Confirmada por primera vez la presencia de la bacteria de la tuberculosis en meloncillos en España
Un estudio del Grupo de Investigación en Sanidad y Biotecnología (SaBio) y el Grupo de Investigación en Gestión de Recursos Cinegéticos y Fauna Silvestre del Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC–CSIC, UCLM, JCCM), desarrollado en colaboración con el Centro de Vigilancia Sanitaria Veterinaria (Visavet UCM), detecta Mycobacterium bovis, la bacteria causante de la tuberculosis animal, por primera vez en meloncillos (Herpestes ichneumon) en España.
La tuberculosis es una enfermedad infecciosa de gran relevancia en ganado doméstico y fauna silvestre. A pesar de estar sometida a un ambicioso plan de erradicación en el ganado bovino y afectar a otras especies como ovino y caprino, la tuberculosis persiste especialmente en las regiones del centro y sur de la España peninsular. En dichas áreas, la ganadería en extensivo coexiste con la caza mayor, estableciéndose un ciclo de transmisión y mantenimiento de la tuberculosis por contactos directos e indirectos entre especies doméstica y silvestres, especialmente el ganado bovino, ovino y caprino, el jabalí, el ciervo y el gamo.
En el estudio se recogieron meloncillos atropellados en las provincias de Ciudad Real y Toledo y se analizaron mediante cultivo de micobacterias y espoligotipado, la técnica de referencia para el diagnóstico y confirmación de tuberculosis en ganado bovino. De entre los 25 animales analizados, 3 se confirmaron como positivos a Mycobacterium bovis, en concreto a los espoligotipos más frecuentes entre el ganado doméstico y fauna silvestre de la zona. Además, en ninguno de los animales se observaron lesiones típicas de tuberculosis, tales como granulomas, durante la necropsia.
Teniendo en cuenta la baja proporción de animales positivos a Mycobacterium bovis y la nula presencia de lesiones típicas de tuberculosis, así como la coincidencia de los espoligotipos con aquellos ya detectados en la zona de muestreo, los investigadores del estudio se inclinan por la hipótesis de que el meloncillo actúe como hospedador accidental, es decir, que son susceptibles de infectarse a partir de reservorios como el jabalí o el ciervo (por ejemplo, mediante el carroñeo), pero que jugarían un papel menor en el mantenimiento y transmisión de la tuberculosis.