Los consejos de Deinsa para protegernos del sol en el trabajo
Redacción Protección Laboral15/07/2016
Agricultores, trabajadores del sector de la construcción, pescadores, y policías entre otros, se exponen al sol a diario y, por tanto, a sus perjuicios como daños en la piel, quemaduras, manchas, foto-envejecimiento prematuro, cataratas o cáncer de piel, entre otras dolencias y enfermedades.
Por ello, es muy importante que las medidas de protección laboral impliquen, en primer lugar, una evaluación exhaustiva -por parte de los responsables de riesgos laborales de las empresas- de los riesgos a los que se exponen los trabajadores, además del uso de Equipos de Protección Individual (EPIs) y cursos de formación sobre la aplicación y uso de los mismos y sobre los riesgos que implica la exposición al sol. Además, con medidas organizativas como la modificación de horarios, en los casos en los que sea posible, también se puede minimizar el tiempo de exposición solar.
DEINSA recomienda el uso de algunos EPIs generales para estos casos:
Debe adaptarse a las características físicas de la piel del trabajador y, en caso de que éste se encuentre en contacto con el agua (como puede ser el caso de los pescadores), que además sean resistentes a ésta. Se recomienda aplicarse la crema al menos media hora antes de ponerse en contacto con el sol y repetir su aplicación cada dos horas. Es conveniente asimismo utilizar productos sin conservantes, sin colorantes, sin perfumes y sin parabenos.
Éstas han de cumplir unas exigencias esenciales de salud y seguridad, para las que contarán con la marca CE, y sus aspectos técnicos se adaptarán tanto a las características personales del trabajador (p.ej.: en el caso de que éste necesite gafas con graduación) y de la labor a realizar. Se recomienda que las gafas reduzcan entre un 99 y un 100% la radiación ultravioleta y sean de cristal u orgánicas, pero en ningún caso de plástico.
La ropa es otra barrera de protección frente a los peligrosos rayos ultravioleta. El vestuario, por lo tanto, tendrá que ajustarse a las características del trabajo.
Infografía realizada por DEINSA.
Por ello, es muy importante que las medidas de protección laboral impliquen, en primer lugar, una evaluación exhaustiva -por parte de los responsables de riesgos laborales de las empresas- de los riesgos a los que se exponen los trabajadores, además del uso de Equipos de Protección Individual (EPIs) y cursos de formación sobre la aplicación y uso de los mismos y sobre los riesgos que implica la exposición al sol. Además, con medidas organizativas como la modificación de horarios, en los casos en los que sea posible, también se puede minimizar el tiempo de exposición solar.
DEINSA recomienda el uso de algunos EPIs generales para estos casos:
Crema de protección solar
Debe adaptarse a las características físicas de la piel del trabajador y, en caso de que éste se encuentre en contacto con el agua (como puede ser el caso de los pescadores), que además sean resistentes a ésta. Se recomienda aplicarse la crema al menos media hora antes de ponerse en contacto con el sol y repetir su aplicación cada dos horas. Es conveniente asimismo utilizar productos sin conservantes, sin colorantes, sin perfumes y sin parabenos.
Gafas de protección
Éstas han de cumplir unas exigencias esenciales de salud y seguridad, para las que contarán con la marca CE, y sus aspectos técnicos se adaptarán tanto a las características personales del trabajador (p.ej.: en el caso de que éste necesite gafas con graduación) y de la labor a realizar. Se recomienda que las gafas reduzcan entre un 99 y un 100% la radiación ultravioleta y sean de cristal u orgánicas, pero en ningún caso de plástico.
Vestuario de protección
La ropa es otra barrera de protección frente a los peligrosos rayos ultravioleta. El vestuario, por lo tanto, tendrá que ajustarse a las características del trabajo.
Infografía realizada por DEINSA.