Pablo Molina, director general de M&M 500: "Abordamos cada obra como un reto"
Revista Estaciones de servicio09/02/2015
Pablo molina
Afrontar cada encargo como un reto cuyo objetivo final es lograr que el cliente de la estación de servicio viva una experiencia de uso positiva que le anime a escoger a esa gasolinera como su habitual punto de repostaje. Ese es enfoque que Pablo Molina y los 50 profesionales que trabajan en M&M 500 dan a la actividad de la compañía albaceteña, que cuenta con dos delegaciones en la Península Ibérica y este año abrirá una tercera en las Islas Canarias.
En una entrevista que se publica en el número de febrero de Estaciones de Servicio, Molina explica que construir o reformar una estación de servicio es una tarea que exige, además de experiencia y profesionalidad, diseñar con sumo cuidado todo el proceso, evaluar las necesidades del proyecto y acotar, y cumplir, los plazos fijados. En M&M 500 tienen claro, además, que cuanto mejor le vaya a sus clientes mejor le irá a la firma, que ya cuenta con experiencia fuera de España.
A continuación ofrecemos un breve resumen de la extensa entrevista incluida en el número 296 de Estaciones de Servicio.
Estaciones de Servicio: ¿Cuáles son los aspectos más delicados a la hora de construir una estación de servicio?
Pablo Molina: Quizás una de las cosas más importantes a la hora de distinguir este tipo de obras con las de cualquier otro tipo es que en las estaciones de servicio hay una parte muy importante y fundamental de la obra que queda enterrada. De esta parte depende en un alto porcentaje el buen funcionamiento del negocio, y por lo tanto hay que cuidar mucho esta fase de la construcción.
Es imprescindible que toda la obra se ejecute de forma muy profesional, pero en esta parte es especialmente importante, ya que si se producen incidencias posteriores son muy complicadas de subsanar y, además, interfieren muy negativamente en el desarrollo diario del negocio, por lo que es necesario que la empresa que se encarga de la construcción tenga ya una dilatada experiencia en dichas instalaciones.
EE.SS: ¿Qué aspectos debe cuidar más un empresario a la hora de escoger al proveedor que construya su estación de servicio?
P.M: Es fundamental que un proyecto tan importante como el de este tipo de negocio se encargue a cualquiera de las empresas especializadas que existen en el país. Hoy en día la mayoría de las firmas especializadas tienen un alto nivel de profesionalidad y conocimiento de todo el proceso constructivo.
Quizás una de los errores más habituales es incorporar, por parte del empresario, a empresas que ejecuten parte del proyecto por el hecho de que se dedican a esa actividad, pero que carecen de experiencia en la ejecución de obras en gasolineras. No hay que olvidar que en la mayoría de los casos el plazo de ejecución de la obra completa suele ser muy ajustado, por lo que si se produce algún retraso en alguna de las fases de la construcción termina afectando al resto, por lo que se genera una retraso en la entrega o bien se compromete la calidad del resultado final para cumplir los plazos pactados.
En una entrevista que se publica en el número de febrero de Estaciones de Servicio, Molina explica que construir o reformar una estación de servicio es una tarea que exige, además de experiencia y profesionalidad, diseñar con sumo cuidado todo el proceso, evaluar las necesidades del proyecto y acotar, y cumplir, los plazos fijados. En M&M 500 tienen claro, además, que cuanto mejor le vaya a sus clientes mejor le irá a la firma, que ya cuenta con experiencia fuera de España.
A continuación ofrecemos un breve resumen de la extensa entrevista incluida en el número 296 de Estaciones de Servicio.
Estaciones de Servicio: ¿Cuáles son los aspectos más delicados a la hora de construir una estación de servicio?
Pablo Molina: Quizás una de las cosas más importantes a la hora de distinguir este tipo de obras con las de cualquier otro tipo es que en las estaciones de servicio hay una parte muy importante y fundamental de la obra que queda enterrada. De esta parte depende en un alto porcentaje el buen funcionamiento del negocio, y por lo tanto hay que cuidar mucho esta fase de la construcción.
Es imprescindible que toda la obra se ejecute de forma muy profesional, pero en esta parte es especialmente importante, ya que si se producen incidencias posteriores son muy complicadas de subsanar y, además, interfieren muy negativamente en el desarrollo diario del negocio, por lo que es necesario que la empresa que se encarga de la construcción tenga ya una dilatada experiencia en dichas instalaciones.
EE.SS: ¿Qué aspectos debe cuidar más un empresario a la hora de escoger al proveedor que construya su estación de servicio?
P.M: Es fundamental que un proyecto tan importante como el de este tipo de negocio se encargue a cualquiera de las empresas especializadas que existen en el país. Hoy en día la mayoría de las firmas especializadas tienen un alto nivel de profesionalidad y conocimiento de todo el proceso constructivo.
Quizás una de los errores más habituales es incorporar, por parte del empresario, a empresas que ejecuten parte del proyecto por el hecho de que se dedican a esa actividad, pero que carecen de experiencia en la ejecución de obras en gasolineras. No hay que olvidar que en la mayoría de los casos el plazo de ejecución de la obra completa suele ser muy ajustado, por lo que si se produce algún retraso en alguna de las fases de la construcción termina afectando al resto, por lo que se genera una retraso en la entrega o bien se compromete la calidad del resultado final para cumplir los plazos pactados.