Reducir las emisiones de CO2 en un 90% para 2050, un reto mayúsculo para España
El riesgo de tomar un único camino
El pasado 24 de febrero tuvo lugar la jornada ‘Energías para la Movilidad del Futuro’, una cita organizada por Madrid Foro Empresarial junto a la Fundación Pons, IberCaja, Pons Mobility y la Asociación de Empresarios de Estaciones de Servicio de la Comunidad de Madrid (Aeescam). El evento permitió corroborar las dificultades a las que se enfrenta la movilidad eléctrica para mejorar su presencia en el parque rodante nacional y permitió reclamar de nuevo a las administraciones el respeto de la neutralidad tecnológica, que permitiría acelerar la descarbonización de la economía europea.
El evento, que se desarrolló en el cada vez más habitual formato híbrido (presencial -en la sede de la Fundación Pons, ubicada en el número 138 de la calle Serrano- y telemáticamente), fue moderado por el secretario general de Aeescam, Víctor García Nebreda, quien también ostenta el cargo de coordinador de Energía y Medio Ambiente de Madrid Foro Empresarial; Carlos Martín, director técnico y de Medio Ambiente de la Asociación Española de Operadores de Productos Petrolíferos (AOP), y Rafael del Río, director técnico de la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica (Aedive).
Tras dedicar unas palabras de apoyo a la sociedad ucraniana, que horas antes sufrió la invasión de tropas rusas, Carlos Martín afirmó que el transporte es el responsable del 25% de las emisiones de CO2 a la atmósfera en Europa. Más aún, el transporte por carretera es el emisor del 90% de ese 25%, por lo que “tenemos que afrontar un reto ineludible para descarbonizar la movilidad”. No obstante, Martín añadió que los sectores involucrados en la movilidad terrestre “ya ha hecho grandes esfuerzos”. Hacía así referencia a la mejora que desde el punto de vista medioambiental presentan los vehículos nuevos con motores de combustión interna frente a los comercializados hace unos años. En ese esfuerzo múltiple, el director técnico y de Medio Ambiente de la AOP también incluyó al sector del refino, que ha dedicado grandes inversiones a reducir las emisiones generadas en el proceso de destilado del petróleo y que, también, ha incorporado crecientes porcentajes de biocombustibles en los carburantes que se venden en las estaciones de servicio.
Una descarbonización ralentizada
Martín lamentó que el enfoque eléctrico haya sido el que se haya impuesto en la perspectiva que la Unión Europea está aplicando a la movilidad futura, una decisión que, paradójicamente, está ralentizando la reducción de las emisiones que provocan el calentamiento global. El alto precio de los vehículos eléctricos puros, la aún baja autonomía y la todavía escasa red de puntos de recarga públicos están produciendo un envejecimiento del parque móvil en nuestro país, con los negativos efectos que tiene un parque de vehículos con elevada edad media en el medio ambiente. En este sentido, Martín aportó algunos datos. Así, durante el pasado año algo menos del 3% de las ventas de vehículos nuevos fue de eléctricos puros. Más allá de esta realidad, Martín apuntó que el 97% restante y el resto de vehículos con motores de combustión interna que circulan por nuestras calles y carreteras necesitan una solución para lograr su descarbonización, una solución que, en su opinión, pasa por los ecocombustibles.
El secretario técnico y de Medio Ambiente de AOP describió diversas iniciativas, procedimientos y posibilidades que la industria del refino nacional está impulsando para obtener combustibles con emisiones netas cero, una solución que, además, daría mayor certeza al sector y a las decenas de miles de empleos que dependen de un sector que está entre los más punteros de sus homólogos en Europa desde el punto de vista medioambiental.
El cambio tan profundo que conlleva la pretensión de que gran parte de la movilidad europea en 2050 sea eléctrica hará necesarias inversiones de difícil retorno, mientras que el desarrollo de los ecocombustibles alargaría la pervivencia de la actual y afinada red de distribución y suministro de carburantes. Además, la utilización como materia prima de residuos de diversa índole (de aceites usados, de restos forestales, de plásticos, entre otras opciones) supondría, además, un enorme empujón a la economía circular y a la denominada España vaciada.
Martín también llamó la atención sobre el respaldo que ha obtenido la Plataforma para la Promoción de los Ecocombustibles, lanzada en julio del pasado año, y a la que se han adherido 26 colectivos sectoriales que representan a 343.000 empresas, en los que trabajan, de manera directa, indirecta e inducida 4,3 millones de empleados.
Un nuevo paradigma de movilidad
Rafael del Río, director técnico de la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica (Aedive), inició su exposición ofreciendo los datos de matriculaciones de los vehículos eléctricos del pasado mes de enero, que protagonizaron una subida del 261% respecto al mismo mes del pasado año. En este sentido, Del Río afirmó que las todavía bajas ventas de eléctricos puros o híbridos enchufables se deben, entra otras razones, “al desconocimiento existente” en torno a ellos.
Del Río dijo que nos encontramos ante un nuevo paradigma de movilidad, un cambio que exigirá un nuevo enfoque a la hora de desplazarse que tendrá consecuencias en el sector energético, puesto que, entre otras posibilidades, los vehículos eléctricos permiten almacenar electricidad y facilitan la creación de comunidades energéticas y, también, suministrar energía a domicilios particulares.
El director técnico de Aedive -quien remarcó que el clúster reúne a 170 socios, algunos de ellos operadores energéticos con una larga presencia en el mercado de derivados del petrolero- aseguró, en referencia a las distintas opciones energéticas, que “hay sitio para todos”. Y aunque dijo aceptar la neutralidad tecnológica, apuntó que ésta no debe limitarse únicamente a la movilidad y a las emisiones de CO2, sino que también deba ampliarse a otros contaminantes como las partículas en suspensión, que suelen acumularse en grandes concentraciones urbanas.
La primera parte de la jornada fue cerrada por García Nebreda, quien calificó a los ecocombustibles como una alternativa “factible y eficiente para lograr descarbonizar el sector del transporte aéreo, marítimo y de carretera, con carácter complementario al vehículo eléctrico”. El secretario general de Aeescam añadió que “el vehículo eléctrico jugará un papel relevante en el futuro de la movilidad, pero actualmente existe una dependencia absoluta del petróleo, y los ecocombustibles reducen esta dependencia”.
Realidades de difícil cambio
En el debate posterior, tanto Martín como Del Río expusieron las ventajas de sus respectivas posiciones, aunque hay realidades que dejan poco margen para la interpretación. Es el caso de la escasez de aparcamientos privados en la gran mayoría de las ciudades y pueblos de nuestro país. Diversos estudios cifran en un 20/25% el porcentaje de vehículos, de los 28 millones que están registrados en España, con aparcamiento privado, lo que dificulta enormemente las recargas nocturnas, aquellas que añaden a los vehículos eléctricos el deseado ahorro económico que prometen.
Tampoco ofrecen muchas dudas los precios de la gran mayoría de vehículos eléctricos que se comercializan en Europa. A excepción de, literalmente, un puñado de modelos, ninguna de las opciones disponibles en los concesionarios baja de los 20.000 euros, una cantidad fuera del alcance de gran parte de la población de un país, el nuestro, en el que el porcentaje de población en situación de carencia material severa se situó el pasado año en el 7,0%, mientras que el de las personas en riesgo de pobreza fue del 21,0%, según los datos hechos públicos en julio de 2021 por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Una industria en riesgo
Martín reservó para esta parte de la jornada la presentación de diversos datos. Entre ellos, el director técnico y de Medio Ambiente afirmó que “existe biomasa sostenible suficiente para responder a las necesidades energéticas sin ningún impacto sobre la biodiversidad”, tal y como concluyó un estudio realizado por el Imperial College según el cual en 2050 estará disponible más del doble de la cantidad de biomasa necesaria para cubrir las necesidades productivas de la industria del refino. Asimismo, Martín compartió una afirmación que muchos de los actores legislativos comunitarios y nacionales parecen olvidar, que la calidad del aire depende menos del carburante que de la antigüedad del vehículo.
El director técnico y de Medio Ambiente de la AOP lamentó que “el marco regulatorio no permita maximizar las aportaciones de cada tecnología para acelerar la descarbonización de la movilidad”, denunció que las prohibiciones a la venta de vehículos con motores de combustión interna amenazan a la industria automovilística europea, con todas sus derivadas, y señaló que se está poniendo en riesgo la movilidad de millones de personas.
La jornada organizada por Madrid Foro Empresarial junto a la Fundación Pons, IberCaja, Pons Mobility y la Asociación de Empresarios de Estaciones de Servicio de la Comunidad de Madrid (Aeescam) permitió evaluar de nuevo las fortalezas y debilidades tanto de varias industrias que corren el riesgo de languidecer, como las de un pujante sector que cuenta con el apoyo de las administraciones legislativas pero debe resolver varios hándicaps que ponen en duda su efectividad y aplicación práctica.