Pascual prevé superar 100 millones de facturación en café y está abierto a nuevas compras
El Grupo Pascual espera superar los 100 millones de facturación en su negocio de café en los próximos tres años y está abierto a realizar nuevas compras para lograrlo, tras haber culminado en noviembre la de la empresa catalana Saula.
Así lo ha avanzado a Efeagro el director de Café, Jesús Gómez, quien ha recordado que dicha operación ha incluido la marca Saula, las instalaciones industriales en Sant Feliu de Llobregat (Barcelona) y 50 trabajadores.
La apuesta por el negocio del café, según ha precisado, comienza para el Grupo en 2010, cuando adquiere Mocay, que produce tres millones de kilos de café y 15 millones de monodosis en su tostadero de Tajonar (Navarra).
“Es el primer hito en un objetivo de seguir creciendo en el sector horeca (restauración y hostelería), ya que suma el café a su negocio y cumple a la perfección con la rotación y el consumo diario”, ha señalado.
En el Plan Estratégico 2020-2023, el Grupo profundiza en el segmento y en 2022 adquiere Café Jurado, una compañía referente en la región de Levante, e integra tanto la marca como los 113 trabajadores.
En la actualidad, de acuerdo a sus datos, el café supone el 15% del negocio del Grupo y 50 millones de facturación.
Para el periodo 2024-2027, según Gómez, el objetivo es “crecer por vía orgánica con las marcas que tenemos y por vía inorgánica con nuevas adquisiciones, como acabamos de hacer con Saula”, ha señalado el director de negocio.
Ha recordado la potencia regional de sus tres marcas en el sector hostelero y, por tanto, su capacidad de penetración “en un mercado muy fragmentado como el horeca”.
En este sentido, ha subrayado que ahí reside el interés de la empresa por marcas con “una regionalidad y una presencia muy fuerte”, ya que si llegan a los citados 100 millones de facturación en el segmento podrían líderes nacionales con el 10% de cuota del café en hostelería.
Tras subrayar el papel en la economía local y el desarrollo del territorio que tiene el mantenimiento de las distintas industrias cafeteras, Gómez ha destacado que se trata de un propósito “muy presente en la familia Pascual”, por lo que también se trabaja para incrementar el negocio y el empleo locales.
En ese sentido, también ha mencionado el trabajo en el terreno de la logística, con la propia distribuidora del Grupo (Qualianza) y las sinergias que establecen con el resto de agentes de la cadena.
“En diez o quince años, al centro de una ciudad entrará un sólo camión para hacer el reparto, y esa es una puerta de exploración en materia de logística y también de sostenibilidad”, ha añadido.
Los precios del café
El negocio del café vive un momento de desafío, por el aumento del precio de la materia prima.
La producción está afectada por climas extremos (como la sequía en Vietnam e Indonesia, o las heladas en Brasil), altos costes de producción y unos mercados volátiles que han elevado los precios internacionales hasta máximos históricos en 2024: el arábiga ha llegado a subir un 70%.
“Las cotizaciones están en máximos históricos; llevamos cuatro años con muy malas cosechas, por lo que hay mucha menos oferta, y además hay un incremento de la demanda, sobre todo por la entrada de los países asiáticos en su consumo”, ha explicado Gómez, quien sin embargo se reafirma en la apuesta por los cafés de especialidad, porque es un requerimiento de los usuarios.
El café de especialidad es aquel que tiene un origen concreto, tanto de localización como de variedad, perfil de sabor muy concreto y calidad, “y el cliente que lo demanda es exigente y asume el precio”.