“Minergie cambió la construcción de edificios principalmente mediante la introducción de la ventilación con recuperación de calor”
Entrevista a Ruedi Kriesi, fundador del Sello Minergie
El doctor Ruedi Kriesi fue el fundador del Sello Minergie en 1994 y uno de los impulsores más importantes de los edificios de consumo casi nulo. La creación de este estándar supuso un cambio radical a la hora de diseñar un edificio, aunque, como asegura Kriese, el principal cambio de Minergie no se produjo en el aspecto técnico, sino en la conciencia de la mejora de la comodidad y el valor de un edificio construido bajo este estándar.
Ruedi Kriesi, fundador del Sello Minergie. Fuente: Minergie Schweiz.
Usted fue una de las primeras personas que habló de construcción en términos de sostenibilidad y eficiencia energética. Fue pionero en la creación de edificios de energía cero. ¿Qué es lo que le llevó a idear y promover estos métodos de construcción alternativos?
Empecé a trabajar en casas solares ya en mis tiempos de estudiante en el Institute of Technology de Zurich (ETH) en 1975. Mi motivación era la preocupación sobre el efecto invernadero y el uso indebido de combustibles fósiles para algo tan sencillo como mantener caliente una casa. Aprendí los riesgos de un aumento de la concentración de CO2 en la atmósfera cuando iba a Secundaria en 1968, gracias a un físico nuclear, amigo de mi padre.
En 1994, se estableció el estándar Minergie y poco a poco se fue convirtiendo en omnipresente en el mercado suizo. Actualmente existen más de 40.000 edificios certificados. La elaboración de este estándar significó un cambio radical en la construcción, en el modo en que el proceso se planteaba y ejecutaba. ¿Cómo reaccionó la industria en aquel momento?
Existen actualmente un gran número de materiales y sistemas innovadores en el mercado que ayudan a construir de un modo energéticamente eficiente y reducir al mínimo el uso de combustibles fósiles. Sin embargo, muchos de estos productos que hoy existen eran impensables hace 30 años. ¿Con qué obstáculos tuvo usted que enfrentarse en ese momento?
Existen unos cuantos aspectos concretos que caracterizan una casa pasiva o una casa Minergie: diseño compacto, aislamiento térmico, estanqueidad, ventilación, tamaño y orientación de las ventanas, ventanas con control solar, masa térmica y energías renovables. ¿Qué papel juegan los sistemas de ventilación en construcciones de este tipo?
Hoy en día las unidades de ventilación controlan que el aire entre y salga para garantizar su calidad y una temperatura adecuada. Todo ello es posible gracias a años de investigación y desarrollo de soluciones innovadoras. ¿Cómo abordó usted estos aspectos 20 años atrás?
Pensar en construcción sostenible y estándares como Minergie y Passivhaus no es sólo una forma de ver la arquitectura, sino una manera de relacionarse con la vida y de buscar un equilibro respetuoso entre los seres humanos y su entorno. ¿Piensa usted que los contextos social y cultural son decisivos para la creación de edificios de este tipo?
Con relación a la pregunta anterior, ¿usted cree que una educación integral comprometida con la sensibilización y el respeto por el medio ambiente desde edades tempranas podría, a largo plazo, alentar el desarrollo de ciudades sostenibles?
En la Unión Europea hay algunos países con marcos legales que protegen la construcción de edificios de energía casi nula. Por otro lado, aún queda un largo camino a seguir en otros países, los cuales, como China o EE UU, son responsables de las emisiones de CO2 más altas. ¿Cómo convencería a los líderes de estos países para empezar a implementar normativas similares a las de la Unión Europea?
Construyamos grandes cantidades de casas eficientemente energéticas para demostrar su calidad superior de cara el usuario y esperemos a ver el efecto que produce en constructores de mente abierta de otros países.
Hay una diferencia en eficiencia energética de edificios entre Europa y los EE UU, aunque esta situación también puede estar sobreestimada debido al enorme hueco existente entre la política y la opinión de la gente. Hay muchos propietarios y constructores de viviendas, e incluso ciudades y estados enteros en los Estados Unidos, interesados en casas eficientemente energéticas, alentados por la irracionalidad de su política federal actual. Y por otro lado, el nivel real de eficiencia energética de los edificios en bastantes países europeos queda todavía muy lejos de los objetivos propuestos.
Ruedi Kriesi, fundador del Sello Minergie. Fuente: Minergie Schweiz.
¿Qué consejo daría a alguien que desea construir una vivienda de energía casi nula?
¿Cómo se imagina nuestras ciudades dentro de 200 años? ¿Hay utopías posibles?
La presión para reducir las emisiones de CO2, los gases tóxicos y la contaminación seguirá creciendo. Esto significa que las casas utilizarán menos energía y se convertirán en eléctricas por completo, igual que el tráfico. La mayoría de los materiales serán transportados mediante sistemas automáticos y estacionarios, como a través de tubos o sobre raíles, no en camiones. Yo no creo en la producción de energía local en las ciudades, como se está promoviendo ampliamente hoy en día. Estos espacios, que se encuentran bien conectados para los humanos, los materiales, la energía y la información, serán siempre demasiado caros para conseguir la pequeña cantidad de aproximadamente 1 MWh por metro cuadrado que el sol irradia en la superficie de la tierra en un año. Esta energía debe conseguirse en áreas desiertas y ser transportada a las ciudades mediante tubos o cables.