Denuncia la falta de competencia en el mercado español
La OCU demuestra que las petroleras se aprovechan del efecto lunes
Revista Estaciones de servicio13/02/2013
Noticia1
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha hecho público un informe en el que demuestra que las principales petroleras que operan en España bajan los precios los lunes para salir beneficiadas en las comparaciones que semanalmente lleva a cabo la Comisión Europea entre los diferentes mercados de la UE.
La asociación de consumidores ha recogido entre septiembre y diciembre de 2012 los precios de los carburantes ofertados en 7.500 estaciones de servicio españolas remitidos al Ministerio de Industria. El análisis de esos datos lleva a la OCU a afirmar que el fenómeno que la Comisión Nacional de la Energía bautizó como efecto lunes es un hecho constatable en nuestro país.
Bajar los precios los lunes para después volver a subirlo gradualmente a lo largo de la semana es una práctica habitual que además parece intensificarse con el tiempo, puesto que inicialmente los descuentos efectuados el primer día de la semana eran inferiores al 1%, pero superaron con amplitud ese porcentaje a finales del año pasado.
Y es que las gasolineras con bandera Repsol, Campsa y Cepsa tienen la gasolina más barata los lunes a excepción de puentes y fiestas-. El precio del carburante es alrededor de un 1% inferior, aunque en algunos casos la rebaja alcanza el 2%. Otras petroleras, como BP o Petronor, bajan los precios los martes, un matiz que, según el estudio, podría suponer un intento de diferenciación o en un retraso en comunicar sus precios al ministerio de Industria.
Además, la organización subraya que tanto las bajadas como las subidas intermarca coinciden en el tiempo. En opinión de la OCU, esta circunstancia representa un indicio claro de la falta de competencia en España, puesto que en un mercado que ha visto variaciones del precio del diésel de más del 10% en poco más de un mes, es muy sospechoso que las tres compañías principales mantengan sus distancias intactas.
A la luz de los resultados del informe, desde la OCU opinan que estos cambios en los precios poco tienen con ver con cuestiones relativas a la demanda de carburante, sino al día de comunicación de los precios a la UE, por lo que, de facto, se produce una distorsión y un engaño a dicho mecanismo europeo, mostrando precios inferiores a los que se registran, de media, semanalmente.
El estudio de la OCU también pone en el punto de mira a la Administración. Y es que, según la organización de consumidores, el Gobierno no tiene interés en corregir el citado efecto lunes porque este fenómeno permite al mercado español de carburante salir mejor parado en la comparación de precios entre países y porque puede servirle para camuflar subidas de precios con malos efectos en la inflación.
La asociación de consumidores ha recogido entre septiembre y diciembre de 2012 los precios de los carburantes ofertados en 7.500 estaciones de servicio españolas remitidos al Ministerio de Industria. El análisis de esos datos lleva a la OCU a afirmar que el fenómeno que la Comisión Nacional de la Energía bautizó como efecto lunes es un hecho constatable en nuestro país.
Bajar los precios los lunes para después volver a subirlo gradualmente a lo largo de la semana es una práctica habitual que además parece intensificarse con el tiempo, puesto que inicialmente los descuentos efectuados el primer día de la semana eran inferiores al 1%, pero superaron con amplitud ese porcentaje a finales del año pasado.
Y es que las gasolineras con bandera Repsol, Campsa y Cepsa tienen la gasolina más barata los lunes a excepción de puentes y fiestas-. El precio del carburante es alrededor de un 1% inferior, aunque en algunos casos la rebaja alcanza el 2%. Otras petroleras, como BP o Petronor, bajan los precios los martes, un matiz que, según el estudio, podría suponer un intento de diferenciación o en un retraso en comunicar sus precios al ministerio de Industria.
Además, la organización subraya que tanto las bajadas como las subidas intermarca coinciden en el tiempo. En opinión de la OCU, esta circunstancia representa un indicio claro de la falta de competencia en España, puesto que en un mercado que ha visto variaciones del precio del diésel de más del 10% en poco más de un mes, es muy sospechoso que las tres compañías principales mantengan sus distancias intactas.
A la luz de los resultados del informe, desde la OCU opinan que estos cambios en los precios poco tienen con ver con cuestiones relativas a la demanda de carburante, sino al día de comunicación de los precios a la UE, por lo que, de facto, se produce una distorsión y un engaño a dicho mecanismo europeo, mostrando precios inferiores a los que se registran, de media, semanalmente.
El estudio de la OCU también pone en el punto de mira a la Administración. Y es que, según la organización de consumidores, el Gobierno no tiene interés en corregir el citado efecto lunes porque este fenómeno permite al mercado español de carburante salir mejor parado en la comparación de precios entre países y porque puede servirle para camuflar subidas de precios con malos efectos en la inflación.