Utilización de tecnología en la ganadería extensiva
Santos Salgado
Ganadero y CEO de Ventum Innovación
22/12/2023Ventum Innovación es una empresa que desarrolla soluciones para el sector de la ganadería. Esta empresa nace desde el propio sector ovino, ya que buena parte del equipo que la conforma son productores de ovino en extensivo. Este conocimiento del sector nos ha permitido detectar un gran número de dificultades a las que diariamente se enfrentan los ganaderos.
Hemos desarrollado una serie de dispositivos que permiten obtener información de forma remota para controlar la explotación desde cualquier lugar. Gracias al uso de esta tecnología, es posible conocer el nivel de pienso que hay en los silos, la cantidad de agua que hay en los depósitos, la temperatura del interior de las naves, el control de los tanques de leche o el lugar en el que pastan las ovejas.
Gavilán Control es un software con el que el ganadero puede monitorizar el control ambiental de las instalaciones. Es una solución que el ganadero lleva siempre consigo, ya que se puede manejar con el teléfono móvil. También hemos desarrollado dispositivos para la supervisión y monitorización de fincas ganaderas.
La problemática del sector y sus soluciones
El sector vive una situación complicada, debido a la subida de los costes de producción y a la incertidumbre sobre el futuro de la ganadería. Se está produciendo un fuerte descenso de la cabaña ganadera y no hay relevo generacional, ya que las personas jóvenes no quieren seguir trabajando todos los días del año.
Para buscar una solución a estos problemas, hemos abogado por la digitalización. Debemos tomar datos de las explotaciones para poder tomar las mejores decisiones. En ganadería extensiva, no se realizan normalmente esas mediciones y se desconoce en muchos casos índices como el número de corderos por hembras, el consumo real de los animales, la calidad del aire…
Digitalizar es tomar datos, algo que se puede hacer en una libreta, como se ha hecho tradicionalmente, o utilizando un software. Además, gracias a los sensores, esos datos se pueden tomar de forma automática, lo que ahorra muchas horas de trabajo.
Una de las problemáticas que nos encontramos en el campo es que en ocasiones no hay cobertura de internet. Por esa razón, fue importante comenzar a trabajar con el internet de las cosas, que nos permitió dar cobertura a una zona por muy remota que fuese y comunicar sensores en una finca que estuvieran a kilómetros de distancia para enviar unos datos que acaban directamente en el teléfono móvil del ganadero.
Pueden utilizarse diferentes tipos de sensores:
- Calidad ambiental. Los animales deben tener unas buenas condiciones ambientales, porque se reducirá el impacto de determinadas enfermedades. Es importante medir la calidad del aire. Mediante una serie de automatismos, se puede tener un sistema de apertura de puerta automático o de ventilación, para el control de las temperaturas.
- Control de consumos y calidad del agua. Permite controlar accidentes que puedan ocurrir en la red de agua y que provoque que los animales no puedan tomar agua.
- Control de consumos de pienso. Mediante un sensor en un silo, se puede conocer la cantidad de comida que queda en el silo. Se puede compartir esa información con el propio fabricante, para que sea el encargado de llenar el silo. Además, el fabricante también obtendrá un beneficio al optimizar sus rutas de reparto. De esta forma, se puede controlar la energía que consumimos y reducir la huella de carbono de nuestros productos.
- Control de la leche de tanque. Se puede medir el volumen de leche que se tiene en el tanque para compartirlo con la empresa que recoge la leche y poder optimizar las rutas de recogida. También muestra la temperatura en la que se encuentra la leche. Por último, se puede monitorizar el funcionamiento del agitador y, si en algún momento se para, genera una alarma y se puede actuar para evitar que tenga que tirarse leche. Esa información de la temperatura se puede compartir con la industria láctea y asegurar una trazabilidad del producto.
El control de los datos es fundamental. Se tienen que controlar de una manera clara, por lo que nuestra plataforma permite tener toda la información en todo momento de una manera muy visual. A partir de ese sistema, se pueden sacar los datos en Excel, exportarlos, añadirlos a otro sistema de gestión.
En la actualidad, tenemos dos líneas de trabajo: seguir desarrollando nuevos sensores que nos permitan ir tomando datos de forma cada vez más sencilla y el desarrollo del Cuaderno de Explotación. Aunque es una obligación legal, también puede considerarse como una oportunidad para que muchos ganaderos empiecen a tener un contacto con el trabajo de gestión en una explotación. Estamos trabajando para que se puedan ir integrando en el Cuaderno de Explotación todas las necesidades que vayan teniendo los ganaderos en el futuro. Una vez que un ganadero comienza a utilizar la tecnología, ve las ventajas que tiene y no deja de usarla.
Un aspecto que puede ser muy interesante para el futuro es la Inteligencia Artificial. Esta herramienta permitirá optimizar la gestión de las explotaciones si se aplica en los procesos productivos de una granja. Se va a convertir en un aliado para abandonar la imagen del pastor que trabaja en solitario con el pastor que tiene el apoyo de la gestión.
Conclusiones
Tenemos que buscar que la tecnología sea parte de nuestro día a día en las explotaciones ganaderas que sea sencilla de implantar, ya que nos van permitir optimizar al máximo los recursos productivos de las granjas, nos va a permitir anticiparnos a las enfermedades y nos van a facilitar a los ganaderos disponer de una mejor calidad de vida y que nuestras granjas puedan subsistir.
Hay que implicar a las administraciones y todas aquellas organizaciones que tengan interés en el sector para que aboguen por esta línea y aprovechar las oportunidades, como las ayudas del Kit Digital, que pueden permitir al ganadero dar un primer paso hacia la digitalización.