Europêche presenta a la Comisión Europea asuntos clave para el futuro del sector pesquero
La patronal europea del sector Europêche se ha reunido con Joao Aguiar Machado, director general de Pesca de la Comisión Europea (DG Mare), para trasladarle las principales preocupaciones del sector en relación con distintos asuntos, políticos y legislativos actualmente en desarrollo, tanto a nivel europeo como internacional.
Al igual que Aguiar Machado, Europêche valora positivamente los logros conseguidos en la mejora del estado de los stocks pesqueros, un avance que se traduce en poblaciones más saludables y, por ende, beneficios socioeconómicos para el sector. Sin embargo, el sector pesquero ha insistido en que el realismo debe guiar la toma de decisiones para que éstas resulten aplicables en la práctica pesquera, un principio del que carece la política de obligación de desembarque.
La dimensión exterior de la Política Pesquera Común (PPC) es otro asunto clave para el sector pesquero y, en este sentido, Aguiar Machado y Europêche coinciden en que los Acuerdos de Pesca Sostenible (SFPA) de la UE con terceros países son referentes de transparencia y mutuamente beneficiosos para la UE y para la parte con la que se suscriben.
En este sentido, Europêche ha solicitado a la DG Mare más esfuerzo y labor diplomática para establecer acuerdos de pesca adicionales, vinculados a las políticas regionales y de comercio europeas. Con este objetivo, el sector demanda apoyo diplomático al más alto nivel para renovar, en términos justos, los acuerdos con Gabón, Guinea-Bissau, Guinea Ecuatorial y Marruecos; e insiste en la necesidad de establecer una red coherente de SFPA que garantice accesos de pesca a la flota comunitaria.
Más peso de la UE en las ORP
Durante el encuentro con Aguiar Machado, Europêche ha expresado asimismo su frustración por el resultado de las últimas negaciones en las ORP que gestionan determinadas pesquerías en el Atlántico y el Mediterráneo (ICCAT) y el océano Índico (IOTC). De acuerdo con Europêche, la UE se encuentra cada vez más aislada y, como resultado, cada vez resulta más difícil para sus representantes la defensa de los intereses del sector pesquero europeo en aguas internacionales.
Europêche recuerda que el resultado de las negociaciones en ICCAT fueron decepcionantes para el sector, específicamente en lo referente al atún rojo. Con respecto al océano Índico, solicita que la UE actúe de forma decidida ante la presión de una coalición de terceros países que trata de cambiar los criterios de asignación de las cuotas pesqueras con el objetivo de expropiar a la flota de larga distancia comunitaria de sus derechos históricos; una acción a todas luces desequilibrada, especialmente si se tiene en cuenta la contribución decisiva que ha jugado en el desarrollo socioeconómico de las comunidades costeras del océano Índico. Europêche advierte que, en caso de imponerse la posición de esta coalición, los recursos pesqueros asignados a los países costeros, que no tienen capacidad suficiente para explotarlos, acabarán en manos del mejor postor, a saber, flotas de países asiáticos que no tienen en consideración ni la sostenibilidad de los recursos pesqueros ni la de las comunidades locales, como ya se ha demostrado en África Occidental.
Europêche también ha hecho hincapié en la importancia de mantener las relaciones entre la UE y Noruega, si bien ha subrayado la necesidad de defender los derechos de los estados miembros en Svalbard, donde la situación sigue siendo desequilibrada a favor de Noruega y, particularmente, en detrimento de la flota cangrejera de la UE. Por este motivo, Europêche solicita mayores esfuerzos por parte de la CE y sus servicios legales para dar respuesta a esta cuestión.
En otro orden, la patronal coincide con la CE en la necesidad de simplificar el marco establecido en 2009 para el control de las actividades pesqueras. Específicamente, y de acuerdo con el sector, esta revisión legislativa debe traducirse en un sistema de sanción armonizado, sistemas de monitorización a un coste asumible para los barcos de menos de 12 metros, la inclusión en la regulación de la pesca recreativa y el fortalecimiento del papel de la Agencia Europea de Control de la Pesca (EFCA).
Europêche también expresa su preocupación en relación con las próximas negociaciones del trílogo encaminadas a adoptar una nueva regulación para la conservación de los recursos pesqueros que establece cómo, dónde y cuándo pueden desarrollar su actividad los pescadores. La patronal continúa preocupada por la propuesta de prohibición de la pesca eléctrica que, en su opinión, está basada en emociones y no en datos científicos.
Exigencias y restricciones que abocan al sector a la extinción
Si a estas restricciones se suman, además, medidas como la ampliación del tamaño de ciertos tipos de malla para las flotas pesqueras demersales, junto con más exigencias medioambientales, objetivos estrictos y reglas invariables de composición de las capturas, Europêche augura que el sector estará condenado a la extinción. De acuerdo con la patronal, el sector necesita más flexibilidad para cumplir con la obligación de desembarque y lograr los objetivos de RMS en 2020; y propone que, bajo un régimen totalmente documentado, los pescadores dispongan de más flexibilidad.
Por otro lado, y a la vista de las propuestas futuras de la CE para el establecimiento de Planes Plurianuales (MAP) para la gestión de las pesquerías demersales en el Atlántico occidental y el Mediterráneo occidental, Europêche solicita normas realistas y adaptables que posibiliten el cumplimiento de la PPC con una base regional.
Según el secretario general de Cepesca y presidente de Europêche, Javier Garat, “valoramos la disposición de la CE para superar los múltiples problemas que afronta la industria pesquera europea, especialmente en este momento crucial en el que las decisiones adoptadas por la Comisión tendrán una influencia en la definición del futuro de la pesca”. “2019”, -añade Garat- “será un año clave definido por la plena entrada en vigor de la obligación de desembarque, el Brexit y la exigencia de niveles de Rendimiento Máximo Sostenible (RMS) para todos los stocks comerciales”.
Ante estos retos, Europêche solicita el apoyo decidido de las instituciones europeas para facilitar la adaptación de la flota europea a los nuevos escenarios y garantizar la continuidad de su actividad tanto en aguas comunitarias como internacionales. “No podemos olvidar”, subraya Garat, “que tratamos con el medio de vida y la seguridad del bienestar de muchos pescadores y sus familias”.