Nueva estrategia energética de Europa con vistas al año 2020
11 de noviembre de 2010
El comisario de Energía, Günther Oettinger, ha declarado lo siguiente: “La energía constituye uno de los mayores desafíos para todos nosotros. Dar a nuestro sistema energético una nueva orientación más sostenible y segura puede llevar cierto tiempo; sin embargo, es preciso tomar ya decisiones ambiciosas. Para conseguir una economía eficiente, competitiva y de baja emisión de carbono, debemos europeizar nuestra política energética y centrarnos en un reducido número de prioridades importantes”.
En la comunicación adoptada, la Comisión fija cinco objetivos prioritarios. Sobre la base de estas prioridades y de las medidas propuestas, la Comisión presentará en los próximos 18 meses ideas e iniciativas legislativas concretas. Esta comunicación también establece el orden del día de los debates de los Jefes de Estado y de Gobierno en la primera cumbre de la UE sobre energía, prevista para el 4 de febrero de 2011.
1) Ahorro de energía
La Comisión propone centrar sus iniciativas en los dos sectores que presentan las mayores posibilidades de ahorro energético: el transporte y los edificios. A fin de ayudar a los propietarios de viviendas y a las entidades locales a financiar la renovación y adoptar medidas de ahorro de energía, la Comisión propondrá incentivos a la inversión e instrumentos financieros innovadores de aquí a mediados de 2011. El sector público debe tener en cuenta la eficiencia energética a la hora de adjudicar obras o adquirir servicios o productos. En el sector industrial, los certificados de eficiencia energética pueden constituir un incentivo para que las empresas inviertan en tecnologías que consuman menos energía.
2) Un mercado paneuropeo de la energía integrado y equipado con infraestructuras
La Comisión ha fijado una fecha límite para la realización del mercado interior de la energía. De aquí a 2015, ningún Estado miembro debe permanecer al margen. En los próximos diez años, se van a requerir inversiones globales en infraestructuras energéticas en la UE por valor de un billón de euros. A fin de agilizar los principales proyectos estratégicos de la UE, la Comisión propone simplificar y agilizar la concesión de licencias de obras, estableciéndose un plazo máximo hasta la autorización final y la financiación de la UE. Una 'ventanilla única' debe coordinar todas las solicitudes de licencias necesarias para la realización de un determinado proyecto.
3) 27 Estados, una sola voz en el ámbito de la energía a escala mundial
Se propone que la UE coordine su política energética en relación con países terceros, especialmente con respecto a sus socios más importantes. En el marco de la política europea de vecindad, la Comisión propone ampliar y profundizar el Tratado de la Comunidad de la Energía, con el fin de integrar aún más a los países deseosos de participar en el mercado de la energía de la UE. También se prevé una mayor colaboración con África, con el fin de suministrar energía sostenible a todos los ciudadanos de este continente.
4) El liderazgo de Europa en materia de tecnología e innovación energéticas
Se pondrán en marcha cuatro proyectos de envergadura en sectores importantes para la competividad europea, tales como las nuevas tecnologías para las redes inteligentes y el almacenamiento de electricidad, la investigación sobre biocarburantes de segunda generación y la asociación de ciudades inteligentes para fomentar el ahorro de energía en zonas urbanas.
5) Una energía segura y asequible a través de consumidores activos
La Comisión propone nuevas medidas sobre la comparación de precios, el cambio de proveedor y una facturación clara y transparente.
Contexto
Los objetivos de la UE en materia de energía han sido incorporados a la estrategia ‘Europa 2020’ de crecimiento inteligente, sostenible e integrador adoptada por el Consejo Europeo en junio de 2010. Concretamente, la UE se propone alcanzar objetivos ambiciosos en materia de energía y cambio climático de aquí a 2020: reducir un 20 % las emisiones de gases de efecto invernadero, aumentar hasta un 20% la parte correspondiente a la energía renovable y mejorar un 20% la eficiencia energética.