Ecodes, Fundación Renovables, Ecologistas en Acción y Mighty Earth consideran un error la ausencia de objetivos en el PNIEC
Diferentes organizaciones reclaman un plan nacional de reducción de emisiones de metano
Las organizaciones Ecodes, Ecologistas en Acción, Fundación Renovables y Mighty Earth consideran un grave error que el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) 2023-2030 no haya incluido objetivos ni medidas específicas de disminución de las emisiones de gas metano. Estas entidades piden al Gobierno la elaboración urgente de un plan nacional para disminuir en 2030 esas emisiones en todos los sectores entre un 40% y un 45% con respecto a los niveles de 2020, en consonancia con los requerimientos del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC).
Tal y como explican estas organizaciones, el metano es un gas de efecto invernadero 87 veces más potente que el CO2 en un ciclo de veinte años y representa ya casi una quinta parte de este las emisiones GEI mundiales. Por ello, la reducción de sus emisiones desempeña un papel fundamental en las medidas de mitigación del cambio climático de aquí a 2030, 2040 y 2050.
España es uno de los países firmantes del Compromiso Global sobre el Metano (Global Methane Pledge), lanzado en la COP26. Al adherirse al Compromiso, España aceptó tomar medidas para contribuir a un esfuerzo colectivo para reducir las emisiones mundiales de metano en al menos un 30% con respecto a los niveles de 2020 para 2030. Sin embargo, ese compromiso no se ha visto reflejado en el PNIEC, pese a las advertencias incluidas en las alegaciones presentadas, se lamentan las cuatro entidades mencionadas.
Las emisiones de metano en España
El Informe de Inventario Nacional de Gases de Efecto Invernadero. Edición 2023 (1990-2021) del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico situó al metano como el segundo mayor emisor de GEI, con un 14,4% del total, por detrás del CO2 (79,7%) y por delante del óxido nitroso (4,1%) y los gases fluorados (1,8%).
En España, la agricultura es responsable de un 62,7% de las emisiones de metano (sobre todo por la fermentación entérica del ganado, con un 41,5%, y la gestión de estiércoles, con un 20,1%). Le sigue el sector de los residuos, con un 31,1% (el depósito de residuos sólidos en vertedero supone un 25% del total de emisiones de metano). Además, investigaciones realizadas por Ecologistas en Acción han denunciado la presencia de fugas en el sistema gasista español, 29 de ellas se han detectado en instalaciones de gestión de residuos. "A pesar de todo esto, el PNIEC no propone medidas suficientes para reducir las emisiones de metano", señalan estas entidades ecologistas.
Dentro de este plan, el Estado español debe poner en marcha un sistema de recogida de datos cuantitativos y cualitativos precisos sobre las emisiones de metano asociadas a los combustibles fósiles importados. En este sentido, es fundamental incidir en la necesidad de calidad, transparencia y accesibilidad pública de los datos recogidos para garantizar información de referencia sólida y fiable sobre las emisiones existentes.
Desde 2022, según los registros vía satélite y una reciente investigación, se han contabilizado un total de 1.194 fugas del sector de los combustibles fósiles de países de los que España importa recursos energéticos (donde destacan Argelia y EE. UU.), principalmente gas fósil.
"España necesita urgentemente establecer un plan de reducción del metano con objetivos claros que estén en consonancia con lo que reclama la ciencia para hacer frente a la emergencia climática", concluyen las cuatro organizaciones.