APPA Biocarburantes: El Gobierno nos apuñala por la espalda y encima dice que es por nuestro bien
Revista Estaciones de servicio27/02/2013
Alfonso ausin
En la exposición de motivos del citado texto normativo el Ejecutivo afirma que esta medida servirá para asegurar cierta estabilidad al sector de los biocarburantes. Alfonso Ausín tira de ironía y apostilla: Ciertamente, la muerte de un sector conduce a un estado de estabilidad total.
El presidente de APPA Biocarburantes considera increíble que se incluya en una norma destinada a apoyar al emprendedor y estimular el crecimiento y la creación de empleo, una medida que va a contribuir a la pérdida de centenares de puestos de trabajo y a la ruina de un sector industrial emprendedor que ha invertido más de 1.800 millones de euros para fabricar biodiésel y bioetanol en España.
El texto aprobado el viernes por el Consejo de Ministros y publicado el sábado en el BOE contempla una reducción del porcentaje obligatorio de biodiésel en el gasóleo. Así, del 6,5% previsto para 2013 se pasa al 4,1%. Esta disminución provocará un descenso de alrededor del 60% en el consumo de biodiésel para este año en comparación con el ejercicio anterior.
Y ello es así porque, según explican desde APPA, se espera que un 30% de la obligación de este año se cumpla virtualmente con certificados de biocarburantes del año pasado traspasados a 2013, tal como permite la legislación vigente.
Además, desde la asociación subrayan que la demanda real esperada de biodiésel en 2013 (alrededor de 615.000 toneladas) representaría de facto una cuota de mercado de tan sólo un 2,8% del total de carburantes diésel consumidos, una demanda que se cubrirá en un 80% con importaciones desleales procedentes de Argentina e Indonesia mientras el Gobierno no adopte las medidas regulatorias adecuadas que lo impidan.
La puntilla
Y es que ésa es otra; porque, tal y como denuncian desde la asociación de productores, la mencionada rebaja en los objetivos obligatorios es la puntilla para un sector destrozado por las importaciones desleales de biodiésel desde hace seis años. Esta circunstancia ha provocado, según Ausín, que las plantas españolas trabajaran al 9% de su capacidad en 2012, frente al 15% de 2011 y el 21% de 2010, unos ratios totalmente insostenibles.
En cuanto al bioetanol, tras la rebaja del objetivo mínimo de biocarburantes en gasolina desde el 4,1% al 3,9%, se prevé que la demanda de este producto descienda alrededor de un 10% respecto a la de 2012 (320.000 t), lo que unido a la posible disminución de las exportaciones, empeorará el ratio de funcionamiento de las cuatro plantas españolas de bioetanol.
Mal en el fondo y en la forma
Los responsables de APPA critican tanto el fondo como la forma de la revolución emprendida por el Ejecutivo el pasado viernes. En su opinión, mediante la utilización injustificada de un RD-L, el Gobierno ha obviado su obligación de consulta previa a los sectores afectados, tras haber venido ocultando a la opinión pública desde el pasado mes de octubre que estaba tramitando un Real Decreto en el que se consideraba suficiente una rebaja de la obligación global de biocarburantes hasta el 6,1%.
Los productores de biocarburantes consideran falaz que el Gobierno asegure que la reducción de obligaciones para los bios en ningún caso, compromete el cumplimiento de los objetivos comunitarios previstos para 2020. Antes al contrario, desde APPA subrayan que es evidente que contradice de forma flagrante la senda fijada en el Plan de Energías Renovables 2011-2020 para el cumplimiento del objetivo comunitario de que las energías renovables alcancen en 2020 en 10% del consumo final en el transporte, objetivo consagrado en España por la Ley 2/2011 de Economía Sostenible.
Los responsables de APPA lo tienen claro; con el Real Decreto-Ley aprobado el pasado viernes, el Gobierno pone el último clavo en el ataúd del sector del biodiésel en España, tras haberse permitido durante años que las petroleras se aprovecharan de los incentivos fiscales y del dumping de las masivas importaciones desleales para actuar en detrimento de la industria española, condenada así a una lenta y mortal agonía.