Según su presidente, José María Marín
La CNMC "vigilará con lupa" el sector de los carburantes
Revista Estaciones de servicio02/12/2013
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“Les puedo asegurar que, en el momento en que haya una denuncia, la CNMC intervendrá de inmediato”, ha asegurado el presidente de la CNMC, que en la actualidad trabaja en al menos dos expedientes iniciados por la extinta Comisión Nacional de la Competencia (CNC) contra las principales petroleras que operan en nuestro país.
Algunasde ellas, entre las que se encuentra Cepsa, está implicada en los dos citados expedientes, uno por “coordinación entre operadores de productos petrolíferos en materia de precios, clientes y condiciones comerciales y en el intercambio de información comercial sensible, en los mercados de distribución de combustible de automoción” y otro por la comisión de “conductas anticompetitivas, que consistirían en la coordinación en materia de precios entre cada uno de los citados operadores de productos petrolíferos y empresarios independientes que operan en sus respectivas redes de distribución de combustible de automoción”.
Se da la circunstancia de que José María Marín formó parte de la directiva de Cepsa durante más de 20 años y hasta 2005, cuando, siendo director de Relaciones Institucionales, presentó su renuncia voluntaria tras ser fichado como consejero del Banco de España.
Marín, que ha participado en un desayuno organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE), ha rechazado que su paso profesional por Cepsa condicione su actuación sobre el segmento de la distribución de carburantes.
“Dejé Cepsa hace nueve años. Ha cambiado el perímetro de negocios, la dirección y la propiedad. No tengo ya ninguna vinculación. He venido sin hipotecas y me iré con los mismos amigos que llegué”, ha afirmado Marín tras ser preguntado al respecto por los periodistas.
La CNMC debe concluir la investigación relacionada con los expedientes abiertos contra las petroleras antes de enero de 2015, 18 meses después de su incoación formal. Marín ha anunciado además que su intención es intentar acortar los plazos tan dilatados previstos desde el inicio de una investigación hasta el fallo de la CNMC porque se corre el peligro de que la resolución se quede obsoleta si se retrasa mucho su aplicación.