Decathlon acaba cediendo a la presión y también abandona el mercado ruso
Aunque durante las primeras semanas Decathlon se negó a seguir los pasos de muchas compañías extranjeras y cesar su actividad en Rusia tras la invasión de Ucrania, finalmente la compañía gala ha anunciado la suspensión de sus tiendas en el país euroasiático debido a que “ya no se dan las condiciones de suministro necesarias para seguir con la actividad, en estricto cumplimiento de las sanciones internacionales”.
Decathlon cuenta con 60 puntos de venta en rusia y da empleo a más de 2.500 trabajadores. La empresa ha querido poner énfasis en que seguirá apoyando a sus empleados en la región y seguirá haciéndose cargo de sus salarios. “Algunos miembros de nuestra plantilla en Rusia llevan con nosotros desde 2006”, han explicado en un comunicado.
El gigante francés de ropa y accesorios deportivos se centró desde el inicio de la guerra en proporcionar ayuda y seguridad a sus 125 trabajadores distribuidos en Ucrania, quienes recibieron alojamiento, apoyo administrativo, entre otros soportes. Decathlon cuenta con una sede en Polonia, desde donde han liderado donaciones por valor de 2,6 millones de euros, según el comunicado. También han indicado que han creado un fondo solidario de un millón de euros para apoyar las poblaciones afectadas.
El propietario de Decathlon, el gigante minorista francés Association Familiale Mulliez, que también opera el supermercado Auchan y la cadena de bricolaje Leroy Merlin en Rusia, ha sido criticado por su decisión de permanecer abierto. De hecho, Auchan Retail mantiene activa sus operaciones en el territorio ruso y ucraniano. “Somos una de las últimas empresas occidentales aún presentes en Ucrania. Nuestras tiendas y actividades de comercio electrónico permanecen activos y nuestra logística asegura un suministro regular".