Entrevista a Óscar Valiente, gerente de Norma Comics
Entrevistamos al gerente de la librería especializada Norma Comics, que abrió hace 35 años y sigue apostando por una amplia variedad de cómics, mangas y otros productos licenciados.

Norma Comics ha sido capaz de evolucionar y adaptarse a los cambios del sector y el consumidor a lo largo de sus 35 años de experiencia. Recuperamos un extracto de la entrevista con el gerente de la tienda, Óscar Valiente, que pueden encontrar en el número 78 (julio/septiembre) de la revista LICENCIAS Actualidad, y en la que nos habla de la trayectoria de la librería barcelonesa y comparte su visión sobre el sector.
¿Cuáles son los orígenes de Norma Comics?
La librería nació en Barcelona en el año 1983 por iniciativa del fundador y presidente de Norma Editorial, Rafa Martínez, que anhelaba una librería como las que solía visitar en sus viajes a París. Con Norma Comics, la pretensión de Rafa fue crear una librería donde tuvieran cabida todos los cómics del mercado y una cuidada selección de productos de licensing, en un espacio que fuera atractivo no solo para los coleccionistas, sino para cualquier persona interesada en el mundo del cómic.
¿En qué momento decidisteis entrar en el negocio del licensing?
Prácticamente desde el inicio, porque en otros mercados como el francés o el norteamericano, las librerías ya habían empezado a combinar el surtido de publicaciones con el de productos licenciados, principalmente textil, papelería y figuras de colección. Hoy día el licensing de productos derivados supone al menos el 25% de nuestras ventas, aunque este porcentaje se puede incrementar en temporadas de verano o Navidad.
¿El mundo del cómic y el de las licencias están muy ligados?
Totalmente, son vasos comunicantes. Hay infinidad de casos de éxito en el mundo del cine, las series y los videojuegos que se basan en cómics, y que después se han trasladado también al mundo de las licencias. Hay claros ejemplos como Marvel, DC Comics, Dragon Ball, The Walking Dead, Astérix, etc. Y después están todas aquellas propiedades que no nacieron como cómics, pero que se han adaptado al mundo de las viñetas con éxito, como Star Wars, Pokémon, Regreso al Futuro y muchísimos más. Luego hay otras licencias que no tienen adaptación en cómic, pero que son igualmente muy populares entre los lectores como Breaking Bad o The Big Bang Theory, cuyos productos se suelen vender muy bien.
¿Cómo ha evolucionado el sector de las licencias?
Mis primeras experiencias en el mundo de las licencias fueron a mediados de los 90, con empresas como Biplano y Copyright Promotions, y en aquel entonces era un mundo mucho más limitado que hoy día. Las agencias se contaban con los dedos de una mano, había pocas licencias notorias y el canal de venta estaba muy concentrado en algunas grandes cadenas. La producción y comercialización se hacía en clave “local”. Hoy todo está más atomizado, pero al mismo tiempo es más global y hay más diversidad de contenidos. Por un lado esto genera ventajas, pero también inconvenientes. Antes era más fácil acertar con los éxitos cinematográficos, televisivos o deportivos, porque había menos oferta, pero ahora tenemos muchas más ventanas que generan contenidos, y más globales, por lo que cuesta detectar cuáles serán los éxitos futuros. Por el contrario, esto también es una oportunidad para los fabricantes, que pueden trabajar más contenidos de nicho pero con una distribución internacional y una promoción más accesible gracias a las redes sociales.