando, fabricando y comercializando aquellas herramientas, productos y equipamientos auxiliares que les sean necesarios para ejercer su actividad con la misma eficacia, rentabilidad y seguridad.
Su ámbito de especialización es la fabricación de herramientas y maquinaria para el corte, la manipulación y la colocación de cerámica y otros materiales de obra utilizados en la construcción de obra nueva y en la rehabilitación de edificios.
Una de las huellas más notorias que nos ha dejado la crisis es que las empresas han aprendido la importancia de reducir los costes fijos para contribuir a garantizar la continuidad de la empresa. En este sentido, los materiales más económicos, aquellos llamados C, son los que más coste provocan a una empresa. Tienen coste de gestión de compras (repetitivas en la mayoría de casos), coste de gestión en la recepción del material en la empresa, ubicación, movimientos innecesarios en las líneas de producción, y en definitiva, tiempo perdido por los operarios de fábrica que repercute directamente en la facturación.
Conscientes de ello, Germans Boada pidió a Bossard que le hiciera una propuesta de servicio integral de suministro de material de gran variedad y calidad, sobre el que poder hacer pedidos just in time, con una solución logística ágil y fiable, acompañada de soporte en consultoría técnica.
La empresa Bossard, como proveedora referente internacional de soluciones para productos y servicios en el ámbito de la tecnología de conexión y ensamblaje industriales, realizó una minuciosa auditoría técnica para confeccionar la propuesta.
La solución para Germans Boada consistió en la automatización de su almacén a través de la implantación de la Smart Factory Logistics, un sistema que por sí mismo realiza el pedido vía datos al proveedor: cuando el material llega a un peso mínimo, el software envía un lote de pedido, señal que diariamente llega a sus instalaciones logísticas, y desde ahí, se gestionan directamente los pedidos y se envían a la fábrica. Una vez por semana, el proveedor gestiona el aprovisionamiento del almacén automatizado.
Los beneficios a día de hoy han sido:
- Eliminación de:
- Compras semanales del material, son automáticas.
- Retrasos en las entregas, está dimensionado según el consumo.
- Portes urgentes, cuando un material es necesario para no parar una línea.
- Gestión del personal de recepción y ubicación, se externaliza dicho servicio.
- Disminución del movimiento de cada operario para aprovisionar su propio puesto, ahora lo hace un equipo y repone cada uno de los puestos.
- Reducción de las referencias, hemos pasado de la gestión de 35.000 a 20.000 referencias gracias a la consultoría técnica.
Estas mejoras, además de suponer una reducción del coste fijo de Germans Boada, influyen en su gestión interna, puesto que se libera personal para realizar otras operaciones más importantes.
El éxito de este caso práctico evidencia la misión de Bossard: que los clientes sean cada vez más rápidos, mejores y más productivos en el día a día. No basta con entregar piezas B- y C-. La metodología Smart Factory Logistics incluye un análisis completo de gestión logística en términos de entrega, consolidación de proveedores, funcionamiento y mantenimiento, e incluso una consultoría estratégica de clientes.