Desplome de la oferta en Torrelavega por las fiestas con mejoría para el abasto
La festividad de Semana Santa hizo desplomarse la actividad en la primera feria de abril, celebrada en el Mercado de Ganados de Torrelavega que, con sólo 851 reses puestas a la venta, no logró satisfacer las necesidades de los compradores. El ganado de recría mantuvo la agilidad, buenas formas y precios de la semana pasada pese a una menor presencia de compradores, mientras que el vacuno de abasto salió beneficiado por la demanda de dos comercializadores habituales. Por su parte, el sector lácteo también mejoró los precios.
El sector del vacuno destinado a carne presentó una oferta de buena calidad, lo que favoreció una comercialización ágil, sin apenas trabas y con precios en aumento, que fue adquirida por los dos compradores que vienen dándose cita en los últimos tiempos.
En el vacuno de recría, el desarrollo no difirió en exceso de feria pasada, con ventas al completo de todos los terneros. En el tipo de recría cruzado se mantuvo la rapidez y facilidad en los tratos, compensándose la menor demanda con una oferta más reducida. Se vendieron de forma rápida tanto los machos como las hembras, sin apenas esfuerzo a la hora de cerrar los tratos y en precios repetitivos.
En el tipo frisón o pinto, la habitual escasa oferta no permitió cambios, y un par de compradores se hicieron con todos los ejemplares presentes en precios repetitivos y con algo de esfuerzo a la hora de cerrar los tratos, más por su escasa calidad que por cambios en el comportamiento.
Dentro del vacuno de producción de leche, la escasez de vacas unida a la buena calidad de muchas de ellas supuso ventas muy rápidas, al completo y cierta mejoría en los precios, haciendo que varios compradores no hayan podido realizar compra alguna. De entre toda la oferta presentada esta semana sobresalió una vaca de segundo parto procedente de Solares (Medio Cudeyo), que fue adquirida por un ganadero de Solórzano en la cantidad de 2.700 euros.
También en los corros llamó la atención de un toro de la raza Blonde de Aquitania de cinco años, adquirido por un ganadero de Suesa (Ribamontán al Mar), en la cantidad de 2.750 euros.