Mascotas seguras y cómodas en el automóvil
La necesidad de contar con unos parámetros fiables ha llevado a Babyauto a establecer su propia norma de calidad, avalada por una entidad certificadora. Así, entre los puntos que ésta incluye, se consideran muchos aspectos que aplican a los componentes de las sillas infantiles: la resistencia de las correas en diferentes condiciones de humedad, calor y frío; ensayos de corrosión de los componentes metálicos y de fatiga de los mecánicos; pruebas de resistencia de la hebilla y de micro deslizamiento de los ajustadores; de abrasión del cinturón; y ensayos dinámicos con pulso de choque frontal estándar típico para vehículos M1/N1 (GVW ≤ 3500Kg), así como ensayos de vuelco.
Por desgracia, muchas personas permiten que sus mascotas suban al vehículo sin tener en cuenta su seguridad. Tanto en el caso de disponerse a emprender un viaje por carretera como en el de llevar a los perros durante un trayecto corto, hay que asegurarse de que disfruten del viaje como una experiencia cómoda y segura. La seguridad de los animales en el coche es un asunto serio: al igual que nosotros, nuestros amigos peludos pueden sufrir lesiones graves, en caso de accidente.
La importancia de viajar en el asiento trasero
Un airbag puede no estar en el lugar adecuado para un animal, lo que significa que, si se activa, podría causarle huesos rotos o lesiones aún peores.
Al igual que con los sistemas de retención infantil, debemos asumir que las mascotas deben estar en el asiento trasero para viajar, pues la mayoría de los asientos delanteros actuales tienen airbags, que pueden causar lesiones graves a los perros cuando se activan.
No hay que permitir, en ningún caso, que los perros pequeños se sienten en nuestro regazo o en la plaza del copiloto, por muy cómodos que se sientan durante el trayecto ya que, en caso de accidente o en un frenazo súbito, podrían acabar proyectados hacia cualquier parte del vehículo y/o gravemente heridos por el airbag. Hay que tener en cuenta, también, que un perro pequeño que deambule por el vehículo, por muy bien educado que esté, puede aumentar el riesgo de accidente al distraer al conductor, pudiendo acabar bajo sus pies, o incluso interferir con la palanca de cambios.
Los accidentes más frecuentes se dan cuando las mascotas viajan con arneses o con collares sujetos a la hebilla del cinturón de seguridad: en impactos o frenazos, la desaceleración provoca, en muchos casos, que los perros salgan proyectados en cualquier dirección ya que los anclajes del cinturón no los retienen. Así, en muchos casos, salen despedidos, lo que podría provocarles un traumatismo craneoencefálico o torácico grave con neumotórax, o bien un impacto fuerte en el tórax con consecuencias importantes.
Sentado o tumbado
Nuestro arnés Travel Fix se beneficia del diseño estructural de los vehículos, permitiendo ajustar los anclajes Isofix y Top Tether para que los perros viajen en una posición de seguridad. Las mascotas más pequeñas pueden viajar tumbadas con las patas hacia adelante y los perros más grandes pueden también hacerlo en una posición tumbada lateralmente, si bien ello supone aflojar parte del arnés y sacrificar un tanto la seguridad por la comodidad durante el viaje.
En cualquier caso, al igual que sucede en el transporte infantil en el coche, se recomienda hacer paradas periódicas para descansar e hidratarse. Es importante recordar que, en un coche a cierta temperatura, los animales tardan muy poco tiempo en sobrecalentarse. Si bien no pasa nada si salimos del coche por ejemplo para repostar, nunca debemos alejarnos de ellos más de unos pocos minutos.
A menudo, la gente escucha estos consejos de seguridad y asume que no estará fuera el tiempo suficiente como para causar un problema. Sin embargo, muchas veces los despistes ocurren y ello puede suponer lesiones graves para las mascotas.