Cantabria confirma tres casos de lengua azul detectados en ganaderías de la comarca de Solares

El laboratorio de Algete (Madrid) acaba de confirmar los tres casos de lengua azul detectados el viernes de la semana pasada en otras tantas ganaderías de la comarca ganadera de Solares. Cantabria, por lo tanto, tal y como ha informado el consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Alimentación, Pablo Palencia, ya ha comunicado al Servicio de Alertas Sanitarias los resultados de las pruebas.

Palencia ha dicho que “Desgraciadamente, esta circunstancia confirma, por tanto, que Cantabria, al igual que Asturias y Galicia, así como otras partes de España, es zona restringida, una medida carácter temporal hasta que se declare el periodo libre del mosquito, lo que previsiblemente sucederá en unas semanas con la llegada del frío”.

Tras la confirmación de los tres casos, el Gobierno de Cantabria, ha subrayado Palencia, comenzará a aplicar el protocolo de actuación frente a esa enfermedad, adoptará de inmediato medidas de prevención, vigilancia y control, e iniciará una campaña masiva de vacunación frente a los serotipos 4 y 8, que será obligatoria para todos los bovinos y ovinos mayores de tres meses. Para las ovejas bastará con una dosis, mientras que para las vacas serán necesarias dos dosis con el doble de cantidad.

De hecho, desde la Consejería ya han contactado con los laboratorios para adquirir la vacuna y proceder a la vacunación masiva, “que probablemente comenzará en el mes de diciembre y continuará hasta la primavera, a lo largo de los meses de enero, febrero y marzo del año que viene”, ha destacado el consejero.

Durante su comparecencia ante los medios de comunicación, el consejero ha explicado que esta enfermedad tiene una fuerte restricción normativa en España. Aun así, la semana pasada, tanto el ministerio como las comunidades autónomas alcanzaron un acuerdo de cierta flexibilidad en la restricción de movimientos, puesto que, las ganaderías procedentes de zonas restringidas tendrán libertad de movimientos entre sí, con las medidas de bioseguridad y desinfección establecidas, y siempre que procedan de ganaderías que no tengan síntomas clínicos de lengua azul, no así desde las zonas restringidas a las zonas libres de la enfermedad. En concreto, si el destino de los animales es el sacrificio, únicamente se necesita que en las explotaciones de procedencia no existan síntomas clínicos y una desinfección del transporte.

En cambio, ha puntualizado el consejero, "si los animales van para vida, se precisa, si son menores de tres meses que no requieren vacunación, que procedan de explotaciones sin síntomas clínicos y una desinfección del transporte y de los animales. Pero si tienen más de tres meses de vida, tanto ovino como bovino, sí necesitan una vacunación completa o un periodo de 14 días de desinfectación, con una prueba de PCR negativa". 

En este sentido, el Gobierno de Cantabria quiere reiterar el llamamiento a la calma, puesto que el consumo de leche y carne es completamente seguro. Además, ha dicho Palencia, a pesar de ser un golpe tremendo, uno más, al sector ganadero, a diferencia de la enfermedad hemorrágica, en este caso, existe vacunación, y las comunidades autónomas del norte de España ya han puesto en marcha el protocolo de actuación frente a la enfermedad.

La enfermedad de la lengua azul es del mismo género que la enfermedad hemorrágica y se transmite por un mosquito. Afecta más a los ovinos que a los bovinos. Además, el serotipo presente en la zona norte de España, que procede del sur del país, es el cuatro. Sin embargo, según el consejero, en el sur de Francia, en la zona de los Pirineos, hay declarados más de mil focos de lengua azul de bovinos del serotipo ocho, por lo que el Gobierno de Cantabria vacunará “frente a ambos, porque es una amenaza de cara al año que viene”, ha explicado Palencia. La Consejería ha encargado una vacuna polivalente para realizar una campaña de vacunación masiva y que la cabaña ganadera cántabra esté inmunizada frente a ambos serotipos.