"Nervios, muchos nervios", la opinión de Toni Amat
Artículo publicado en el número 76 de Tradebike.
Opinión: "Nervios, muchos nervios"
Empezamos a tener las primeras cifras del 2022, y como ya todos sabíamos… no pintan bien. Ha habido una caída muy importante de ventas de bicicletas. El motivo principal: los dos años pandemia y post-pandemia se produjo un incremento de ventas como no habíamos visto nunca en la historia del Bike en España, y el resumen es que en estos dos años se vendieron las bicis que a un ritmo normal se hubieran vendido en 5 o 6 años. Todo ello, evidentemente, lo que ha generado es que el mercado necesita digerir toda esta situación.
En 2022 en el ciclismo la competencia ya no fue entre las marcas, para vender más, la competencia fue contra las vacaciones y el ocio en general (viajes, hoteles, restaurantes, discotecas...), todo ello en un verano especialmente caluroso que tampoco animó a pedalear mucho.
El tránsito en las tiendas bajó mucho, y básicamente solo para reparación. Las bicis más perjudicadas en ventas evidentemente fueron las que más se habían vendido y buscado durante los dos años anteriores, sobre todo MTB de primer precio (hasta 1000 euros). Ahora las tiendas están llenas de ellas, pues en muchas ocasiones las tiendas no fueron realistas y programaron cantidades increíbles pensando que la fiesta duraría siempre. Además, “como solo me servirán la mitad”, y no solo esto sino que además programaron a varias marcas, con el ánimo de tener stock cuanto antes. Pues bien, llegó el 2022, las marcas empezaron a tener stock y a servir programaciones. En ocasiones 2022 y 2023 juntas, principalmente era lo que más se había programado, y las tiendas la primera mitad del 2022 que todavía estaban vacías empezaron a llenarse. Pero la demanda se había parado. En Junio empezó el miedo, con las tiendas ya llenas y sin movimiento en el mercado. Empezaron las cancelaciones y los primeros impagados.
"...nervios y operaciones a la desesperada, descuentos de hasta un 40%, envíos de bicis a la zona que sea y presión… mucha presión."
El mercado de segunda mano empezó a crecer de forma desmesurada, con bicicletas seminuevas y al precio de “lo que me den, pues ya no la utilizo”. Todo ellos evidentemente en detrimento de la venta de bicicletas nuevas.
Por otro lado, la venta de bicis de gama alta y de E-bikes, una venta que suele ser mucho más estable, tampoco se ha podido cubrir. Han seguido faltando componentes y motores, especialmente de la gama más alta.
Toda esta situación nos lleva al momento actual, en que las tiendas están repletas de stock, sobre todo de primer precio y las marcas también. Y con ello, los nervios y las operaciones a la desesperada, descuentos de hasta un 40%, envíos de bicis a la zona que sea y presión… mucha presión. Es algo que no beneficia al mercado.
Enero pareció que empezaba a haber algo de movimiento, después de unas Navidades demasiado tranquilas, pero febrero ha sido un mes malo, muy malo. Marzo parece que empezó un poco mejor y la esperanza es que ya con la primavera el patio se empiece a animar.
Pero seamos realistas, las ventas del 2020 y 2021 fueron algo realmente extraordinario, algo histórico, que posiblemente no volveremos a ver. Un hecho que debería de haber servido para sanear los negocios, mejorarlos y enfocar el futuro con coherencia y profesionalidad.
Nuestras previsiones apuntan a que 2023 todavía será un año de “sufrimiento”, donde poco a poco irá cogiendo inercia, por donde algunos pagarán los excesos de optimismo pasado, un año al que hay que sobrevivir, pero intentando no perder el negocio en todo ello. Las perspectivas apuntan a que a mediados del 2024 la situación se irá normalizando, pero hay que llegar allí y hacerlo sin “hacerse daño”, intentando aplicar coherencia y profesionalidad, sin “reventarlo todo”.
Foto portada: David Cachón.