La inmensa mayoría son infracciones leves
Castilla y León detecta irregularidades en el 65% de las estaciones inspeccionadas en 2013
Revista Estaciones de servicio17/01/2014
Cyl 2115
La Junta de Castilla y León ha detectado irregularidades en el 64,76% de las estaciones de servicio que recibieron la visita de los inspectores del servicio de Consumo del Gobierno regional a lo largo de 2013. El pasado ejercicio fueron inspeccionados 105 establecimientos relacionados con el segmento de distribución de carburante, entre las que figuraban 102 estaciones de servicio, dos tiendas polivalentes y una instalación de lavado y engrase de automóviles.
Entre estos 105 establecimientos, los inspectores detectaron irregularidades en 68 (64,76% del total), mientras que los otros 37 (35,24%) pasaron con nota el examen. Desde la Junta de Castilla y León matizan que la campaña de inspecciones se llevó a cabo únicamente en estaciones de servicio, excluyendo deliberadamente a aquellas instalaciones que comercializan menos de tres productos diferentes, que son consideradas “unidades de suministro”.
La mayor parte de las infracciones detectadas tienen que ver con incumplimientos de la normativa relativa a “información al usuario”. En este capítulo se registraron diez incumplimientos con respecto a los medios de pago admitidos, mientras que en nueve instalaciones no se exhibía correctamente el PVP/litro de todos y cada uno de los combustibles a disposición del consumidor.
La vasija para comprobar la exactitud de los litros dispensados acaparó un total de diez infracciones, la mayoría de ellas (ocho) motivadas porque el recipiente no se encontraba debidamente “certificado y calibrado oficialmente para garantizar la fiabilidad de la medida”.
Pero, sin duda, la infracción estrella fue la no aceptación de determinados billetes (incluidos los de 100, 200 y 500 euros) a la hora de cobrar el combustible repostado; hasta 26 estaciones de servicio fueron cazadas por los inspectores incumpliendo este requisito.
Sin instrucciones
En lo que respecta al lavado de vehículos, la mayor parte de las infracciones estuvieron relacionadas con la omisión de las tarifas de precios en las máquinas que realizan la limpieza de los automóviles. Seis estaciones no exponían el listado, mientras que en otras tres no figuraban instrucciones comprensibles para accionar los equipos a pesar de que debían ser accionados por el cliente.
En el apartado relacionado con la tienda, 11 establecimientos tenían a disposición de los consumidores algún producto cuya caducidad había expirado. No obstante, la principal infracción, en la que incurrieron 40 establecimientos, consistió en no indicar correctamente el precio por unidad de medida de cada uno de los productos a la venta.
A pesar de que los inspectores de la Junta de Castilla y León detectaron hasta 239 irregularidades, lo cierto es que la mayoría de ellas era de carácter leve, como evidencia el hecho de que la vigilancia sobre las gasolineras de la región se saldó únicamente con la apertura de tres expedientes, cantidad que representa menos del 2,9% del total de instalaciones inspeccionadas.
A la luz de estos datos, Rafael Pizarro, presidente de la Asociación de Vendedores al por menor de Carburantes y Combustibles de Castilla y León (Avecal), ha manifestado su satisfacción en declaraciones exclusivas a Estaciones de Servicio: “Que en un sector tan regulado como el nuestro el grado de incidencias sea tan bajo da una buena medida de la excelencia de las gasolineras de nuestra región”, ha expresado.
Entre estos 105 establecimientos, los inspectores detectaron irregularidades en 68 (64,76% del total), mientras que los otros 37 (35,24%) pasaron con nota el examen. Desde la Junta de Castilla y León matizan que la campaña de inspecciones se llevó a cabo únicamente en estaciones de servicio, excluyendo deliberadamente a aquellas instalaciones que comercializan menos de tres productos diferentes, que son consideradas “unidades de suministro”.
La mayor parte de las infracciones detectadas tienen que ver con incumplimientos de la normativa relativa a “información al usuario”. En este capítulo se registraron diez incumplimientos con respecto a los medios de pago admitidos, mientras que en nueve instalaciones no se exhibía correctamente el PVP/litro de todos y cada uno de los combustibles a disposición del consumidor.
La vasija para comprobar la exactitud de los litros dispensados acaparó un total de diez infracciones, la mayoría de ellas (ocho) motivadas porque el recipiente no se encontraba debidamente “certificado y calibrado oficialmente para garantizar la fiabilidad de la medida”.
Pero, sin duda, la infracción estrella fue la no aceptación de determinados billetes (incluidos los de 100, 200 y 500 euros) a la hora de cobrar el combustible repostado; hasta 26 estaciones de servicio fueron cazadas por los inspectores incumpliendo este requisito.
Sin instrucciones
En lo que respecta al lavado de vehículos, la mayor parte de las infracciones estuvieron relacionadas con la omisión de las tarifas de precios en las máquinas que realizan la limpieza de los automóviles. Seis estaciones no exponían el listado, mientras que en otras tres no figuraban instrucciones comprensibles para accionar los equipos a pesar de que debían ser accionados por el cliente.
En el apartado relacionado con la tienda, 11 establecimientos tenían a disposición de los consumidores algún producto cuya caducidad había expirado. No obstante, la principal infracción, en la que incurrieron 40 establecimientos, consistió en no indicar correctamente el precio por unidad de medida de cada uno de los productos a la venta.
A pesar de que los inspectores de la Junta de Castilla y León detectaron hasta 239 irregularidades, lo cierto es que la mayoría de ellas era de carácter leve, como evidencia el hecho de que la vigilancia sobre las gasolineras de la región se saldó únicamente con la apertura de tres expedientes, cantidad que representa menos del 2,9% del total de instalaciones inspeccionadas.
A la luz de estos datos, Rafael Pizarro, presidente de la Asociación de Vendedores al por menor de Carburantes y Combustibles de Castilla y León (Avecal), ha manifestado su satisfacción en declaraciones exclusivas a Estaciones de Servicio: “Que en un sector tan regulado como el nuestro el grado de incidencias sea tan bajo da una buena medida de la excelencia de las gasolineras de nuestra región”, ha expresado.