Un año de logros, reconocimientos, refuerzo de capacidades y proyección internacional en Navantia Seanergies
Con varios proyectos en marcha, Navantia Seanergies ha añadido en 2023, tres nuevos contratos a su cartera, todos ellos de Monopiles, en UTE con Windar Renovables, proyectos para parques eólicos marinos europeos, para clientes como Iberdrola y Orsted, que renuevan su confianza en la división de energías verdes de Navantia. Además de estos contratos, Navantia Seanergies ha firmado un acuerdo de colaboración estratégica con Ocean Winds para reserva de capacidad hasta 2032, que se suma al de Iberdrola, preparándose así al incremento previsto de la demanda para los próximos años.
En el capítulo de inversiones, este último año se han acometido obras de puesta a punto de las instalaciones de Fene y Puerto Real para adecuarlas al desarrollo inminente de la eólica flotante. En Puerto Real la instalación de una nueva línea de paneles planos incrementará la capacidad de fabricación de bloques para la industria flotante. Esta capacidad se verá reforzada en un futuro con un nuevo taller robotizado, también de bloque planos. Por otra parte, en Fene se está realizando una actuación que multiplicará por tres la capacidad de ensamblado bajo pórtico, así como un incremento sustancial de la superficie para almacenamiento de producto terminado, esencial en esta industria.
Toda esta actividad entorno a la eólica marina ha supuesto la reactivación de la economía y el empleo motivo por el cual Iberdrola otorgaba hace unos días a la UTE Navantia-Windar el premio a la recuperación económica y generación de empleo.
Este premio deja patente que la eólica marina es una oportunidad real. Esta fue precisamente una de las ideas fuerza del Industry Day organizado en febrero y para el que se convocó a las empresas y a la industria. Se trataba de mostrar las oportunidades entorno a la industria de la eólica marina, en expansión en Europa y en todo el mundo y abrir el diálogo para ayudar a determinar qué inversiones sería necesario acometer para que esas empresas pudieran formar parte de la cadena de valor de la energía eólica marina. Se registraron 200 empresas, muchas de ellas nuevas en el sector, que actualmente están preparándose para para participar en los proyectos de la empresa en el medio plazo.
En el campo del hidrógeno este ha sido el año en que se han superado las pruebas de aceptación de la tecnología de propulsión basada en pilas de combustible. Además, se ha producido el lanzamiento de la línea de innovación de marinización de electrolizadores para hibridación con eólica offshore, un proyecto prometedor. Esta línea se ha visto reforzada por nuevas asociaciones como H2 Site y Ajusa.
En cuanto a la producción de electrolizadores, este año se ha conseguido la homologación con distintos tecnólogos, por lo que la fábrica de turbinas de Ferrol está preparada para empezar a producirlos.
Un gran año por lo tanto que presagia un futuro lleno de oportunidades nacionales e internacionales, de cimentaciones fijas, pero también flotantes y de la apuesta por una nueva línea de negocio dedicada al mantenimiento inteligente de parques eólicos. En el hidrógeno el futuro pasa por la hibridación con la energía eólica y por la fabricación de electrolizadores para satisfacer las necesidades de producción de hidrógeno dentro y fuera de España.