Lanxess comienza a operar internamente de manera independiente
En el futuro, Bayer concentrará sus recursos en los innovadores ámbitos de salud, alimentación y materiales de altas prestaciones para expandir así la base de un crecimiento sostenido. “Estoy convencido de que ambas sociedades transitarán con éxito por sus respectivas vías”, declaró el máximo ejecutivo de Bayer, Werner Wenning.
Con una facturación de alrededor de 6.000 millones de euros y cerca de 20.000 empleados, 11.000 de ellos en Alemania, Lanxess se ubicará en el segmento líder de las empresas químicas europeas y, tras la prevista salida a Bolsa, podrá, como empresa independiente con un modelo de negocios propio, actuar de forma más rápida y flexible en el mercado.
El Dr. Axel C. Heitmann, futuro presidente del Consejo de Dirección de Lanxess, manifestó su satisfacción con el rumbo que ha seguido hasta ahora la segregación. En poco más de medio año se han conseguido integrar en Lanxess las actividades provenientes de Bayer Chemicals, Bayer MaterialScience y de las sociedades de servicios, creando un nuevo conglomerado. “Ahora lo importante es sacarle un partido óptimo a nuestros puntos fuertes, para lograr un resultado competitivo y conducir a Lanxess con éxito hacia su independencia del Grupo Bayer”, manifestó. “Para ello sigue siendo importante continuar aprovechando de forma consecuente tanto las posibilidades de ahorro como nuevas posibilidades que nos ofrezca el mercado”.
El pasado
La nueva sociedad, que en un principio nació con el nombre provisional de NewCo, pronto cambió su denominación por el de Lanxess. “El nombre es un híbrido de la palabra francesa 'lancer', es decir, lanzar, y la inglesa 'success', éxito, pues se quiere alcanzar el éxito lo más pronto posible”.
La decisión se tomó después de un exhaustivo proceso creativo y selectivo: 1.000 empleados de la futura compañía propusieron un total de 1.200 nombres, a los que se añadieron otras 2.500 creaciones procedentes de una agencia especializada. Todos los nombres fueron sometidos a un proceso de selección en el que se examinó el cumplimiento de diversos criterios, como que se adecuara a los distintos idiomas, que fuera pronunciable, fácilmente memorizable, atractivo, se distinguiera de otros, así como se consideró su posible significado en los idiomas de todos los países en los que Lanxess desplegará su actividad.
Las propuestas resultantes de esta criba se compararon con la claramente definida filosofía de la compañía y las metas y valores que se persiguen. Lógicamente, según avanzaba el proceso de selección, iban quedando menos candidatos. Tras el examen jurídico final relativo al derecho de marcas y de competencia, de las 3.700 ideas quedaron sólo tres, entre las que el futuro Consejo de Dirección de la empresa se decidió por Lanxess.
Lanxess, con una facturación de 5.600 millones de euros y cerca de 20.000 empleados, formará parte del grupo de cabeza de las empresas químicas europeas: en más de dos tercios de los segmentos ya ocupa posiciones de liderazgo en el ámbito internacional, siendo los líderes absolutos en tecnología de producción. “Con la autonomía podemos darle a Lanxess fuertes impulsos empresariales para reforzar la competitividad también en este ámbito y hacer posibles un crecimiento superior a la media y un aumento del valor”, comentó Werner Wenning.
El presente y el futuro
Con alrededor de 5.000 productos, Lanxess dispondrá de un amplio surtido de productos químicos básicos, especiales y de química fina, así como polímeros, entre ellos, productos para la fabricación de principios activos en las industrias farmacéutica y fitosanitaria, productos para la protección de materiales, productos químicos para las industrias del cuero, textil y papelera, intercambiadores de iones para el tratamiento de agua, pigmentos inorgánicos para el coloreado de piezas de hormigón y de plástico, aditivos para plásticos y agentes ignífugos y plastificantes, caucho sólido y productos químicos para el caucho para la industria fabricante de neumáticos, así como estirénicos (ABS) y termoplásticos semicristalinos que se emplean fundamentalmente en la fabricación de automóviles, siendo también adecuados parar la producción de tapas y carcasas. Lanxess estará representada a nivel mundial y tendrá plantas de producción y organizaciones de distribución en 40 sociedades en 20 países.
El futuro Consejo de Dirección de la compañía estará integrado por el Dr. Ulrich Koemm, Bruce Olson, el Dr. Martin Wienkenhöver y Matthias Zachert, además de Heitmann.