El 36,5% de los comercios electrónicos españoles utilizan alternativas sostenibles en el envío de sus productos
En el año 2015 la Organización de Naciones Unidas aprobó los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) con la finalidad de crear la hoja de ruta para mejorar la vida de muchas personas a nivel social, económico y medioambiental antes de 2030. En esta hoja de ruta todos los países se han comprometido a priorizar el progreso de aquellos países que estén en vías de desarrollo. En esta línea, en materia de sostenibilidad, según el último bloque de la encuesta realizada por la plataforma Packlink a más de 2.000 comercios electrónicos a nivel europeo, el 46% de los e-commerce españoles ha modificado el empaquetado de sus productos en los últimos 5 años para reducir la huella de carbono emitida. Esta cifra sitúa a España por debajo de Reino Unido (51,9%), pero demuestra un compromiso medioambiental de los e-commerce españoles superior al de Alemania (45,6%), Francia (45,4%) e Italia (41%). El estudio, además, señala que el 39,2% de los españoles consideran los paquetes reciclables como la opción más sostenible para implantar en su negocio, por encima del embalaje y materiales de relleno sostenible (35,5%), servicios de envío sostenible (20%) y productos en venta más ecológicos (5,4%).
Alternativas de packaging y transporte sostenible
Los nuevos hábitos de consumo desarrollados durante y después de la pandemia han venido para quedarse y están asociados a la preservación medioambiental. El packaging se ha convertido en uno de los aspectos más relevantes en este modelo de consumo, que cada día está más demandado por los clientes y que el empresario pone a su disposición más a menudo. En este sentido, en España el 36,5% de las empresas dispone de alternativas sostenibles, como papel reciclado en el relleno de los paquetes o bolsas reutilizables para el envío de productos, una cifra que ronda la media entre los países europeos.
Asimismo, con respecto al transporte, la mayoría de los e-commerce europeos elegirían el tipo de transporte en función de la sostenibilidad de sus servicios, destacando a España con un 70% de los encuestados.