Balance anual 2012 de la industria española de bienes de equipo
Las ventas al exterior de bienes de equipo nacionales se fortalecieron en 2012 y aumentaron un 7,1%
La Asociación Nacional de Fabricantes de Bienes de Equipo (Sercobe), patronal de esta industria, ha celebrado su Asamblea General donde se han presentado las cifras definitivas del ejercicio 2012. La exportación vuelve a ser, un año más, la gran protagonista de su balance anual con unos resultados destacables. Por tercer año consecutivo, el sector nacional de bienes de equipo vuelve a ocupar la primera posición como la actividad económica que más vende al exterior de nuestro país. En 2012, sus exportaciones alcanzaron los 33.400 millones de euros y un incremento del 7,1% (evolución de 2,8 puntos con respecto al avance).
El 15% del total de las exportaciones nacionales corresponden a bienes de equipo, una posición de liderazgo que queda justificada por la alta competitividad industrial que demuestra en los mercados internacionales y por el propio esfuerzo exportador de sus empresas, que en 2012 se sitúo en el 86% del total de su producción. Los principales clientes de equipamientos nacionales son la Unión Europea, Estados Unidos y Canadá. A ellos se destinó el 72% de las exportaciones de bienes de equipo nacionales.
Unión Europea |
-2,1 |
54,4 |
Iberoamérica |
17,2 |
13,2 |
Extremo Oriente, Asia |
0,4 |
8,0 |
EEUU y Canadá |
43,0 |
7,2 |
África del Norte |
8,8 |
4,8 |
Oriente Próximo |
7,7 |
4,4 |
Resto de Europa |
-5,5 |
4,0 |
E.F.T.A. (Islandia, Suiza, Noruega y Liechtenstein) |
3,5 |
1,2 |
Resto del Mundo |
30,1 |
2,8 |
Total Mundo |
7,1 |
100,0 |
Esta industria es la responsable de fabricar los bienes que se incorporan a los procesos productivos de la propia industria, así como las infraestructuras básicas de energía, transporte y comunicaciones. De ahí que sea parte de la columna vertebral de una economía avanzada. En España, el sector de los bienes de equipo representa el 20% de la facturación de la industria manufacturera, en Europa esta cifra aumenta hasta el 28% y las exportaciones alcanzan un tercio de su volumen de ingresos.
La causa del crecimiento de su comercio exterior se debe, en parte, a la caída continuada de la demanda interna del país que en 2012 se sitúo en un -15%, señal inequívoca de la compleja situación de la economía española. Otro reflejo de la débil actividad económica es la disminución de la facturación sectorial del -5,2%, pasando así a ingresar 37.230 millones de euros en vez de los 39.000 alcanzados en 2011. Las cifras de desempleo, por su parte, se suavizan del -2% avanzado a primeros de año al definitivo -0,5% al cierre del ejercicio. El actual presidente de Sercobe, Ángel Lara, es rotundo en este sentido: “necesitamos que se estimule imperiosamente la demanda interna si queremos reflotar nuestra industria y encaminarnos hacia la senda de crecimiento económico sostenido y de la tan anhelada creación de empleo”.
Previsiones del sector para 2013
Este ejercicio viene lógicamente influenciado por el conjunto de problemas derivados de la necesidad de afrontar los desequilibrios presupuestarios, la financiación bancaria, el desplome de la demanda interna, los altos niveles de morosidad y las reformas estructurales pendientes, siendo el desempleo el más acuciante problema.
Según datos de la Secretaria de Estado de Comercio, las exportaciones mantienen las tasas positivas con una excelente situación de la balanza de pagos. En el primer cuatrimestre del año se incrementaron un 14,5% de tasa interanual y su peso alcanzó 21,9% respecto del total. En cuanto a la evolución del PIB, su tasa intertrimestral en el primer trimestre del año es del -0,5% frente al -0,8% del último trimestre del año anterior. El Índice de Producción Industrial para los bienes de equipo obtiene una tasa de -1,1% ante el -11,6% de 2012, siendo positivas las cifras de marzo y abril.
Todo apunta a que la industria manufacturera y, en especial, los bienes de equipo dirigen su esfuerzo hacia un aumento de su competitividad a través del impulso de la I+D y la mejora de sus productos y procesos que les permita mantener los niveles de producción y puestos de trabajo. Solo así se podrá consolidar su presencia en los mercados internacionales ante la falta de una mejora clara en la demanda interna.
De esta manera, y como está sucediendo en Europa, el sector se enfocará a alcanzar el objetivo del 20% de peso del PIB para la industria manufacturera en 2020, elevándolo desde el actual 16%. Para ello será necesario centrar las estrategias de política económica en la reindustrialización y fomento de la competitividad industrial.
De izquierda a derecha: Ángel Lara y Luis Valera.