Luis Aires, partidario de que los contratos entre abanderados y operadoras se amplíen a cinco años
El presidente de BP España, Luis Aires, se mostró partidario este miércoles, 6 de julio, de que los contratos de suministro entre las estaciones de servicio abanderadas y las operadoras se amplíen a cinco años, un plazo que “es la media europea, porque si no, las inversiones no se amortizan en un solo año”. Aires realizó estas declaraciones en el acto de presentación de la 65ª edición del BP Statistical Review of World Energy, que tuvo lugar en la Fundación Giner de los Ríos, en Madrid.
Aires también se mostró contrario al fondo de eficiencia energética creado por el Gobierno del PP “porque no es transparente y es un impuesto semioculto. Lo que habría que hacer era crear unos incentivos a las inversiones en eficiencia energética”. Además, instó a que se incremente la lucha contra el fraude fiscal en el sector, en el cual “minoristas venden a mayoristas, sin control alguno, lo que supone, además de un fraude, competencia desleal”.
En la presentación del citado estudio participó el secretario de Estado de Energía en funciones, Alberto Nadal, quien afirmó que la sustitución del vehículo de gasolina por el eléctrico “todavía tardará mucho tiempo”.
Por lo que respecta al análisis energético realizado por BP, que en esta edición cumple 65 años, en él se destaca que el consumo energético en España creció en 2015 un 1,7%. Como contrapartida, nuestro país fue el segundo de la Unión Europea en el cual crecieron en mayor medida las emisiones de CO2. En concreto, un 6,8%, debido al mayor consumo de carbón (que aumentó un 23,9%).
El aumento de la demanda energética durante 2015 supone un cambio de tendencia, ya que desde 2008 (excepto un leve repunte experimentado en 2010) hasta 2014, el consumo había caído año tras año. En concreto, el consumo energético durante el pasado año fue de 134,4 millones de toneladas de petróleo equivalente, cifra que aún queda lejos del volumen de 2007, ejercicio récord, en el cual se consumieron 158 millones de toneladas de petróleo equivalente.
En cuanto al consumo energético por fuentes de energía, destacó el crecimiento experimentado por el carbón, con un alza del 23,9% respecto a 2014, como consecuencia de la caída del precio internacional de este combustible, el menor precio del CO2 y la situación climatológica, que estuvo marcada por la falta de lluvias -que hizo caer la aportación de la energía hidráulica-, así como la sucesión de anticiclones, que incidieron en una menor aportación de la eólica.
En consecuencia, las emisiones de CO2 crecieron un 6,8% en 2015, muy por encima de la media de la Unión Europea (1,3%). De hecho, España fue el país de la UE que ha registrado un mayor incremento de sus emisiones por detrás de Portugal y se disputa con Colombia, el séptimo puesto en el listado mundial, por detrás de Turkmenistán (18,3%), Qatar (13%), Vietnam (11,4%), Filipinas (8,6%), Portugal (7,6%) y Bangladesh (7,1%).