Raventós Codorníu estrena su nueva flota logística de la mano de Jungheinrich
Raventós Codorníu, renovó su flota logística con carretillas eléctricas Jungheinrich equipadas con tecnología de iones de litio, lo que supone una reducción de las emisiones de CO² en un 21%. Con este paso, Raventós Codorníu refuerza su compromiso con la sostenibilidad e innovación en la industria vitivinícola.

Con más de 470 años de historia en la elaboración de vinos y cavas, el Grupo Raventós Codorníu sigue liderando el sector vitivinícola apostando por la innovación y la sostenibilidad. En su compromiso con la reducción del impacto medioambiental y la eficiencia operativa, la compañía ha renovado su flota logística con carretillas Jungheinrich equipadas con tecnología de iones de litio.
“El desarrollo sostenible es uno de los factores clave del éxito de nuestro modelo de negocio. Creemos en un sistema empresarial que genere valor más allá del propio beneficio y reduzca el impacto al máximo. Compartimos con Jungheinrich este compromiso, que ahora se materializa con la flota de carretillas más sostenibles de nuestra historia”, señala Maria Vidal, directora de Comunicación y Sostenibilidad de Raventós Codorníu.
Retos y soluciones logísticas
“Necesitábamos homogeneizar los modelos de carretillas y sus prestaciones para poder intercambiar equipos entre las distintas bodegas, sin tener que reforzarnos con carretillas de alquiler a corto plazo. También queríamos apostar por una tecnología más innovadora y sostenible que el plomo ácido”, explica Valentín González, Projects & Continuous Improvement Manager de la compañía.
Eficiencia, ahorro y compromiso medioambiental
Gracias a esta transformación, Raventós Codorníu ha logrado mejorar la gestión de su flota, reducir costes operativos y reforzar la seguridad en sus operaciones mediante el sistema Fleet Management System, que controla el acceso y el uso de las carretillas.
“Con la ayuda de Jungheinrich hemos podido generar eficiencias y ahorros en nuestra intralogística. Y lo hemos hecho aplicando una tecnología más innovadora, más segura y mucho más respetuosa con el medio ambiente”, concluye Astrid Saguar, responsable de Compras de Raventós Codorníu.
Esta iniciativa refuerza el compromiso de la bodega más antigua de España con la sostenibilidad, asegurando que su legado vitivinícola siga respetando la tierra y el entorno que la rodea, con el respaldo de soluciones logísticas de vanguardia.