Sólo uno de cada nueve puntos de recarga en la Unión Europea es rápido
La Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (Acea) llama la atención a los responsables políticos de la Unión Europea sobre “un problema doble” relacionado con la infraestructura de recarga para automóviles eléctricos: “no solo hay una falta flagrante de cargadores en toda la región, sino que muy pocos de estos pueden cargar vehículos a una velocidad aceptable”.
Acea llama la atención sobre esta circunstancia puesto que los gobiernos nacionales y el Parlamento Europeo están diseñando sus posiciones sobre el Reglamento de Infraestructura de Combustibles Alternativos (AFIR, en sus siglas en inglés) propuesto por la Comisión Europea en julio. El AFIR es un componente central del paquete climático europeo ‘Fit for 55’, que también incluye nuevos objetivos de CO2 para automóviles.
De los 225.000 cargadores públicos disponibles actualmente en la UE, solo 25.000 son adecuados para la carga rápida. Es decir, solo uno de cada nueve puntos de carga europeos cuenta con una capacidad superior a los 22kW.
Recargar la batería de un vehículo eléctrico con uno de estos 200.000 cargadores de baja potencia puede demorar la recarga hasta una noche entera. Por el contrario, el uso de un cargador rápido de alta capacidad puede reducir esta tarea a menos de una hora, asegura Acea en una nota de prensa. Sin embargo, los cargadores rápidos solo representan una fracción (11%) de la red de infraestructura europea.
“Para convencer a más ciudadanos de que ‘se vuelvan eléctricos’, tenemos que eliminar todas las molestias asociadas con la carga”, dijo el director general de Acea, Eric-Mark Huitema. “Las personas necesitan ver muchos cargadores en su entorno diario, y estos puntos de carga deben ser rápidos y fáciles de usar, sin tener que esperar en largas colas”.
La recarga debería ser tan cómoda y sencilla como es en la actualidad repostar un vehículo con motor de combustión interna, señaló Huitema. “Desafortunadamente, la propuesta de AFIR no es lo suficientemente ambiciosa para lograr este objetivo. Es más, está totalmente desalineado con los nuevos objetivos de CO2 propuestos para los automóviles”, advirtió.
Ante esta situación, Acea insta al Parlamento Europeo y al Consejo Europeo a fortalecer significativamente la propuesta de la Comisión Europea para así garantizar que Europa pueda construir una densa red de infraestructura de recarga y repostaje que incluya un número suficiente de cargadores rápidos en cada estado miembro de la UE para 2030.