Repsol planea ofrecer un punto de recarga rápida cada 50 kilómetros
“Nuestra intención es desarrollar una red capilar con un punto de carga rápida cada 50 kilómetros en las grandes vías y corredores, y complementar esa red con puntos de carga ultra-rápida en emplazamientos estratégicos”, anuncia Carlos Bermúdez, gerente comercial de Movilidad Eléctrica de Repsol.
Desde la compañía multienergética se recuerda que tanto el proyecto de ley de Cambio Climático y Transición Energética como los planes anunciados por los distintos operadores de recarga eléctrica prevén un despliegue masivo de puntos de carga en los próximos años. Un esfuerzo “al que Repsol también se sumará, aunque nosotros creemos que esta ampliación debe hacerse siguiendo criterios de desarrollo de red inteligente y eficiente, como, por ejemplo, teniendo en cuenta la distancia entre puntos de cara a garantizar una capilaridad y una cobertura de todo el territorio que permita asegurar el suministro de energía para los usuarios de vehículo eléctrico”, explicó Bermúdez.
Como bien saben nuestros lectores, el Proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética obliga a las estaciones de servicio que superaran en 2019 unas ventas agregadas de gasolinas y gasóleo de más de cinco millones de litros a incorporar puntos de recarga. Esta obligatoriedad produciría una acumulación de instalaciones de recarga de baterías de vehículos eléctricos en las zonas cercanas a los pasos fronterizos con Francia y Portugal, en las que las gasolineras españolas logran elevadas ventas de gasóleo debido al menor precio de este combustible frente al de ambos países vecinos. A cambio, si se aplicara este criterio en otras zonas del país en las que las ventas de combustibles son muy inferiores a la citada cifra, los puntos de recarga escasearían.
Repsol y Kia crearon en 2018 la empresa conjunta WiBLE, que, con una flota de 500 vehículos Kia Niro PHEV, ha alcanzado en dos años los 200.000 usuarios y ha superado los 1,4 millones de viajes realizados.
Una combinación de soluciones
Repsol, informaron fuentes de la compañía presidida por Antonio Brufau, “enmarca su trabajo en movilidad eléctrica dentro de su apuesta por un modelo multienergético como la vía más sólida para descarbonizar el transporte”. En este sentido, Bermúdez afirma que “todas las alternativas energéticas para la movilidad que favorezcan la reducción de emisiones y contribuyan en la lucha contra el cambio climático tienen que ser tenidas en cuenta. Se debe recurrir a una combinación de soluciones” que integre la electrificación con el uso de combustibles de baja huella de carbono o el hidrógeno “empleando la alternativa que mejor se adapte a las necesidades de los clientes y ámbitos de uso”.
Respecto a la movilidad eléctrica, y con el objetivo de impulsarla más allá del ámbito urbano, “también es clave un diseño como país para montar puntos de recarga ultra-rápida situados estratégicamente en los principales corredores”, una tecnología que permite cargar en cinio-diez minutos aquellas baterías de los vehículos eléctricos que admitan su potencia de suministro, equiparando así la duración de la recarga eléctrica con los repostajes de los combustibles convencionales.
Repsol está avanzando en este terreno con varias instalaciones de este tipo que ya están en funcionamiento. Se trata de las estaciones de servicio de Lopidana (Álava), emplazada en la carretera N-I, y de Ugaldebieta (Vizcaya), en la autovía A-8, que cuentan, cada una de ellas, con cuatro puntos de recarga de estas características.
Desde la compañía multienergética, se destaca que Repsol ha participado en varias Manifestaciones de Interés (MDIs) relacionadas con proyectos de Movilidad Eléctrica del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, como, por ejemplo, en el ámbito de actuación de los corredores de infraestructura de recarga rápida o ultra-rápida. Asimismo, ha puesto en marcha recientemente su primer punto de carga ultra-rápida en Portugal.
Colaboraciones para aumentar la red
El reciente acuerdo alcanzado con Nissan para continuar ampliando su red de recarga en España “es un paso más en la consolidación de la oferta multienergética de Repsol en movilidad sostenible. La compañía ya cuenta con una de las redes de carga para movilidad eléctrica más relevantes en nuestro país, con más de 300 puntos en lugares de acceso público”, añaden las mismas fuentes.
“Repsol puede ofrecer una solución integral para los usuarios de vehículo eléctrico, suministrando electricidad de origen 100% renovable no sólo en ámbito privado, hogares y empresas, donde son más de 1.000 los terminales ya instalados, sino también a través de una potente red de ámbito público, con puntos de recarga en estaciones de servicio, centros comerciales, vía pública u otros emplazamientos”, remarca Carlos Bermúdez, gerente comercial de Movilidad Eléctrica de Repsol.
Durante los próximos años Repsol prevé tener “más de mil estaciones de recarga distribuidas por todo el territorio español, intensificando su presencia en los principales corredores del país”, declara Bermúdez.
“Es prioritario para nosotros alcanzar alianzas con socios estratégicos como fabricantes de vehículos, grandes corporaciones, empresas de renting o administraciones públicas”, apunta Bermúdez. En este marco, el acuerdo con Nissan prevé, en una primera fase, el despliegue conjunto de quince puntos de carga rápida en estaciones de servicio de Repsol distribuidas por toda la geografía española, con una potencia de 50 kW y que, dependiendo del tamaño de la batería del vehículo eléctrico, permiten su recarga en unos treinta minutos.
El acuerdo alcanzado recientemente con Nissan prevé, en una primera fase, el despliegue conjunto de quince puntos de carga rápida en estaciones de servicio de Repsol distribuidas por toda la geografía española, con una potencia de 50 kW.
Acuerdos con administraciones públicas
Estos quince puntos de carga rápida se añadirán a los setenta que el grupo energético ya tienen operativos. Repsol también mantiene una alianza con el Grupo Kia, que incluye la prescripción en sus concesionarios de los servicios de recarga de Repsol como solución preferente para sus vehículos 100% eléctricos e híbridos enchufables.
Asimismo, ambas compañías crearon en 2018 la empresa conjunta de carsharing WiBLE, que, con una flota de 500 vehículos Kia Niro PHEV, ha alcanzado en dos años los 200.000 usuarios y ha superado los 1,4 millones de viajes realizados.
Entre las administraciones públicas, la compañía ha firmado convenios para desarrollar su red en la vía pública con los ayuntamientos de Zaragoza, Santander o Madrid (ciudad donde Repsol tiene doce puntos de carga rápida en localizaciones como el Paseo de la Castellana o la Puerta de Alcalá), los cabildos de Fuerteventura y Lanzarote o con varias administraciones vascas. Asimismo, ha anunciado un protocolo de colaboración con la Guardia Civil que contempla la posibilidad de instalación de infraestructuras de recarga para promover una movilidad más sostenible en la Benemérita.
Además, Repsol ha alcanzado convenios de colaboración para la instalación de puntos de recarga con diversas compañías. Entre otros, ha acordado la instalación de puntos para vehículos eléctricos de los servicios médicos de Asisa; para furgonetas de reparto de última milla de la cadena de supermercados Condis y para los vehículos en nuestro país de la multinacional japonesa Ricoh.
Recarga en todos los ámbitos de uso
La compañía ha definido un plan para su negocio de movilidad eléctrica “que pasa tanto por el incremento de clientes en el ámbito vinculado, que abarca las instalaciones privadas de particulares y empresas, como por el desarrollo de la red pública de recarga”. Para ello se apoyará en su red de más de 3.300 estaciones de servicio, “con la meta de que los usuarios de vehículo eléctrico puedan desplazarse con tranquilidad y comodidad por toda España con nuestra cobertura de puntos de recarga”, continúa Bermúdez.
El servicio de Repsol para el ámbito vinculado incluye la instalación ‘llave en mano’ del terminal en garajes particulares o comunitarios y aparcamientos de empresa, la tarifa eléctrica y servicios adicionales como el mantenimiento de dicho terminal, a lo que se suman “descuentos muy sustanciales en las cargas en nuestra red pública para nuestros clientes de electricidad en el hogar”.
Repsol inició su andadura en la movilidad eléctrica con la creación en 2010 de la sociedad IBIL, participada al 50% por el Ente Vasco de la Energía (EVE). En 2018, con la compra Viesgo, “nos convertimos en comercializadora de electricidad, otro hito para completar nuestra oferta de una solución integral de recarga para vehículos eléctricos”, indica Bermúdez.
A finales de 2019, la compañía energética adquirió a IBIL su rama de actividad comercial. “Ahora es Repsol quien desarrolla la vertiente comercial de la movilidad eléctrica, pero, desde el punto de vista societario, nuestra participación en IBIL no ha cambiado, seguimos manteniendo el 50% en la compañía, que actúa como nuestro proveedor y asesor tecnológico, algo fundamental que garantiza que todos nuestros puntos de recarga tengan un componente tecnológico e innovador muy elevado”, añade.
“En una muestra de esta colaboración tecnológica y de aplicación de criterios de economía circular”, Repsol e IBIL han desarrollado la primera instalación de acceso público en España que incluye almacenamiento de energía para las recargas de vehículos eléctricos. Este innovador sistema, situado en la estación de servicio de Repsol en Tolosa (Guipúzcoa), se sirve de baterías de autobuses eléctricos recicladas, lo que facilita y abarata la instalación de infraestructura de carga en lugares sin acceso a una red eléctrica con suficiente potencia.