Apoyo en el Congreso para las plantas de tratamiento de purines con cogeneración

Esta comisión aprobó la incorporación de una enmienda que, según las plantas de tratamiento de purines, salva a la cogeneración de alta eficiencia y de tratamiento de residuos de cogeneración del sector porcino. En concreto, podrán mantener sus plantas en operación hasta que se apruebe y se adjudique, en su caso, la retribución derivada del nuevo régimen regulador de estas tecnologías.

La enmienda presentada por ERC y Junts contó con el respaldo del PP, PNV y la abstención de VOX y “supone un espaldarazo a la cogeneración como tecnología energética esencial para la industria de sectores clave”, como la agroalimentaria, papeleras, químicas, cerámicas o refino, según un comunicado emitido por la Asociación para el Desimpacto Ambiental de los Purines (ADAP) y Cogen España.

El presidente de ADAP, Josep Capdevila, celebró esta decisión que ahora deberá ser refrendada en la Comisión de Transición Ecológica prevista para el próximo 19 de diciembre para que la Ley entre en vigor antes del 1 de enero y se evite así el cierre de las dos plantas de cogeneración de purines que acababan su vida útil a final de año.

“Esta moratoria es una muy buena noticia“para el sector porcino, especialmente para los ganaderos de Alcarrás y Les Masies de Voltregá que conservarán sus plantas en funcionamiento mientras transicionan a un nuevo modelo”más eficiente y empotrado en el desarrollo de las plantas de biogás y biometano en las que ya trabajan los ganaderos”, insistió.

Además, un centenar de ganaderos que tratan sus purines en la planta de Alcarrás se concentraron frente a las instalaciones de la cogeneradora para valorar este respaldo e insistir en la importancia de esta moratoria “a falta de herramientas alternativas para la desnitrificación de las deyecciones ganaderas”.

La Asociación de Jóvenes Agricultores y Ganaderos de Cataluña (JARC) señala que las plantas de cogeneración de purines de Alcarràs y Masies de Voltregà se encuentran en proceso de reconversión para generar biogás. Además, el cierre de estas dos plantas de cogeneración dejaría colgados a 185 ganaderos que llevan sus purines, generando una tensión innecesaria en la gestión de las deyecciones ganaderas.

La organización agraria no entiende el cierre de dos plantas necesarias para la gestión de las deyecciones ganaderas que se encuentran en proceso de reconversión hacia modelos más eficientes como es la producción de biogás, biometano e hidrógeno verde. El período adicional de dos años que se pide es clave para facilitar la transición hacia plantas más sostenibles y eficientes, integradas en los proyectos de biogás y en el proceso de descarbonización y circularidad del sector.