La trama generaba competencia desleal a las estaciones que cumplen con la ley
47 gasolineras participaban en el fraude del gasóleo desmantelado por la Guardia Civil
Revista Estaciones de servicio06/06/2014
Nehar 2158
Hasta 47 gasolineras participaban en el millonario fraude del gasóleo desmantelado ayer, 5 de junio, por la Guardia Civil y la Agencia Tributaria en el marco de la Operación Nehar, que ya se ha saldado con 98 detenidos y 52 registros en domicilios y empresas.
El dispositivo sigue abierto, por lo que los mandos del Instituto Armado prevén que tanto el número de detenciones como el de registros y posibles precintos de instalaciones de suministro podrían verse incrementados a lo largo del día de hoy.
Así lo ha pronosticado el comandante Antonio Balas, jefe del Grupo de Delitos Económicos de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. En el transcurso de una rueda de prensa celebrada esta mañana en la sede de la Agencia Tributaria, el comandante Balas ha asegurado que el juzgado nº 5 de Illescas (Toledo), donde de momento se centraliza la investigación, ha decretado el secreto de las diligencias, por lo que no pueden hacerse públicos los nombres de las gasolineras que participaban en la trama criminal.
Sin embargo, ante la insistencia de los periodistas ha afirmado que “quien está en el sector sabe quién puede verse metido en este tipo de líos”. El comandante ha hecho especial hincapié en el daño que los implicado en la Operación Nehar han causado a la red española de estaciones de servicio, pues cuando una de las gasolineras que comercializaban gasóleo adulterado comenzaba a bajar los precios de venta, las estaciones de su entorno se veían obligadas a reducir los suyos debido a esta competencia desleal.
Es más, los investigadores han detectado que algunas gasolineras que, en principio, eran víctimas de los precios artificialmente bajos ofrecidos por la trama pasaban a adquirir el carburante a las organizaciones implicadas en esta operación y se convertían en cómplices de los hechos delictivos.
24 provincias
La Operación Nehar se ha llevado a cabo simultáneamente en 24 provincias de 11 comunidades autónomas (Andalucía, Aragón, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cataluña, Extremadura, Galicia, Madrid, Murcia, Navarra y Comunidad Valenciana).
La trama desarticulada en el marco de la Operación Nehar estaba integrada por, al menos, nueve organizaciones que actuaban con una estructura horizontal, no piramidal, lo que ha dificultado sobremanera la investigación policial.
El comandante Balas ha subrayado que dentro de estas organizaciones había empresas que se encargaban de adquirir el gasóleo B a operadores cuya actividad es perfectamente legal para, posteriormente, lavar el producto eliminando su característico tinte rojo y adulterarlo con otras sustancias que permitían “engordar” el carburante, es decir, incrementar su volumen hasta en un 50%.
Otras empresas de la trama lo distribuían en cisternas hasta las sedes de compañías transportistas o hasta las estaciones de servicio implicadas. Había, incluso, alguna sociedad que llevaba a cabo todo el proceso, desde la adquisición del gasóleo B hasta la venta del producto en las gasolineras como si fuera gasóleo de automoción.
Empresas implicadas
En el marco de la Operación Nehar, los agentes de Aduanas y de Guardia Civil han obtenido pruebas e indicios de la participación en los hechos de 138 personas físicas y 104 personas jurídicas, entras las que, además de las 47 estaciones de servicio mencionadas anteriormente se encuentran una fábrica de biodiésel, 37 titulares de establecimientos dedicados a la producción, distribución y comercialización al por mayor de hidrocarburos, 13 transportistas, nueve posibles centros de transformación (lavaderos de gasóleo) y numerosos receptores de facturas falsas.
Los 750 funcionarios intervinientes en la fase de explotación se han incautado, además, de 1,2 millones de euros en efectivo, 331 vehículos y 128 inmuebles. En palabras del comandante Balas, “estas cifras se verán incrementadas en el transcurso de la operación”. Hasta el momento, los agentes han podido probar un fraude de 5,5 millones a la Hacienda Pública sólo en el impuesto de hidrocarburos, a lo que habría que sumar las cifras correspondientes al IVA y a otros impuestos.
Preguntado acerca de la calidad del producto vendido y de los posibles riesgos para los automóviles que lo utilizaran, el mando de la Guardia Civil ha sido tajante: “Se la puede imaginar. Tenían camiones y no repostaban en sus propias gasolineras”.
El dispositivo sigue abierto, por lo que los mandos del Instituto Armado prevén que tanto el número de detenciones como el de registros y posibles precintos de instalaciones de suministro podrían verse incrementados a lo largo del día de hoy.
Así lo ha pronosticado el comandante Antonio Balas, jefe del Grupo de Delitos Económicos de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. En el transcurso de una rueda de prensa celebrada esta mañana en la sede de la Agencia Tributaria, el comandante Balas ha asegurado que el juzgado nº 5 de Illescas (Toledo), donde de momento se centraliza la investigación, ha decretado el secreto de las diligencias, por lo que no pueden hacerse públicos los nombres de las gasolineras que participaban en la trama criminal.
Sin embargo, ante la insistencia de los periodistas ha afirmado que “quien está en el sector sabe quién puede verse metido en este tipo de líos”. El comandante ha hecho especial hincapié en el daño que los implicado en la Operación Nehar han causado a la red española de estaciones de servicio, pues cuando una de las gasolineras que comercializaban gasóleo adulterado comenzaba a bajar los precios de venta, las estaciones de su entorno se veían obligadas a reducir los suyos debido a esta competencia desleal.
Es más, los investigadores han detectado que algunas gasolineras que, en principio, eran víctimas de los precios artificialmente bajos ofrecidos por la trama pasaban a adquirir el carburante a las organizaciones implicadas en esta operación y se convertían en cómplices de los hechos delictivos.
24 provincias
La Operación Nehar se ha llevado a cabo simultáneamente en 24 provincias de 11 comunidades autónomas (Andalucía, Aragón, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cataluña, Extremadura, Galicia, Madrid, Murcia, Navarra y Comunidad Valenciana).
La trama desarticulada en el marco de la Operación Nehar estaba integrada por, al menos, nueve organizaciones que actuaban con una estructura horizontal, no piramidal, lo que ha dificultado sobremanera la investigación policial.
El comandante Balas ha subrayado que dentro de estas organizaciones había empresas que se encargaban de adquirir el gasóleo B a operadores cuya actividad es perfectamente legal para, posteriormente, lavar el producto eliminando su característico tinte rojo y adulterarlo con otras sustancias que permitían “engordar” el carburante, es decir, incrementar su volumen hasta en un 50%.
Otras empresas de la trama lo distribuían en cisternas hasta las sedes de compañías transportistas o hasta las estaciones de servicio implicadas. Había, incluso, alguna sociedad que llevaba a cabo todo el proceso, desde la adquisición del gasóleo B hasta la venta del producto en las gasolineras como si fuera gasóleo de automoción.
Empresas implicadas
En el marco de la Operación Nehar, los agentes de Aduanas y de Guardia Civil han obtenido pruebas e indicios de la participación en los hechos de 138 personas físicas y 104 personas jurídicas, entras las que, además de las 47 estaciones de servicio mencionadas anteriormente se encuentran una fábrica de biodiésel, 37 titulares de establecimientos dedicados a la producción, distribución y comercialización al por mayor de hidrocarburos, 13 transportistas, nueve posibles centros de transformación (lavaderos de gasóleo) y numerosos receptores de facturas falsas.
Los 750 funcionarios intervinientes en la fase de explotación se han incautado, además, de 1,2 millones de euros en efectivo, 331 vehículos y 128 inmuebles. En palabras del comandante Balas, “estas cifras se verán incrementadas en el transcurso de la operación”. Hasta el momento, los agentes han podido probar un fraude de 5,5 millones a la Hacienda Pública sólo en el impuesto de hidrocarburos, a lo que habría que sumar las cifras correspondientes al IVA y a otros impuestos.
Preguntado acerca de la calidad del producto vendido y de los posibles riesgos para los automóviles que lo utilizaran, el mando de la Guardia Civil ha sido tajante: “Se la puede imaginar. Tenían camiones y no repostaban en sus propias gasolineras”.