Los polímeros especiales Laticonther abren nuevas expectativas para la tecnología LED
La calidad de la luz emitida, monocromática y sin componentes invisibles o dañinos, hace que la tecnología LED sea aplicable a cualquier sector, desde iluminación doméstica hasta señalización pública, desde el automóvil hasta equipamiento deportivo.
El futuro de los LED en ingeniería de la iluminación está garantizado con la introducción de nuevos LED que ofrecen mayor intensidad de emisión, aunque también es cierto que requieren mayor intensidad de corriente.
El rendimiento de los LED es sobresaliente, pero aun así se produce un calentamiento que debe extraerse para mantener la temperatura de trabajo por debajo del umbral de funcionamiento del diodo. Por esta razón, los LED se montan directamente sobre disipadores de calor cuya función es la de mantener controlados los parámetros de trabajo. Los disipadores deben enfriar los LED mediante la convección natural mediante el flujo de aire a través de sus aletas.
Hasta hoy se utilizaban piezas de metal radiante, típicamente fabricados por extrusión o mecanización de cobre o aluminio que, como se sabe, suponen unos costes directos e indirectos que pueden afectar el precio global. Lati, especialista europeo en el sector de compuestos poliméricos especiales, ha creado una línea de productos termoplásticos que ofrecen una mayor conductividad térmica y son capaces de transferir calor con mucha mejor eficacia que los plásticos tradicionales. Gracias a las cargas conductoras térmicas y aislantes eléctricas los productos Laticonther ofrecen una conductividad de
2 W/m ºK, valor inferior al de los metales, pero 10 veces mayor que el de los plásticos tradicionales. Las simulaciones y la experiencia demuestran cómo los polímeros conductores térmicos pueden garantizar unas condiciones de trabajo adecuadas para los LED, manteniendo la temperatura cercana a los valores que se consiguen con disipadores metales y sin necesidad de ventilación. En intercambios de calor por convección natural la alta conductividad de los metales es a menudo redundante y los compuestos conductores pueden representar una solución adelantada e innovadora para abaratar los costes de producción.
Sustituir disipadores metálicos por polímeros constituye una buena oportunidad para ahorrar en costes de material y obtener las ventajas de una fabricación, montaje y acabado fácil, limpio y seguro.