El sector termosolar en España. La tecnología de mayor crecimiento
En 2012 se suspendieron las primas a las nuevas instalaciones renovables. Sin embargo, las piedras en el camino no han impedido que represente un 30% de la producción del mix energético y sea la termosolar la tecnología renovable con mayor crecimiento.
Por José Henríquez
Según el informe de Red Eléctrica de España (REE), en 2012 la producción eléctrica aumentó respecto a 2011 en la mayor parte de las tecnologías empleadas, siendo significativo el aumento de la solar termoeléctrica, con un 84,4%. Respecto de la cobertura de la demanda, su contribución fue similar a la del año anterior, representando el conjunto de las renovables el 32%, un punto menos que en 2011. Y es que a pesar de las dificultades que se ha encontrado el mercado, derivadas de la suspensión de primas o la propia caída del consumo por la coyuntura, el potencial de la tecnología termosolar, tanto en el ámbito de la producción eléctrica como de la térmica (calefacción y agua caliente sanitaria), la posiciona como una de las alternativas de futuro más sólidas. Su evolución tecnológica todavía está por detrás de la eólica, pero la tecnología termosolar ha experimentado la mayor evolución en los últimos 15 años, posicionándola cerca de la paridad y convirtiendo a España en líder por plantas de concentración. Por volumen y repercusión económica, las plantas CSP suelen centrar toda la atención, pero en el ámbito industrial es una tecnología que ha tenido en el último año gran repercusión. La multitud de aplicaciones en procesos industriales de diversa índole convierten esta tecnología en un aliado en pro de la reducción de costes, algo que ha fomentado su expansión en el último año, especialmente en regiones como Andalucía y Extremadura.
En la edificación, y más concretamente en el ámbito doméstico, la situación se podría calificar aún de residual, si bien el potencial es enorme. El uso para calefacción o sistemas de climatización, así como el consumo de agua caliente sanitaria tendrán su gran oportunidad cuando se desarrollen normativas adecuadas en pro de la eficiencia energética. Hasta la fecha es cada vez más habitual encontrar estos sistemas en viviendas unifamiliares, sobre todo en el ámbito rural, pero sigue siendo algo anecdótico respecto al volumen de edificaciones totales. Las últimas modificaciones normativas del Gobierno español podrían ayudar a potenciar su expansión, lo que deja patente que este tipo de inversiones, demasiado grandes aún hoy, dependen del apoyo de los poderes públicos.
Panorama en 2012
Según los datos facilitados por la Comisión Nacional de la Energía, en 2012 España contaba con 41 instalaciones en sus registros y la electricidad de esas plantas alcanzó los 3.433 GWh, lo que representa un 84,4% más que en el mismo período del año anterior, permitiendo cubrir el 1,36% de la demanda total de electricidad. El informe de REE revela que el mes de mayor producción fue julio, donde se generaron 524 GWh, cubriendo el 2,41% de la demanda de dicho mes.
Respecto a la potencia instalada, esta fue de 1.953,9 MW, lo que representa un incremento del 80% sobre el año anterior. Esta potencia se reparte entre Andalucía con 950 MW, Extremadura con 600 MW, Castilla La Mancha con 350 MW, Murcia con 31,4 MW y Cataluña con 22,5 MW. En total, las energías renovables sumaron 39.000 MW de potencia instalada, lo que supone un incremento del 6% respecto a 2011, y representa el 29% del mix total energético. De esto sólo el 2% corresponde a la solar termoeléctrica, muy por detrás del 22% de la eólica, y la mitad de la fotovoltaica (4%).
Por instalaciones, la CNE contabilizó a noviembre de 2012 62.665 instalaciones renovables, un 4,3% más que a finales de 2011, contabilizando las nuevas plantas termosolares, fotovoltaicas y eólicas que se pudieron conectar en 2012 por estar prerregistradas antes de entrar en vigor la moratoria de enero de 2012. De estas, las termosolares representaron una potencia total de 1.600 MW. La fotovoltaica incorporó 288 MW en los once primeros meses del año, y suma 4.392 MW, mientras que la eólica cuenta ya con 22.280 MW, frente a 20.655 MW a finales del ejercicio anterior.
Respecto a las primas, en el último informe de liquidación de la CNE establece que las termosolares recibieron 849 millones de euros, el 11,18% de todo el régimen especial, muy por detrás de la fotovoltaica con 2.592 millones y la eólica con 1.799 millones. También por detrás de los 1.700 millones de la cogeneración, situada en dicho régimen.
Situación europea
Según los datos de la European Solar Thermal Industry Federation (ESTIF), el mercado de la energía solar térmica ha sufrido una fuerte caída desde el 2009. En 2011 se había invertido la tendencia, desarrollando nuevos segmentos de mercado y mejorando la competitividad de sus precios, si bien el último análisis del Eurobserv'ER, correspondiente a 2012, afirma que no se ha recuperado el mercado completamente.
2011 es definido por la ESTIF como "un año de mensajes contradictorios", pues el mercado europeo estaba plano en general, mientras los mercados locales presentaban condiciones muy diversas. Con 2,6 GW termales instalados ese año, la capacidad total instalada en Europa amentó a 26,3 GW termales, generando una estimación de energía solar térmica de 18,8 TWh, al tiempo que contribuía a evitar 13 millones de toneladas métricas de CO2. Con estos datos la industria empleaba a 32.00 personas y representaba una facturación de 2.600 millones de euros. Pero el Eurobserv'ER aporta cifras más elevadas, incluyendo el sector CSP, cifrándose el empleo en 48.000 personas y la facturación en 3.800 millones. Para España, este mercado lo cifra con un impacto de 435 millones de euros y 8.100 empleos, aunque aclara que los recortes presupuestarios, la moratorio sobre los proyectos de renovables y la crisis en el sector de la construcción estancó el sector solar térmico, asumiendo el estancamiento de los empleos en 8.070 personas y la caída de la facturación desde los 680 millones de euros a los 600 millones. Aunque las cifras pueden variar, y de hecho varían, según las fuentes utilizadas, lo cierto es que todas apuntan a una misma dirección: estancamiento.
Y es que según la ESTIF, los mercados del sur de Europa no pasan por su mejor momento. Empezando por España, seguida de Italia y Portugal. Curiosa situación, a pesar de disfrutar de los mejores mapas solares que los vecinos del norte, nos resentimos. El denominador común, como apunta el Eurobserv'ER, es la coyuntura económica, que juega un papel fundamental para desechar políticas de impulso de las renovables en general, a pesar de que los sectores más críticos y no pocos expertos apuntan hacia las renovables como una forma de potenciar la salida de la crisis.
Puede leer el reportaje completo en la revista Tecnoenergía nº 113 del mes de abril.