Entrevista a Pedro Melgarejo, responsable de la línea de negocio de Envase y Embalaje en Aimplas
Envase alimentario y cosmético… cada uno con sus diferentes requerimientos de seguridad. A grandes rasgos ¿cuáles son las diferencias entre ellos?
La principal diferencia entre un envase cosmético y un envase alimentario viene provocada por el producto que contiene. En el caso de un envase alimentario, el producto es, en la mayoría de los casos, un producto que se ve afectado por numerosos procesos de degradación. Estos procesos de degradación se aceleran por factores ambientales como el oxígeno y la humedad, que provocan el acortamiento de la vida útil del producto envasado. Aunque estos efectos se pueden dar en los cosméticos también, son mucho menos pronunciados, y no llegan a provocar tanto acortamiento en la vida útil del cosmético, en la mayoría de ocasiones.
Cuando se habla de envase plástico se sabe que el principal hándicap que éste tiene es que no es barrera total a estos gases, y eso es lo que confiere que para cada producto y cada velocidad de degradación de éste, se busquen materiales capaces de frenar tal efecto de acortamiento de la vida útil.
¿Existen más diferencias?
Sí. Otra diferencia importante entre ambos envases es el control en seguridad al consumidor que actualmente existe. En el envase plástico alimentario las medidas de control en materia de seguridad alimentaria son muy exigentes, actualmente las más estrictas frente a otros materiales en las que actualmente no existen. En el campo de la cosmética, aunque se están iniciando foros donde esto se discute, todavía no se dispone de legislación en cuanto a las sustancias que se pueden transferir del envase al producto y causar toxiinfecciones en el usuario del cosmético, es un camino por recorrer en los próximos años.
¿Qué líneas de trabajo se están desarrollando en el campo de los envases barrera?
Dos líneas, principalmente: Una de ellas es el ecodiseño de los envases. Se trata de mejorar la barrera de materiales convencionales a los diferentes gases para evitar la presencia de más estructuras de diferentes plásticos que hagan el producto difícil de reciclar tras su uso. Un envase tiene un mayor coste de energía en su ciclo de vida y posterior valorización cuantas más estructuras diferentes de plástico contengan, y es ahí donde se están centrando los esfuerzos. Un efecto colateral a esta línea, y no menos importante, es la reducción de material, con el consiguiente de ahorro de costes para el transformador de envases, que cada día más es presionado por el Canal Retail en este sentido.
¿Ya la segunda?
Los materiales biodegradables son otra de las líneas de investigación en el mundo del envase. Los materiales biodegradables, a priori y con un canal apropiado tras su utilización, son mas respetuosos con el medioambiente que los materiales convencionales. Pero actualmente tienen como hándicap que no tienen las mismas propiedades que los materiales convencionales. Una de estas propiedades que cada día se está mejorando es la barrera a los gases, con la consiguiente mejora en el envasado de productos perecederos que sean influenciados por los gases para su degradación organoléptica. Gracias a estos nuevos desarrollos, cada día hay materiales biodegradables con mejores propiedades barrera.
Ponga ejemplos de nuevo envases barrera, ¿de qué forma favorecerán al consumidor?
En general, los nuevos desarrollos barrera se dirigen en dos sentidos: a adaptarse a los nuevos procesos de envasado, y a la mejora de materiales que anteriormente no tenían esta característica barrera. El primer ejemplo que se puede poner es el desarrollo de materiales plásticos resistentes a procesos de conservación basados en altas temperaturas, como por ejemplo procesos de esterilización. Se están desarrollando nuevos materiales que aportan barreras y tienen una alta resistencia a las temperaturas.
Otro ejemplo es la mejora de la barrera en materiales que históricamente han tenido baja barrera, permitiendo el envasado de productos con un solo material y mejorando el canal de reciclado de ese material tras su uso.
Últimamente las líneas de investigación han ido dirigidas a los envases activos e inteligentes, ¿son soluciones comercialmente viables o se quedan en el campo de la investigación?
En efecto, se están desarrollando varios productos en este sentido, pero la mayoría de ellos todavía no tienen una realidad comercial. Esto es debido a la barrera legislativa que estos productos se están encontrando. En el año 2009 apareció una legislación que permitía y regulaba el comercio de estos envases, aunque dentro de esta legislación es necesario que se desarrolle una lista donde aparecerán todas las sustancias que se podrán utilizar en este tipo de envases. Al ser envases que pueden transferir parte de su estructura para contribuir a la conservación y mejora del producto envasado, deben controlarse con más rigor.
Este aspecto es el que está retrasando la aparición de estos envases, puesto que actualmente la Comisión Europea está evaluando los estudios de toxicidad de las sustancias presentadas.
No obstante, existen dos casos en los cuales se pueden desarrollar productos sin tener que esperar a la aparición del listado de sustancias permitidas para la fabricación de envases activos e inteligentes. Uno es el uso de aditivos que estén listados en las legislaciones alimentarias. En este caso sí se pueden utilizar basándonos en las restricciones marcadas en las legislaciones alimentarias. Otro caso es el uso de componentes activos e inteligentes tras una barrera funcional, que asegure de manera científica que a través de ella no existe riesgo de contaminación del producto alimentario.
La jornada contó con especialistas en legislación de organismos internacionales, en general, ¿qué regulación se rigen los envases actualmente en España?
Actualmente, la legislación existente en España de forma general para los envases es el Reglamento 1935/2004, este reglamento marco establece las generalidades para todos los materiales en contacto con alimentos. Específicamente, existe una legislación que cuelga de ésta y es el Reglamento 10/2011, que regula la seguridad alimentaria en los envases plásticos.
En envases de otros materiales existe un gran vacío legal que se está intentando subsanar por parte de las organizaciones y cuerpos legislativos que para ello se han organizado en diversos grupos de trabajo.
¿Qué diferencia hay con respecto a otros países? ¿Algunos son más restrictivos?
En Europa, la legislación está armonizada para todos los países. Con la presencia de los reglamentos europeos, el cumplimiento en todos los países de la Unión Europea se hace homogéneo. En cambio, en otras zonas es distinto el nivel de requisitos que se exige. Un ejemplo es Estados Unidos, donde existe la FDA (Food and Drugs Asotiation) o Mercosur, donde los requisitos son diferentes a los que marca la reglamentación Europea. En cada caso es bueno analizar el producto y verificar la serie de requisitos para la comercialización en una zona determinada.
Los nanomateriales también han pasado a jugar en primera división, ¿qué papel desempeñan y qué futuro les augura?
Los nanomateriales son una de las tecnologías emergentes que mejor futuro tiene, pero en el campo de seguridad del consumidor tienen que superar una serie de exigencias. Actualmente se está trabajando mucho en este campo, y se han establecido unos grupos de trabajo para determinar un marco legal que asegure el correcto uso y la inocuidad en el consumo de productos que tienen contacto con ellos. En el presente no está permitido el uso para aplicaciones alimentarias, por lo que las empresas que se dedican a su desarrollo están trabajando en buscar un marco regulatorio que permita que sus productos sean una realidad comercial.
La seguridad alimentaria siempre ha existido, pero cada vez más se dedican mayores atenciones, protocolos… ¿qué opina?
En efecto, cada día se dedican más esfuerzos en este sentido. Cada vez más, el envase se considera como un elemento crítico en la seguridad alimentaria del producto final. En el pasado los envases eran considerados como un elemento independiente al producto que se iba a envasar, pero este concepto está cambiando, por dos motores: El primero por el consumidor, que cada día exige una mayor seguridad alimentaria en el producto envasado. El segundo motor han sido diversas alertas alimentarias en las que el precursor presumiblemente ha sido el material de envase. Esto ha provocado que en el presente se desarrollen numerosas legislaciones en este sentido, y cada vez más alineadas a los principios de seguridad alimentaria que se le aplican a los alimentos. En el MeetingPack tendremos oportunidad de conocer los nuevos retos de legislación a los que se enfrenta la industria del envase, así como a los que se tendrán que enfrentar en el futuro, en una visión aportada por los principales actores en la acción de legislar sobre estos productos.
Hablarán de novedades legislativas en el sector del plástico, ¿qué nos puede adelantar?
Sí, en efecto hay novedades legislativas, aunque prefiero que las adelanten los brillantes ponentes que asistirán al evento. Como principales novedades se presentan los borradores de legislaciones aplicables a materiales de envase, que actualmente no disponen de marco legal que cumplir y dificultan el mercado de los mismos. También tendrá especial mención toda la legislación y situación actual de las nanotecnologías en el mundo alimentario, que como sabemos es una gran inquietud en este momento al tratarse de partículas con cierto desconocimiento en sus efectos sobre la salud, frente a su gran potencial en la mejora de los materiales de envasado. Otras novedades resaltables irán en el plano de la sostenibilidad de envase y en la gestión de sus residuos.
¿Hay a día de hoy materiales alternativos que puedan competir con los plásticos en las aplicaciones en las que ahora impera el plástico?
A día de hoy, el plástico es el material más versátil a la hora de seleccionar o diseñar nuevos envases. En un estudio sobre los nuevos lanzamientos de producto se denota un crecimiento en este sentido, situándose con un porcentaje cercano al 40% de elección del plástico en los desarrollos de envases para nuevos productos. Esta cifra nos hace pensar que el plástico está adaptándose a los nuevos requerimientos del mercado y situándose como principal alternativa a otros materiales como el papel, el vidrio y la hojalata, que están perdiendo mercado. Uno de los principales motivos de este crecimiento en la decisión de elegir este material es la mejora en las propiedades barrera de los plásticos, principal hándicap de los plásticos históricamente. En el MeetingPack hay un gran espacio dirigido a conocer las novedades en este sentido, alternativas plásticas a otros materiales, desde el punto de vista de la mejora en la funcionalidad y el aumento de la vida útil de los productos envasados en ellos.
¿Cuáles son las dificultades del plástico reciclado para ganar posiciones en el sector de los envases?
El plástico reciclado es una de las grandes tendencias en el sector del packaging. La regulación a nivel europeo ha facilitado que las empresas hayan comenzado con su uso. A partir de ahora se plantean diversos retos que la industria del reciclado está intentando superar, como es la homogeneidad del material, un aspecto clave para adaptar este tipo de plástico a los procesos de calidad y a las especificaciones de producto final que tienen los envases. Otro reto en el que se está trabajando mucho es en la mejora de los canales de reciclado, que cada día son más eficaces, con el aumento de toneladas que esto supone.
Particularmente en España, se está esperando a la resolución de la Comisión Europea en la autorización de plantas para poder suministrar material reciclado con total seguridad alimentaria, si bien se ha flexibilizado de manera transitoria con la reglamentación nacional este aspecto para el sector de los envases para bebidas.
Por todo ello, se presupone que esta alternativa tiene un futuro muy consolidado dentro de los envases, situándose como una vía clave en la sostenibilidad de nuestro planeta.
¿Se observa una tendencia hacia una mayor utilización de plásticos más técnicos o es un sector que sigue apoyándose principalmente en commodities?
Durante la última década se ha observado un aumento claro en la utilización de plásticos técnicos, e incluso ha aparecido el concepto de un packaging específico para cada producto, que ha contribuido a la aparición de nuevos complejos y nuevas formas de procesado que aumentan el espectro de materiales usados en envase. Aunque en contraposición a este aumento, en los dos últimos años se ha producido un frenazo por dos motivos principalmente: el primero por la difícil situación que está sufriendo la economía, y el segundo por un aumento en la concienciación de sostenibilidad, contraria a la idea de packaging con plásticos técnicos, que en estos momentos no tienen los canales de reciclado muy definidos.
Todas estas cuestiones se recogerán en el MeetingPack, por parte de los principales actores de la cadena, que mostrarán sus experiencias y sus desarrollos en el sector del packaging. La organización conjunta de este encuentro por parte de Aimplas y Ainia se enmarca dentro de la alianza estratégica sellada desde hace dos años entre ambas con el objetivo de ofrecer soluciones globales a industrias del plástico, envase y embalaje, alimentaria y afines. Se trata de una alianza que genera un gran potencial tecnológico y que constituye un referente europeo de primer nivel en envase y embalaje.