Innovación sostenible

Si la innovación surge de la necesidad de cambio y de la búsqueda de soluciones, es evidente que se trata de una variable fundamental para poder alcanzar un futuro más sostenible. La innovación nos invita a adoptar nuevas ideas, lo que nos permite abordar los desafíos futuros de forma más eficaz. La crisis climática y de recursos naturales plantean un problema complejo para la sociedad y sólo con propuestas innovadoras se podrán encontrar soluciones.

Ideas como la optimización de procesos, la reducción de consumo, utilización de nuevos materiales, la creación de nuevos modelos de negocio, así como la colaboración estrecha entre gobiernos, organizaciones y tejido empresarial a nivel local e internacional son aspectos esenciales en el camino hacia la economía circular y regenerativa.

Uno de los conceptos de los que se habla en todos los foros sobre sostenibilidad es el de la necesidad de reducir la producción y avanzar hacia un consumo más sostenible, más consciente. Sin embargo, en un mundo cada vez más poblado, los niveles tanto de producción como de consumo siguen al alza.

A nivel colectivo no estamos alcanzando los objetivos de cambio a la velocidad que necesitamos para evitar el colapso y se están sobrepasando los límites planetarios que aseguran el equilibrio del planeta. Y a nivel individual somos más conscientes de la necesidad de cambio y en el tema que nos ocupa, encontramos noticias optimistas. La creación de productos y servicios sostenibles es cada vez mayor.

En la fase de diseño y creación de producto los equipos tienen en cuenta la duración de este, así como la reparación, el reciclaje y la trazabilidad de los materiales después de su uso, aspectos todos ellos que hasta hace unos años pasaban desapercibidos. Los equipos de diseño son cada vez más innovadores, más conscientes de su responsabilidad hacia el consumidor y hacia el planeta. Saben que son o pueden llegar a ser generadores del cambio.

Además de los productos de consumo, los servicios también pueden ser sostenibles y aportar soluciones para la regeneración de nuestro ecosistema. Algunos ejemplos son las energías renovables, el transporte, la agricultura orgánica, la gestión de residuos, el turismo sostenible o la construcción ecológica.

Otros aspectos de gran importancia son las tecnologías emergentes que apoyan la sostenibilidad, como nuevas herramientas de software o las consultorías.

Consultores y estudiosos ponen a nuestro alcance información de calidad para ayudarnos a entender las causas de la crisis climática y así facilitarnos la búsqueda y la aplicación de soluciones en nuestro día a día. Pongo como ejemplo ‘El almanaque del Carbono’, un dossier de un gran valor para quienes quieran comprometerse con el cambio.

A nivel de consultoría en España, la organización B´Greenly fomenta la sostenibilidad en la producción de eventos mediante soluciones innovadoras, y para ello realiza análisis personalizados basándose en métricas establecidas por organizaciones como World Economic Forum y realiza las auditorías precisas para emitir la certificación de eventos sostenibles.

En cuanto a las herramientas de software, pueden ser utilizadas tanto a nivel empresarial como a título individual. En este sentido, una herramienta de software como ‘Lifestyle calculator’ pone a disposición del usuario diferentes test para conocer el impacto que nuestro estilo de vida ejerce sobre el planeta, y nos ofrece opciones y consejos para una mejor toma de decisiones.

Espero que este pequeño repaso sobre desarrollo de productos y servicios sostenibles y tecnologías emergentes en pro de la sostenibilidad represente un revulsivo para los lectores.

Fuentes para elaborar el artículo

• Industrial Designers Society of America (IDSA)
• Indeed Innovation