EcoConstruir, la feria alternativa que expone soluciones para una construcción sostenible y saludable
Materiales naturales como la madera y los sistemas constructivos más respetuosos con el medio ambiente y con la salud fueron los grandes protagonistas en la 2ª edición de EcoConstruir, que se celebró los días 31 de mayo y 1 de junio en un marco incomparable junto al mar y que se dividió en distintos espacios, para dar respuestas a las distintas áreas del conocimiento de un sector que se encuentra en plena transición, hacia nuevas metodologías y desarrollo de materiales menos nocivos.
Con más de 1.500 personas registradas, el evento contó una zona expositiva, que reunió a cerca de 70 expositores que mostraron sus innovaciones soluciones y disruptivos sistemas para la construcción y la rehabilitación. Celulosa y lana de roca para los paneles de aislamiento térmico; sistemas de recuperación de las aguas grises, para reducir el consumo de agua; textiles del hogar a partir de tejidos orgánicos, que reducen entre otras patologías, las alergias; luminarias a partir de materiales reciclados; o muebles del hogar, en especial en la zona del dormitorio, para garantizar un descanso reparador, fueron algunos de los productos, donde, como no podía ser de otra manera, la naturaleza es uno de los pilares de esta nueva concienciación social y decorativa.
Pero además de la zona expositiva se dispuso de un área donde generar networking y oportunidades de negocio, sin olvidar los talleres y las actividades profesionales; así como el espacio congresual, que ofreció un amplio programa de sesiones magistrales acerca de los nuevos sistemas constructivos, más eficientes, rápidos y sostenibles, fomentados por la industrialización en la construcción. Pero también se analizó la arquitectura saludable que pone al ser humano en el eje de la construcción o la bioconstrucción, como metodología que sitúa al mismo nivel las viviendas con la medicina.
Carmen Ruiz, presidenta de la Sociedad Catalana de Salud Ambiental (ACMCB) expuso durante su intervención los riesgos.
Precisamente, con un cartel de cerca de 60 ponentes, EcoConstruir buscó generar conciencia y compartir conocimiento para construir un futuro más sostenible. En este sentido, Carmen Ruiz, presidenta de la Sociedad Catalana de Salud Ambiental (ACMCB) mostró las múltiples afectaciones que materiales y tóxicos vinculados al mundo de la construcción que inciden directamente en la salud.
“Debería existir un trabajo complementario entre arquitectura, construcción y medicina. En los últimos años, han aumentado las enfermedades crónicas no transmisibles como el cáncer y las vasculares porque existe una sociedad más envejecida, pero el problema radica en que población más joven está sufriendo estas enfermedades”, reconocía.
Si bien es cierto que nuestro ADN predefine cómo va ser nuestra vida, existen factores externos que pueden alterar nuestro exposoma (la exposición de nuestro organismo). Por suerte, este exposoma puede ser modificable y se puede prevenir.
“En medicina ambiental todo lo que bebemos, respiramos, comemos… puede tener carga tóxica, pero también es importante a nivel psicosocial porque nuestros pensamientos también nos contaminan. A lo largo de todos estos años nos hemos ido adaptando a los entornos naturales provocados por hongos, el clima, la radiación, el polen… pero desde la revolución industrial hemos ido incorporando sustancias químicas incompatibles con la vida y muchas de ellas son resistentes a nuestro organismo”.
Por ello, Carmen Ruiz recomienda cambiar rutinas, transformar nuestros hogares en entornos más confortables, apostar por la ventilación de las estancias como signo de salud e ir reduciendo, en la medida de lo posible, todos aquellos materiales que pueden afectarnos a nuestra salud.
Una de estas apuestas que se ha impulsado desde el sector de la construcción es la industrialización, que apuesta por una nueva metodología que no solo desarrolla sistemas y soluciones más sostenibles, sino que también contribuye a mejorar las condiciones laborales de los trabajadores de la obra. Una ponencia que contó con la participación de Ángel Alfocea (WES Wood Engineering Systems), Ignasi Caus (Tall Fusta) y Marc Obradó (Exe Arquitectura) que expusieron las ventajas de la construcción moderna focalizado en el uso de la madera estructural, como gran aliado del sector.
“Desde la fase de diseño se pueden analizar posibles errores y corregirlos antes de su ejecución. Esto ya es de por sí una ventaja, además de plazos de entrega más rápidos en un entorno colaborativo, que nos permite detectar posibles errores y problemas antes de su ejecución”, reconocía Ángel Alfocea.
Y en este escenario la madera se ha erigido como el material estrella por su facilidad de industrialización. En este sentido, Ignasi Caus recordaba que “el problema de la mano de obra y la formación favorecen al mundo de la industrialización”. Y añadía que “ahora las casas de madera empiezan a gustar, pese a que hace tiempo que venimos construyendo en madera, pero ya sea por la sostenibilidad o por la rapidez de obra, es un material que nos permite construir sin destruir el planeta”.
No obstante, la industria adopta una actitud conservadora y pese a que en estudios como Exe Arquitectura llevan más de 15 años trabajando en entornos colaborativos e industrializados “a la industria le falta madurara, pero ya se está empezando a demandar este tipo de construcciones e incluso hay fondos de inversión en industrialización que vana a reactivar este mercado”, apostaba el arquitecto Marc Obradó.
Una doble jornada de aprendizaje y descubrimiento que, en esta segunda edición de EcoConstruir consolidan un modelo ferial transversal, dando buena muestra del desarrollo tecnológico existente en nuestro país.
Galería de imágenes de la jornada profesional en EcoConstruir, un showroom y centro de investigación tecnológica en el campo de la bioconstrucción en EcoHub.