Construcciones Navales P. Freire firma un contrato con Grupo Calvo para la construcción de un nuevo buque atunero congelador
Grupo Calvo ha anunciado la renovación de su flota con un nuevo atunero cerquero congelador de 1.500 m3 de capacidad que faenará bajo bandera española y cuya construcción ha sido adjudicada al astillero gallego Construcciones Navales P. Freire.
La construcción de este buque supone el inicio de un ambicioso proyecto de renovación de la flota que la compañía llevará a cabo en los próximos años para sustituir los barcos más antiguos por otros más modernos y eficientes, con el fin de garantizar su capacidad de suministro de materia prima de calidad de forma sostenible.
El contrato de este nuevo buque se firmó en las oficinas de la compañía armadora en Madrid el pasado viernes 8 de marzo y tendrá una duración de 19 meses. El buque prestará servicio en los caladeros que la empresa gestiona en el Océano Atlántico.
Este buque, de 77 m. de eslora es un buque atunero congelador proyectado para la pesca del atún por el sistema de cerco y dispondrá de 18 cubas con una capacidad de congelación de 1.500 m3 aproximadamente.
El astillero cuenta con muchos años de experiencia en la construcción y reparación de buques atuneros para armadores nacionales e internacionales, así como en arrastreros equipados con tecnología de última generación como el recientemente entregado “Markus” para armadores groenlandeses.
“El mercado de nuevas construcciones de buques atuneros es sin duda estratégico para Freire ya que se trata de buques altamente sofisticados donde la capacidad de coordinación y calidad son aspectos clave para acometer con éxito estos proyectos. Estamos muy satisfechos de haber logrado este contrato para un armador tan importante a nivel internacional, y además de origen gallego, como Calvo con el que mantenemos vinculación desde hace más de 40 años” comentan Marcos y Guillermo Freire, directores generales de Construcciones Navales P. Freire.
“El suministro de atún de forma eficiente y responsable es un aspecto crítico de nuestro negocio. Disponer de flota propia nos permite no solo garantizar el suministro de producto de calidad sino también ser parte activa en asegurar la sostenibilidad de la materia prima. La construcción de este barco en Galicia y por una empresa gallega es también una muestra de nuestro compromiso con el desarrollo de la economía y la sociedad de la región que nos vio nacer hace más de 75 años”, comenta Mané Calvo, Consejero Delegado.
Grupo Calvo cuenta con una flota propia de 12 embarcaciones: dos buques mercantes, tres de apoyo, y siete atuneros. La incorporación del nuevo buque no supondrá un aumento de la capacidad de pesca del Grupo, ya que se utilizará la baja de un barco de la compañía que se desguazó en 2017 de acuerdo a la normativa comunitaria y nacional aplicable, y con la autorización de las autoridades competentes en materia de estructuras pesqueras. La compañía cumplirá así con el compromiso de autolimitación de su capacidad, no incorporando nuevas unidades sin dar de baja un buque o buques de capacidad equivalente.
Certificación de Pesca Responsable APR
Para garantizar la sostenibilidad en toda la cadena de valor, uno de los pilares estratégicos de Grupo Calvo, una vez finalizada la construcción y al comienzo de las operaciones, el nuevo buque será auditado para dotarle de la certificación APR (Atún Pesca Responsable), tal y como ocurre en el resto de atuneros de la compañía. Esta certificación evalúa no solo aspectos medioambientales que garantizan que se cumplen los mejores estándares para la pesca de atún de cerco, lo que incluye iniciativas como el embarque de observadores independientes en todos sus barcos, el control y la localización vía satélite de su flota, entre otros; sino que también supervisa el cumplimiento de las condiciones laborales, sanitarias y de seguridad de los trabajadores, tal y como establece el Convenio 188 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
En este sentido, en el diseño Grupo Calvo ha puesto especial énfasis no solo en el equipamiento técnico sino también en la habitabilidad del barco de forma que ofrezca el mayor confort y calidad para las condiciones de trabajo y vida de las 30 personas que formarán su futura tripulación.