Seguridad cuando se circula marcha atrás
El Avisador de Obstáculos Green-Sight de Linde se compone de dos unidades con seis sensores cada una, integrados en la parte trasera de la carretilla. A esto se añade una unidad de control central con emisores de señales ópticas y acústicas. Las unidades de sensores escanean el área trasera del vehículo. Similar al sistema de estacionamiento asistido de los automóviles, el Green-Sight de Linde, con un alcance de hasta nueve metros, divide el espacio en tres zonas, cuyas dimensiones pueden ser ajustadas individualmente por el técnico de servicio según las necesidades del cliente. El objetivo de estas tres zonas es advertir al conductor con antelación de colisiones inminentes con objetos o personas. La zona 1 actúa como zona de alerta previa. Si el sistema detecta un obstáculo en esta área, los pilotos LED en la cabina empiezan a parpadear en amarillo, a la vez que suena un aviso acústico. La zona 2 es la zona de alerta principal, donde los LED parpadean en rojo y el aviso acústico suena en intervalos más cortos. En la zona 3 —la zona de colisión—, los LED rojos están iluminados de forma permanente y el aviso acústico suena ininterrumpidamente.
Asimismo, puede programarse una reducción automática de la velocidad de traslación para las tres zonas. Sólo hay un área muy pequeña, situada debajo de la parte trasera de la carretilla, que no queda cubierta por los sensores. Aparte de la vigilancia del área trasera, también existe la posibilidad de vigilancia lateral.
El Avisador de Obstáculos Green-Sight de Linde es una excelente opción para incrementar la seguridad, tanto para el conductor como las personas que circulan por el almacén, así como para las instalaciones y las mercancías, ya que ayuda a prevenir accidentes y ahorrar costes.