España ante el desafío de desarrollar su potencial en energía eólica marina
Andrés Schuschny, Ph.D., profesor del Máster Universitario en Energías Renovables y profesor de la Universidad Internacional de Valencia - VIU
27/05/2024Con todo, el emplazamiento y mantenimiento de los parques eólicos marinos supone un notable desafío ingenieril debido a la complejidad evidente que surgen en el momento de la construcción y mantenimiento de los mismos, lo que implica mayores costos de inversión y operativos. Se suele argumentar que los costos se ven compensados por alcanzarse una capacidad de generación superior en el mediano y largo plazo respecto de la opción terrestre. Muchas empresas petroleras, contando con experiencia en la construcción de plataformas petroleras offshore, se han embarcado en la oportunidad de aprovechar dicha experiencia para entrar en este mercado incipiente y tal vez, de a poco pivotar a un modelo de negocio más sostenible.
Actualmente, hay muchos países, empresas y grupos de investigación que se encuentran desarrollando actividades de investigación y desarrollo en el ámbito de la energía eólica marina. España, por sus antecedentes no es ajeno a este tipo de esfuerzo. El papel fundamental que desempeña España como polo de desarrollo de la energía eólica terrestre a nivel mundial lo sitúa en una posición privilegiada de cara al desarrollo de la eólica marina. En efecto, España es el segundo país europeo y el quinto país del mundo en capacidad eólica instalada, y forma parte de los tres países europeos con mayores capacidades industriales eólicas e inversión en I+D+i en el sector. Además, el país posee una industria de construcción naval, un sector portuario bien desarrollado, altas capacidades de ingeniería civil y siderúrgica, y un ecosistema industrial de materiales y equipamientos que estaría habilitado a brindar servicios al desarrollo de la generación renovable marina.
El avance de las energías renovables y su aprovechamiento en el entorno marítimo deberá ajustarse a la planificación y gestión integral de los espacios marinos. El emplazamiento de parques eólicos marinos, no está exento de que se generen conflictos intersectoriales potenciales, como podría ser con el sector de la pesca que suele argumentar que el ruido generado por los aerogeneradores puede afectar sus capturas. Por eso es necesario conciliar la armonización de los diferentes usos del lecho marino y respetar los objetivos y compromisos en materia de conservación de la biodiversidad marina. Por tal motivo, resulta relevante entablar una estrecha colaboración y coordinación entre los actores y grupos de interés, particularmente con las áreas relevantes de la Administración Pública para garantizar la preservación y mantenimiento adecuado de este territorio, así como regular su uso de manera organizada y prudente.
En tal sentido, durante el 2023, se aprobaron los así llamados: Planes de Ordenación del Espacio Marítimo, a partir de los cuales se determinó dónde se podrán emplazar instalaciones. Esto supuso un avance relevante para promover el desarrollo de la energía eólica marina en España. Estos planes, seguirán vigentes hasta el 2027 y buscan organizar los usos del espacio marítimo existente a partir de la identificación de 19 zonas de alto potencial para la energía eólica marina que comprenden 5.000 kilómetros cuadrados (el 0,46% del espacio marítimo español).
Ante la urgencia por abordar de manera consistente con el fenómeno del cambio climático y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, sería deseable que España avance en el desarrollo de proyectos de energía eólica marina. Este impulso no solo contribuirá a la mitigación del cambio climático, sino que también amplificará el posicionamiento de España como un líder en innovación y el desarrollo tecnológico vinculado al campo de las energías renovables.