La economía española salió de la recesión con un crecimiento del PIB del 0,2%

El año pasado la economía mundial experimentó un crecimiento del 3% en su conjunto, según datos del FMI. Los países emergentes y en desarrollo han sido los de mayor impulso. Éstos crecieron una media de 4,7% pese a las tensiones financieras. El informe anual sobre la industria asegura que una parte de estas tensiones tenían relación con la 'reserva federal de los EE UU'. Donde el informe remarca la disminución gradual de los estímulos monetarios. A partir de estos datos, la Generalitat de Catalunya ha profundizado sobre la actividad de la industria catalana.

El cambio en la política monetaria, la mejora del crecimiento en los países desarrollados y la desaceleración de algunas economías emergentes provocó que los inversores empezasen a desconfiar de los mercados donde habían apostado de forma destacada cuando las economías avanzadas entraron en crisis, anota el informe de la Generalitat de Catalunya.

“La tensión financiera se inició en Argentina y rápidamente se extendió hacia otras economías emergentes, las cuales sufrieron salidas de capital y depreciaciones de sus monedas” según asegura el Departamento de Empresa y Ocupación del gobierno catalán.

La economía española salió de la recesión con un crecimiento del PIB del 0,2% en los dos últimos trimestres. Cabe destacar que según el informe el PIB interanual tuvo cifras negativas todo el año. La variación interanual es del -1,2%. Queda entonces por debajo de la zona euro (-0,4%).

En relación a la demanda, la actividad interna se anotó otra caída pero de forma más moderada que el año anterior. El consumo de las administraciones públicas cayo al igual que el consumo de los hogares, -2,2 y -2,1%.

Pese a la caída del consumo de las administraciones y al de los hogares, la formación bruta de capital seguida de la construcción son las que decrecieron significativamente con un -5,2 y un -9,6% respectivamente. En cambio, el informe remarca que la inversión de bienes de equipamiento aumentó un 1,7%.

La demanda externa se mantuvo el pasado año en su dinámica, con un crecimiento del 1,5%. El crecimiento de las exportaciones, superior a las importaciones, posibilitó el impulso.

En relación a la oferta, el sector que más creció es la agricultura (4,1%) seguida por los servicios (0,5%) y la industria (0,3%). El sector más afectado sigue siendo la construcción con una cifra negativa del 7,7%.

Los sectores más destacables son las artes graficas, los plásticos, los materiales de construcción, la producción y primera transformación de metales, los productos metálicos, la maquinaria y material eléctrico, y finalmente los sistemas y componentes para la automoción.

La producción de artes graficas registró una caída del -3,5%. Cifra inferior a la del 2012 con un -6,2%. Los precios aumentaron un 5,4% y la ocupación continua cayendo pero es menos pronunciada (-5,6%). El comercio exterior incrementó un 2,5%, muy por debajo del incremento del 2012 con un 58%. Por otra parte, las importaciones se redujeron un -15%, al contrario que en 2012 donde hubo un incremento del 18,7%. En relación al saldo comercial fue claramente deficitario.

El sector de plásticos registró un retroceso en la demanda interna en 2013. El apunte positivo se encuentra en el ligero crecimiento de la producción de volumen en consecuencia de las exportaciones. Los precios aumentaron suavemente a causa de la demanda y de la moderación de los precios del petróleo.

El sector de fabricación de productos representa un 3,9% del VAB industrial y el 4,6% de la ocupación industrial. Cabe añadir que este sector dejó de caer en 2013 y da señales de recuperación. El impulso proviene del crecimiento de las exportaciones hacia Europa. Además, significa el mejor comportamiento de la demanda interna y la contención de los precios de la energía.

En 2013 se mantienen los resultados de los cuatro años anteriores. El informe incluye el sector de la construcción y los materiales de construcción. De esta manera los indicadores marcan cifras negativas para el sector. La producción cayó drásticamente y en algunos sectores hubo un retroceso comparable al de hace más de medio siglo.

En referencia a la ocupación sigue disminuyendo pero anotó una reducción de casi la mitad, en relación al inicio de la crisis económica. Las importaciones son un reflejo del poco dinamismo de la demanda interna, en especial de los sectores tractores.

La producción del sector catalán y español anota una caída por tercer año consecutivo. Cabe decir que el ritmo fue más moderado que en 2012 pero en el caso catalán el comportamiento de la demanda externa no contribuyó positivamente.

Las exportaciones catalanas disminuyeron y cayeron los precios industriales a un ritmo superior que en 2012. Según el informe de 2013 “es probable entonces que la moderación del descenso de la actividad fuera debido a la mejora relativa de la demanda interna, seguramente de la inversión”. En este contexto, después de seis años de reducciones la ocupación no se recupera.

En Cataluña este sector registra un descenso el año pasado sobre la actividad. La ocupación y los precios también anotan una disminución en comparación con hace dos años.

Por otro lado, la recuperación económica de la Unión Europea favoreció el crecimiento del comercio exterior. Las exportaciones totales del sector catalán dejaron atrás el decaimiento del año anterior y crecieron notablemente. De este modo quedó registrado un superávit comercial que se triplicó en 2012. En paralelo disminuyeron las exportaciones, según destaca el informe de la Generalitat.

Tabla sobre la evolución en 2013 del sector del metal.

El año pasado este sector padeció un retroceso en su actividad después de quedarse estancado hace dos años. La producción disminuyó casi un 2% y la ocupación, un 4,4%. Este hecho se explica a causa de la debilidad del mercado doméstico y por la moderación en el dinamismo de les exportaciones, apunta el informe anual.

En referencia al mercado, los peores resultados correspondieron a los primeros meses de ejercicio. No obstante, tal y como apunta el informe, las exportaciones cayeron un 10%. Y por otro lado, las exportaciones crecieron un 1,7%, por debajo del 8,5% del 2012.

El proceso de deterioro quedó moderado el año pasado en comparación al 2012. La crisis del mercado interior arrastró a la producción con una reducción del 4,6%. El sector continúa destruyendo ocupación aunque a un ritmo inferior a otros años (6,3%). Según el informe del Departamento de Empresa y Ocupación de la Generalitat catalana, el sector se caracterizó el año pasado por un comportamiento más positivo en Cataluña que en el ámbito estatal.

La evolución de la industria de sistemas y componentes para la automoción registró un descenso el año pasado. Cabe decir que el descenso es más suave que en 2012 pero la situación fue más favorable para España, donde creció ligeramente la producción. Los precios industriales disminuyeron en ambos territorios y el ritmo era moderado. Las exportaciones del sector catalán eran estables pero el repunte de las importaciones provocó un crecimiento en el déficit comercial. Este aspecto hizo caer la tasa de cobertura a nivel más bajo de la historia, con inicios en 1994.

Acceder al Informe anual sobre la indústria en Cataluña