FoodTech: Pabellón 5, stand E501

En procesos como el procesado de alimentos se utilizan bombas para todo tipo de tareas de bombeo. A menudo los equipos se accionan con bombas centrífugas o excéntricas, pero las bombas helicoidales ofrecen ventajas adicionales. Las nuevas bombas Hyghspin de Jung ofrecen una gran resistencia al desgaste al bombear productos abrasivos.

Las bombas helicoidales Hyghspin de Jung (distribuida en España por Técnica de Fluidos) se basan en los fundamentos de diseño higiénico. Los modelos Hyghspin se fabrican en acero inoxidable. No obstante, todas las piezas que entran en contacto con los productos y el cárter, se encuentran fabricadas a partir de un bloque macizo de acero inoxidable y mecanizado en equipos CNC de última generación tecnológica, de esta manera se elimina el riesgo que existe al utilizar piezas de fundición y de que se produzcan imperfecciones en las bombas, como grietas o porosidades. Las superficies son electro pulidas y presentan normalmente una rugosidad de menos de 0,8 µm. Para los requisitos especiales, existen variantes con un valor de rugosidad de menos de 0,4 µm.

Bombas Hyghspin.

Para los productos extremadamente abrasivos, Jung y Técnica de Fluidos cuentan con soluciones personalizadas de gran calidad y eficiencia. Por lo tanto, resulta tan importante la selección de los parámetros de funcionamiento como la ejecución técnica. En las piezas que entran en contacto con el producto se aumenta considerablemente la resistencia al desgaste mediante el proceso de endurecido por difusión. Lo que mejora además la seguridad operativa, pues se evita una soldadura en frío, también llamada corrosión.

Técnica de Fluidos, que lleva trabajando con este tipo de aplicaciones desde hace más de 40 años, distribuye Jung desde 2009. La gama ofrecida por Jung cuenta con una gama de alta calidad que es adecuada para un gran abanico de aplicaciones debido a su versatilidad, alta flexibilidad en cuanto a viscosidad y flujo volumétrico, así como su capacidad para bombear hasta productos que contengan hasta un 60% de aire.

Se trata de unas bombas de desplazamiento positivo que ahorra tiempo y dinero gracias a su dualidad, permite realizar tanto el proceso productivo como la limpieza CIP o SIP (sin necesidad de otra bomba ni bypass), además de poder utilizar la misma bomba con diferentes productos y con distintas viscosidades hacen que su versatilidad sea un punto más a tener en cuenta.