El Ejecutivo estudia la aplicación de impuestos contra la contaminación
Revista Estaciones de servicio10/11/2005
AMDPress.- El Gobierno central está valorando la aprobación de un gravamen empresarial que penalice "los residuos y el resto de vertidos contaminantes, imitando el ejemplo del norte de Europa, siguiendo el principio de que quien contamina paga según adelanta Expansión.
De esta forma pretende concienciar a las compañías de la necesidad de controlar sus efectos dañinos sobre el medio ambiente. Además detrás de estos impuestos verdes se prevalece "finalidad recaudatoria, que deberá generar una nueva fuente de ingresos impositivos con los que satisfacer inversiones en infraestructuras y en el cuidado ecológico", según publica Expansión citando fuentes del Ejecutivo.
La norma marco que regula la creación de estos tributos se denominará Ley de Fiscalidad Medioambiental. "En principio se tratará de gravámenes nacionales, aunque es posible negociar recargos o participaciones de las comunidades autónomas en ellos", aclaran las mismas fuentes.
Hasta el momento a nivel nacional nunca se habían aplicado estos impuestos verdes. Tan sólo algunas comunidades, como Islas Baleares, Extremadura, Andalucía y más recientemente Aragón han emprendido la senda de las ecotasas.
De esta forma pretende concienciar a las compañías de la necesidad de controlar sus efectos dañinos sobre el medio ambiente. Además detrás de estos impuestos verdes se prevalece "finalidad recaudatoria, que deberá generar una nueva fuente de ingresos impositivos con los que satisfacer inversiones en infraestructuras y en el cuidado ecológico", según publica Expansión citando fuentes del Ejecutivo.
La norma marco que regula la creación de estos tributos se denominará Ley de Fiscalidad Medioambiental. "En principio se tratará de gravámenes nacionales, aunque es posible negociar recargos o participaciones de las comunidades autónomas en ellos", aclaran las mismas fuentes.
Hasta el momento a nivel nacional nunca se habían aplicado estos impuestos verdes. Tan sólo algunas comunidades, como Islas Baleares, Extremadura, Andalucía y más recientemente Aragón han emprendido la senda de las ecotasas.