Dos provincias argentinas retiran las concesiones de extracción de petróleo a YPF
Revista Estaciones de servicio16/03/2012
EESS Digital.- Las provincias de Chubut y Santa Cruz, dos de las mayores regiones productoras de petróleo de Argentina, han retirado a la petrolera YPF -controlada por Repsol- la licencia para explorar hidrocarburos en cuatro bloques ubicados en los citados territorios, al sur del país andino. Tras confirmarse la decisión, la petrolera ha anunciado que emprenderá las medidas legales oportunas para garantizar la defensa de sus derechos y para la exigencia, en su caso, de responsabilidades públicas.
Los gobernadores de ambas provincias han escenificado la suspensión de las licencias en el transcurso de un multitudinario acto en el que han acusado a YPF de no luchar por los intereses de los argentinos. Es más, ambos funcionarios han advertido a la petrolera de que seguirán tomando y en el que, además, han advertido que si la empresa "no hace lo que corresponde" seguirán avanzando contra la compañía.
En conjunto, las licencias retiradas suponen alrededor del 7% de la producción total de gas y petróleo de YPF en el país sudamericano, según cifras oficiales. El Estado argentino posee el 0,02% de las acciones de YPF, pero tiene derecho a participar en las decisiones de la directiva y poder de veto desde la privatización de la compañía, en 1999.
De hecho, la decisión de los gobernadores de estas dos provincias supone una continuación de la senda iniciada hace ya algunas semanas por el Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, que ha elevado la presión sobre YPF, a la que acusa de no invertir lo suficiente en los bloques de hidrocarburos que explota, lo que, supuestamente, habría lastrado la producción y encarecido consecuentemente los carburantes.
Por ese motivo, últimamente se han disparado los rumores sobre supuestos planes de nacionalización o intervención, si bien estos nunca han sido confirmados de manera oficial. Lo que sí se anunció públicamente fue la apertura, a principios de este año, de una investigación, tanto a Repsol como a otras tres petroleras extranjeras, por abuso de posición dominante en el mercado del gasóleo.
Los gobernadores de ambas provincias han escenificado la suspensión de las licencias en el transcurso de un multitudinario acto en el que han acusado a YPF de no luchar por los intereses de los argentinos. Es más, ambos funcionarios han advertido a la petrolera de que seguirán tomando y en el que, además, han advertido que si la empresa "no hace lo que corresponde" seguirán avanzando contra la compañía.
En conjunto, las licencias retiradas suponen alrededor del 7% de la producción total de gas y petróleo de YPF en el país sudamericano, según cifras oficiales. El Estado argentino posee el 0,02% de las acciones de YPF, pero tiene derecho a participar en las decisiones de la directiva y poder de veto desde la privatización de la compañía, en 1999.
De hecho, la decisión de los gobernadores de estas dos provincias supone una continuación de la senda iniciada hace ya algunas semanas por el Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, que ha elevado la presión sobre YPF, a la que acusa de no invertir lo suficiente en los bloques de hidrocarburos que explota, lo que, supuestamente, habría lastrado la producción y encarecido consecuentemente los carburantes.
Por ese motivo, últimamente se han disparado los rumores sobre supuestos planes de nacionalización o intervención, si bien estos nunca han sido confirmados de manera oficial. Lo que sí se anunció públicamente fue la apertura, a principios de este año, de una investigación, tanto a Repsol como a otras tres petroleras extranjeras, por abuso de posición dominante en el mercado del gasóleo.