Dos pueden cambiar las cosas
Dr. Andreas Mattern, vicepresidente de Estrategia y Gestión Global de Productos Pharma Tecnología Syntegon
08/02/2024Con unas 20.000 empresas, la industria farmacéutica no sólo tiene una importante presencia mundial. Su impacto, tanto en términos de ventas como de emisiones, también es considerable. Según un estudio de la Universidad McMaster, la industria farmacéutica produjo alrededor de 50 toneladas métricas de dióxido de carbono equivalente (CO2 e) por millón de dólares de ventas en 2015 con unas ventas globales de 962.000 millones de dólares. Las emisiones de carbono de la industria superan incluso significativamente a las de la industria automovilística en un 55%.
La presión sobre los fabricantes de productos farmacéuticos es aún mayor: los medicamentos que salvan vidas deben llegar al mercado con una alta calidad y en unos plazos determinados, mientras que los procesos necesarios para el abastecimiento del mercado deben generar muchas menos emisiones. Este equilibrio exige tecnologías con menos emisiones, lo que ha desencadenado una carrera de estrategias innovadoras en la industria. El 80% de las mayores empresas de la Federación Internacional de Asociaciones de Fabricantes de Productos Farmacéuticos (IFPMA) desean reducir al máximo sus emisiones o incluso alcanzar la neutralidad de CO2.
El papel clave de los proveedores de tecnología
Los principales agentes del mercado también apuntan alto al margen de la asociación. Roche, por ejemplo, prevé reducir a la mitad su huella de carbono para 2029. Bayer AG aspira a conseguir cero emisiones netas de gases de efecto invernadero para 2050. Lo mismo hace Novo Nordisk, pero cinco años antes: según los planes de la empresa, las emisiones de gases de efecto invernadero se acercarán a cero en 2045. Boehringer Ingelheim, por su parte, pretende alcanzar la neutralidad de CO2 en sus operaciones (Alcance 1 y 2) para 2030.
Aunque los enfoques son diferentes, está clara una visión común, con amplias consecuencias, no sólo para las propias empresas fabricantes. Los cálculos de la huella de carbono, los objetivos basados en la ciencia o los informes de sostenibilidad también figuran en las agendas tanto de los fabricantes por contrato como de los proveedores de tecnología.
Estos últimos desempeñan un papel clave en la estrategia de sostenibilidad de la industria farmacéutica, ya que las emisiones de los equipos se incluyen en las huellas de carbono de todas las empresas de fabricación de productos farmacéuticos. Dada su longevidad, los equipos suelen contribuir a las emisiones globales durante varias décadas.
Una de las mayores palancas para la reducción de las emisiones de CO2 está, por tanto, en los propios proveedores de tecnología: optimizando continuamente sus máquinas y desarrollando nuevas soluciones más eficientes desde el punto de vista energético que puedan ayudar a las empresas de fabricación farmacéutica a alcanzar sus objetivos de sostenibilidad.
Huella de carbono: un impulso para la toma de decisiones
Evaluaciones de agencias como EcoVadis que califican a las empresas según diversos criterios de sostenibilidad, confirman que actúan de forma sostenible y conforme a las normas internacionales. Los certificados también ayudan a los proveedores de tecnología a posicionarse como respetuosos con el medio ambiente, facilitando el diálogo con organizaciones afines en el ámbito de la producción farmacéutica.
Participar en plataformas como CDP (antes Carbon Disclosure Project) o la Iniciativa de Objetivos Científicos (Science Based Targets Initiative, SBTi) aumenta aún más la transparencia y establece objetivos de mejora claros y públicos.
Los proveedores de tecnología divulgan sus propias emisiones y su huella de carbono. Junto con la tecnología, su precio de mercado y el coste total de propiedad (Total Cost of Ownership, TCO), las emisiones de los equipos se han convertido en un factor crucial para las decisiones de compra.
Existen otros campos de actuación para los proveedores de tecnología. Por ejemplo, los análisis de CO2 basados en software se están consolidando como herramientas útiles entre los principales fabricantes de equipos. Los equipos de procesado y envasado generan emisiones que pueden cuantificarse e interpretarse a lo largo de todo el ciclo de vida de la maquinaria.
Los análisis suelen centrarse en la fase de uso, ya que más del 80-90% de las emisiones se producen durante esta parte del ciclo de vida. Los parámetros centrales incluyen la energía térmica liberada, la energía eléctrica, el aire comprimido y otros medios.
Por un lado, las evaluaciones como los informes sobre CO2 ayudan a las empresas farmacéuticas a tomar decisiones de inversión específicas para los equipos con el fin de alcanzar sus propios objetivos de reducción. Por otro, los fabricantes de maquinaria pueden utilizar los datos para identificar el potencial de optimización tecnológica futura en una fase temprana.
Centrarse en la producción
Los análisis demuestran que las unidades de WFI en frío producen hasta un 90% menos de emisiones de CO2 que los procesos en caliente establecidos. Incluso el WFI procedente de procesos en frío que utilizan almacenamiento en caliente reduce las emisiones en más de un 40 por ciento en comparación con el WFI en caliente. Además, algunas actualizaciones de software son capaces de reducir el consumo de energía y agua hasta en un 90% en las unidades de destilación en modo de espera.
Materiales de envasado alternativos
Los procesos posteriores también ofrecen posibilidades de ahorro, sobre todo gracias a materiales de envasado innovadores y alternativos. Los productos farmacéuticos líquidos requieren vidrio y plástico de un solo uso en el envasado primario, lo que apenas deja margen para el cambio. Sin embargo, las soluciones reciclables y/o biodegradables desempeñan un papel cada vez más importante en el envasado primario y secundario de formas farmacéuticas sólidas.
Para el envasado primario de comprimidos y cápsulas pueden utilizarse blísteres de papel o polipropileno (PP) reciclable, que pretenden sustituir a las películas termoformadas estándar de policloruro de vinilo (PVC). Los cartones se utilizan sobre todo para el envasado secundario.
Los proveedores de tecnología de envasado y los proveedores de papel llevan tiempo trabajando en soluciones que puedan utilizarse con éxito en las líneas existentes. Por ejemplo, los blísteres push-through de papel para comprimidos y cápsulas son adecuados para productos nutracéuticos e incorporan una capa de barrera y otra termo-sellable.
En lugar de desarrollar nuevas tecnologías para los procesos de envasado – y generar así nuevas emisiones –, los proveedores de tecnología permiten ahorrar gracias a conceptos de línea fácilmente convertibles. Por supuesto, las innovaciones son igual de importantes. Una amplia cartera de servicios, desde el análisis de materiales y el desarrollo de envases hasta la realización de pruebas en centros de desarrollo especializados, fomenta la cooperación y seguirá produciendo materiales de envasado y conceptos de maquinaria pioneros en el futuro.
Los exhaustivos análisis de CO2 abarcan el ciclo de vida de las máquinas, desde la producción y el transporte hasta su uso y eliminación.
Sentar juntos las bases de un futuro sostenible
A la vista de la evolución actual, la industria farmacéutica podría alcanzar la neutralidad climática en las próximas dos décadas. Esto se aplica sin duda a las empresas que ya siguen una estrategia clara de sostenibilidad. A largo plazo, esta tendencia incluirá a otros actores además de las “grandes farmacéuticas”, como los fabricantes por contrato y las empresas de fabricación más pequeñas. Los proveedores de tecnología de diversos tamaños seguirán aprovechando la oportunidad y estableciendo asociaciones a largo plazo con las empresas farmacéuticas.
El consumo de medios y energía, así como la evitación de residuos en la producción, el transporte y el envasado serán algunas de las principales palancas. Además, las actualizaciones de software de las máquinas existentes y los análisis de CO2 también pueden constituir la base de unas operaciones más eficientes desde el punto de vista energético.
La máquina de llenado de cápsulas GKF 720 de Syntegon proporcionó información importante para el desarrollo del nuevo modelo de cálculo de CO2 con certificación TÜV.
2. https://www.southpole.com/de/klimaschutz-pharmaindustrie
3. https://ifpma.org/news/joint-industry-statement-by-abpi-efpia-farmindustria-imc-ifpma-jpma-leem-phrma-and-vfa-on-the-un-climate-change-conference-cop26-biopharmaceutical-industry-actions-to-tackle-climate-change/
4. https://www.roche.com/about/sustainability/environment/goals-performance/
5. https://www.bayer.com/en/sustainability/climate-protection
6. https://www.novonordisk.com/sustainable-business/zero-environmental-impact.html
7. https://www.boehringer-ingelheim.com/sustainable-development/more-green/resizing-our-carbon-footprint