La raza ovina Ansotana destaca por su adaptación a las condiciones del Pirineo
La raza ovina Ansotana, originaria del valle de Ansó, comarca de Jacetania en el Pirineo aragonés, tiene una larga historia ligada a la tradición pastoral de la zona. La resistencia a las inclemencias del tiempo, su capacidad para sobrevivir en terrenos difíciles y su carácter rústico la convierten en una de las razas más valiosas para los ganaderos de la zona.
La Ansotana es una raza de tamaño medio, con una buena capa de lana blanca y una morfología que le permite desplazarse con agilidad en terrenos montañosos. Su cabeza es pequeña y de perfil recto.
A pesar de su rusticidad, esta raza es conocida por su alta capacidad de adaptación tanto a las duras condiciones climáticas del Pirineo como a las distintas formas de manejo ganadero, según destaca Oviaragón.
En cuanto a su producción, la raza Ansotana destaca por su carne de excelente calidad, el Ternasco de Aragón, muy apreciado en la gastronomía aragonesa.